IV: 'Lectura prohibida'

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🚫 ¡ADVERTENCIA! 🚫

INTENTO DE LEMON KK ;-;

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— ¡Ya-a~! ¡Correte de una vez! — medio gritó, medio gimió al recibir las fuertes embestidas del peligris. En lo único que pensaba era que el contrario tenía un gran aguante y que en cualquier momento lo partiría por lo bruto que era. Pero le gustaba.

— Di las palabras mágicas — pidió jadeando juntoa a una sonora nalgada. Sonrió satisfecho al ver que le dejó una impregnada marca de cinco dedos -los suyos- al blanquecino.

— ¡Ni en sueños! ¡Ah~...!  — en ese momento se arrepintió al sentir como el peligris tomó su erección y apretó la punta para así, evitar que se corriera. — Serás hijo de... ¡Ah~~...! — el peligris sonrió satisfecho y con su mano libre afianzó su agarre en la delicada cintura del mayor, mientras se dedicaba a atacar su cuello dejando marcas que no saldrían en semanas. Le gustaba marcar aquella exquisita piel blanquecina para que supieran que era suyo.

— Di las palabras mágicas bebé — susurró en su oído con la voz enronquecida por el placer, mientras atacaba el punto dulce del blanquecino y escuchaba como este soltaba incoherencias...  — Dilas para mí, solo para mi... — Sintió como el de cuerpo más pequeño, se estremecía de placer por todo lo que le estaba haciendo y eso que estaban de pié. "Hubiera sido mejor una cama", pensó.

— ¡Ah! ¡Ah! — sollozaba de placer. Era un lío de gemidos, jadeos y sollozos, pero no quería dejar su orgullo de lado ante aquel peligris de cuerpo musculoso que le estaba torturando. — ¡A la mierda! — gimió y se abandonó a merced del contrario. — ¡Cogeme Daddy! ¡Cogeme! — gritó desesperado. — ¡Daddy jodeme bien jodido de una puta vez! — el peligris sonrió de lado más que satisfecho y aumentó su velocidad creando que el blanquecino se tambaleara y le flaquearan las piernas por el ritmo bestial que era incapaz de seguir, pero que al final y en cuentas, le encantaba. Es más lo volvía loco. — ¡Más rápido! ¡Ma-ás! ¡Ah! — el peligris retiró su dedo de la punta del pene del contrario, cuando sintió ese tan conocido cosquilleo y con su mano comenzó un vaivén casi frenético en el pene del mayor para llegar a un ritmo similar al que le proporcionaba con sus erráticas embestidas. — ¡Ya-a~...! Me ven...

— ¡Park Jimin! — el nombrado dio un brinco en su lugar. Lo habían descubierto. — ¡¿Se puede saber que estás haciendo?! — se acercó y colocó las manos en su cadera, mirando al menor más que enfurecido.

— Emm, yo... — no pudo terminar la frase cuando Jin se le acercó y le quitó su celular.

— ¡Te dije que estabas castigado! —le reprendió mientras le apuntaba con el aparato. — ¡Te traje al restaurante para que me ayudaras, no para que te pusieras a jugar con tu celular! — lo regañó. El menor sólo podía pensar en que el capítulo ChanBaek, que estaba leyendo -que acababa de ser publicado por su autora, mejor dicho autor favorito- estaba en pantalla justo ahora, en manos de su hermano Jin y que precisamente era puro lemon.

Esperaba y rogaba que el mayor sólo bloqueara la pantalla sin ver lo que había allí, sino moriría de vergüenza y posiblemente Jin lo castigaría otra vez.

— Lo siento Hyung, es-estaba hablando con TaeHyung — mintió rápidamente. — El tonto se durmió otra vez durante el examen y... — Bueno, eso no era una mentira que digamos...

— ¿Y...?, eso no es novedad — refutó su hermano encogiendose de hombros con obviedad. Jimin pensaba que podría decir para mantener calmado al mayor.

'El Escritor' • YoonMin  | Completo✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora