Ahora que Joker y yo somos cómplices, o algo mas, todo va a resultar más fácil, me siento mucho más segura junto a él. Cuando llegó la hora de desayunar quise salir a buscar algo de comer, pero el Joker me detuvo otra vez...
Joker: - Nuncasalgo al mismo horarioquelosdemás, esperemosaquetodosterminendedesayunaryluegovamosnosotros. Mientrasesperamosquieroaprovecharparaplanteartealgoquetengoenmentehacemuchoperoquenuncalopudeconcretarpornoteneralapersonacorrectajuntoami -.
Se sentó en su sillón de cuero y palmeó sus piernas...
Sus caricias eran irresistibles, sentía que me derretía... Su mano derecha seguía en mi muslo y la izquierda subía por mi espalda hasta mi nuca para luego volver a bajar.
Nuestras miradas se cruzaron, en sus ojos se podía notar la esperanza, el deseo de ser acompañado por alguien más, alguien que lo entendiera y compartiera su locura.
Al terminar mi desayuno uno de los enfermeros se acercó a mi, no era el mismo de la otra vez, este era joven y apuesto y por lo que leí en su placa, su nombre era Bruce Wayne.
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Bruce: - Disculpa ¿Podemos hablar? -.
______: - Claro, nohayproblema -.
Al llegar a su oficina tomó asiento y me pidió que haga lo mismo, cuando estuvimos frente a frente comenzó a darme una larga y aburrida charla sobre lo malvado que era el Joker y que era una mala idea estar junto a él. Pero debo admitir que captó mi atención al ser tan amable, al terminar la charla dijo...
