CAPITULO X

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En el que se cuenta una historia del pasado.

-Bien. Llegamos- habló la chica pelinegra- no es mucho pero aquí podemos estar sin molestias-

Llegaron a una especie de cueva con un aspecto parecido al de un cuartel, para que se den una idea el cuartel era una casa que parecía a el refugio de la resistencia comandada por Mirai-Mai.

-Esto es genial- dijo Trunks - hay mucho espacio para explorar, no crees Goten?- pregunto el pelilila.
-Ya lo creo Trunks- contestó Goten.
-Y quien vive aquí?- preguntó Krilin.
Kiana al oír esto tomo una actitud triste y dirigió la mirada hacia al frente sin poner la vista en ninguno de los presentes.
-La gente que habitaba este planeta  solía vivir aquí- habló la pelinegra quien mantenía su mirada triste.
-Dijiste "habitaban"?- preguntó Vegeta cruzando los brazos al mismo tiempo que enmarcaba una ceja.

Antes de comenzar a hablar, Kiana lanzó de la palma de su mano un poco de energía hacia un pedazo de madera, que casualmente se hallaba en aquel lugar y así crear una fogata para que los demás pudieran apreciar que el lugar en el que se encontraban en realidad era grande.

-Este planeta- comenzó la chica- era un hermoso lugar para vivir pero...- suspiró algo acongojada- todo se volvió gris el día que Haku y su ejército arribamos este planeta- hiba a continuar pero fue interrumpida por su hermano.
-Arribamos?- preguntó Goku algo intrigado pues las palabras de la pelinegra que estaba enfrente de él lo hicieron pensar que tal vez ella conocía bastante bien a quien se había atrevido a llevarse a su esposa.

Suspiró una vez más Kiana antes de responder a la interrogante de su hermano- lo que sucede es que.... yo- la verdad no sabía si debería decirlo aún, es decir, había encontrado a su hermano y a su mejor amigo y pensó que si lo ocultaba por más tiempo las cosas se complicarían más así que decidió soltarlo de una vez- yo....solía ser una subordinada de Haku-
Ya, lo había confesado, ahora lo único que quedaba era ver que pensaban los demás. Ya no tenia más que ocultar pues si quería comenzar una nueva vida junto a ellos, o en dado caso sola, debía dejar el pasado atrás y ser honesta desde el primer momento.
-Así que igual te dedicabas a asesinar gente- dijo Goku un tanto decepcionado de la chica pues no pensó que ella fuera esa clase de personas.
-No. Jamás haría eso. Pero hacía cosas igual de horribles que jamás me podría perdonar- contestó Kiana un tanto molesta pero a la vez triste y al mismo tiempo decepcionada y avergonzada de si misma.
-Yo se que no serías capaz de matar a nadie y si lo hiciste no fue algo que tu pudieras controlar-   hablo Vegeta haciendo que la saiyajin alzara la mirada mientras se observaba una lágrima correr por su mejilla mientras le dedicaba una sonrisilla siendo respondida por Vegeta.
-Y que pasó?- preguntó Gohan, pues al igual que Goku y Vegeta, él sabía que su tía no era una persona malvada.
-Verás- habló la chica- luego de ver por ultima vez a Vegeta y pensar que quizás habían muerto, llegué a un planeta con un ambiente precioso, su nombre era "Kappa", ahí me hospedó una mujer bondadosa llamada Shinku, ella era la sabía del pueblo y aun estando siempre ocupada tenía tiempo para mí- dijo Kiana mientras recordaba a aquella mujer a la que ella llamaba "Tía Shinku", recordaba su mediana y algo robusta figura, su cabello plateado, y su sonrisa que siempre transmitía tranquilidad- ella me cuido como su hija- continuó ella- y yo la quería mucho.
-Ella era algo así como mi abuelito?- preguntó Goku ya que recordó a su difunto abuelo Gohan quien igualmente había cuidado de él cuando llegó a la tierra.
Kiana sonrió- quizás- respondió a su hermano obteniendo como respuesta una sonrisa de la misma manera- bueno pues debido a que mi tía se dio cuenta de mi fuerza decidió que seria buena idea que entrenara y así lo hice. Salve a mi planeta en varias ocasiones y como agradecimiento, mi tía me regaló esto- dijo Kiana mientras mostraba un collar que traía en su pecho con un dije que parecía ser una guadaña.
-Un collar?- pregunto Krilin.
-Te equivocas calvito esto no es solo un collar- habló la chica.
-Es la espada de los diez mil lamentos verdad?- preguntó Gohan un tanto asombrado.
-ACERTASTE!!!- contestó Kiana felizmente.
-Gohan tu sabes que es eso?- preguntó Goku a su hijo mayor.
-Escuche hablar sobre ella. Se dice que el primer portador que la tuvo era un sujeto de corazón oscuro,  malas intenciones y orgulloso- comenzó Gohan mientras todos volvieron sus miradas a Vegeta, causando un leve enojo de éste para que gritara:
-Agh, continua mocoso-
-Bueno pues se dice que el primer portador que la tuvo, asesinó a su pueblo con el fin de mostrar hasta donde llegaba su poder, se cree que la población era de diez mil habitantes y que sus almas están atrapadas ahí, de ahí su nombre como la espada de los diez mil lamentos, también se dice que quien la tenga tiene un poder grandioso ya que la espada-
-Cambia de forma si se lo ordenas- interrumpió Kiana a su sobrino para terminar el relato.
-correcto- terminó Gohan con una sonrisa.
-Vaya, Gohan se ve que sabes mucho me tienes sorprendida- Añadió Kiana esbozando una tierna sonrisa dedicada al mayor de sus sobrinos.
-Gracias tía, pero no es para tanto- respondió Gohan al comentario que había hecho la pelinegra haciendo una pose parecida a la de Goku mientras se oían las risas de los demás guerreros.
-Oye tía Kiana, esa arma es genial. Crees que..podríamos usarla?- pidió Goten con una carita a la que no se le podía decir que no.
-Este- inició la saiyajin mirando primero a los dos niños, luego a Goku, luego a Gohan y finalmente volvió la mirada a los pequeños quienes la miraban con emoción- verás Goten... Suena como algo peligroso que un padre no dejaría que hicieran- continuó Kiana viendo como las miradas de los niños se entristecía- pero- continuó haciendo que la mirada de los chiquillos se alzara- yo no soy su madre, verdad?- terminó la pelinegra con una sonrisa.
-SII!!- gritaron ambos pequeños con emoción mientras Kiana les entregaba su colgante.

TU ERES MI VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora