A veces no logro entender ese chico.

— Bueno creo que será mejor ponernos en marcha.— Golpeó sus piernas con ambas palmas de sus manos.— ¿Nos juntamos en la salida o el sexy de tu novio vendrá por ti?— Preguntó.

James y Luna por fin se conocieron, a él le pareció muy graciosa y le dio cierto aire a Rebeca.

— No, él debe ir a la reunión escolar de su hermana y luego se pasara al trabajo. Así que podemos irnos juntas.— Le sonrío.

— ¡Ok! Entonces nos vemos en la salida.— Me dio un beso en la mejilla, cogió sus cosas y se fue directo al salón de clases.

Guardo en mi mochila mis audífonos y me dirijo también a mi próxima clase, entro al salón y saludo algunos de mis compañeros de carrera pero a los demás no los conozco así que me siento en uno de los puestos disponibles.

La profesora entra al salón con un maletín y su portátil en mano, se presenta con nosotros y comienza enseguida con su clase sin antes de darnos una introducción en cómo estaba dividido este taller para los estudiante de último año.

La clase estaba yendo de maravilla hasta que toda nuestra atención fue dirigida hacia la puerta en donde Kyle y su mejor amigo venían entrando de mala gana. Ambos chicos entraron ignorando por completo al docente frente a ellos.

Son unos malos educados.

— ¿Esta es hora de llegar a mi clase jovencitos?— Preguntó la profesora.

Silencio.

— Tuvimos un pequeño problema con el rector, pero lo importante es que estamos aquí ¿no?— Ella suspiró, supongo que todos los docentes deben saber quién es Kyle.

No puedo evitar mirar de reojo a mis compañeras, parecían totalmente embobadas por ambos chicos. Pero el pelinegro y su amigo no se quedaron atrás, también correspondieron a las sonrisitas coquetas de las demás chicas.

— Hablare con el rector más tarde.— Dice.— Vayan a sentarte y déjenme continuar con mi clase.

Ambos chicos pasaron por mi lado dejando en el aire su perfume, cierro los ojos al darme cuenta que se sentaron atrás de mi.

Genial.

Cuando la clase dio por finalizada le envió un mensaje a Luna pidiéndole que nos reunamos en el casino para comer algo antes de volver a casa.

Cuando abro las puertas un silencio extraño se formó en el ambiente, todas las miradas estaban puestas sobre mi y debo admitir que me sentí un poco intimidada. Comenzaron a murmurar un par de cosas, los ignoro por completo y voy donde esta mi amiga sentad acompañada de Diana (para mi sorpresa) ya que Diana siempre viene hacia nosotras cuando yo estoy.

Al parecer comienzan a llevarse bien, más lo digo por parte de Luna.

— ¿Por qué todos me mirar como si fuese la actriz de The Vampire Diaries?— Le pregunto a Luna al momento de sentarme a su lado y, sin su permiso cogí un trozo de un emparedado de jamón.

Luna parecía que estuviese en otro mundo porque ni cuenta se dio que estaba sentada frente a ella, estaba pegada tecleando con desesperación en su aparato móvil.

— Creo que Katia ha comenzado a joder otra vez.— Luna abrió su mochila.

— ¿De qué hablas?— Le pregunto, entonces Luna saco de su interior un papel arrugado.— ¿Y esto qué?

— Cuando entramos aquí todos estos papeles estaban esparcidos por las mesas y en el suelo.— Dijo.

Hay una foto mía en el centro del papel enseñando mis pechos (esta fotografía claramente está montada) y debajo de esta hay algo escrito en grande.

Choose me: Un Final Definitivo.Where stories live. Discover now