Me acomode en el sofá abrazando mis piernas pensando en que decirle mientras él ponía una manta a mi alrededor.

 Estoy bien mi voz salió más quebrada de lo que esperaba.

  Estoy bien mi trasero contesto molesto —. Llevo desde ayer tratando de hablar contigo, estuve a punto de llamar a la policía cuando no abrías. Me encontré esto de camino aquí.

Sobre la mesita dejo caer lo que alguna vez fue mi celular, no había sobrevivido a la caída.

  No me creerías aunque te lo dijera susurre sin apartar mi vista del aparato destrozado.

Me estas asustando ¿Qué está pasando? — inquirió Amir preocupado.

 Tengo miedo le dije sintiendo mis ojos llorosos. Odiaba llorar —. No quiero decirlo porque tengo miedo que tú no me creas y si no lo haces...  e-estoy enloqueciendo Amir.

 Tranquila, solo déjalo salir ¿sí?  dijo acariciándome la espalda en gesto tranquilizador —. Yo escucharé.

Asentí mientras mi cabeza procesaba lo que quería decir, todo en lo que había pensado desde que desperté. 

  Creo que la cosa que mato a Owen,  aún seguía aquí. 

¿El oso? 

  No fue un oso. 

Si,  lo capturaron. Ya no está aquí ¿Porque piensas que si?

  Porque me ataco ayer, pero no fue un oso.

No sabía si hacia lo correcto o no, si había alguien al que le podía decir cualquier cosa era Amir, pero no lo quería abrumar como lo estaba yo. Por lo tanto omití detalles... muchos detalles.

  ¿Una piraña mutante te ataco? pregunto incrédulo.

 ¿Porque lo haces sonar absurdo? 

  Perdóname pero admite que es algo absurdo. ¿Segura que no lo soñaste?

  Era un monstruo y si, lo estoy. 

  — Los monstruos no existen Emma.

— ¡Ese sí!

Vi preocupación en sus ojos, así como la desesperación por encontrar las palabras correctas y evitarme un colapso mental.

 Bien... supongamos que fue real  ¿qué hacemos?

Solté el aire que estaba conteniendo. Aunque no creyera en monstruos él creía en mí y eso era suficiente.

—Necesito saber la verdad sobre el caso de Owen, la policía está ocultando cosas — respondí—. Revisaron el maldito bosque tres veces, no puedo creer que no hayan visto esa cosa.

—El oso estaba lejos dijo apoyando su barbilla en su puño, pero esa cosa estaba aquí, es más lógico que haya sido él.

—Exacto.

Amir asintió pasándose las manos por el cabello alborotando sus rizos, aun lo estaba asimilando. Pero estaba dispuesto a ayudarme a superarlo aunque no lo creyera.

  — Necesito encontrar respuestas—  le explique—, saber porque están pasando estas cosas. Demostrar que lo que vi es real y descubrir de dónde demonios salió.

  — ¿Porque siempre necesitas encontrarle explicación a todo? —preguntó con frustración —. Esta muerto ¿no? Tal vez solo tengas que superarlo.

DARKLIGHTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora