La Sociedad Y Él

25

El piso es precioso,  tiene un salón con plantas verdes ,una pared de ladrillo y unos taburetes amarillos acomodados debajo de la barra de la cocina americana,  también hay un pasillo con tres habitaciones y un baño.
- Wow - digo con los ojos muy abiertos.
- Te gusta?
- Me encanta- contesto
-Te imagino en ese sofá conmigo,  con una manta viendo películas,  pero no te quiero forzar más.
- Me encantaría,  lo sabés , pero sería muy pronto - le digo mientras le rodeo el abdomen con mis brazos y pongo mi cabeza en su pectoral. Le beso y el me devuelve un beso dulce y sincero.  Nos sentamos en el sofá,  y él me abraza mientras continúa nuestro beso,  noto como el pulso se le acelera,  y como me empieza a besar más rápido , le sigo el ritmo y él apoya sus manos en mi cintura,  entonces noto como sus manos suben por mi torax para intentar quitarme mi camiseta. No estoy preparado para llegar a ese paso con él,  entonces suavemente cojo sus manos y las bajo,  y después separo mis labios de los suyos.
-Ryan, todavía no estoy preparado para llegar a ese punto - digo mientras acaricio la palma de su mano.
- Tranquilo,  no quería hacerte nada ,te quiero igual - me dice con una voz suave y relajada.
-  Te quiero,  que hora es?
- Tan solo son las 17 , a que hora tienes que volver a casa?  - pregunta
- A las 21 tengo que estar allí,  para terminar un trabajo de clase.
- Tenemos tiempo suficiente -
Enciende la televisión,  coje una manta y cubre nuestros cuerpos,  me da la mano y mi mano fría agradece el tacto de su cálida piel.  Cuando ya estoy lo suficientemente cómodo,  Ryan me habla:
- Tienes pensado algo para el puente de " Hallowen "?
- No,  creo que iba a quedar con Kate y con Susan.
- Podrías venirte a Asturias conmigo?!  Me encantaría pasar ese tiempo solo contigo,  tengo un chalet familiar allí .
-Sí!  Pero si me dejan mis padres.
- Que les vas a decir?
- No sé ya me inventaré algo.
Veo la televisión abrazado a él,  mientras me acaricia el codo. Giro la cabeza 90° y  apoyo mi boca en la suya,  su lengua se desliza por la comisura de mis labios. El beso es lento y precioso,  mientas me agarra el cuello con una mano, y yo apoyo la mía debajo de su camiseta,  hasta que su móvil vibra y rápidamente lo coje y lo apaga habilidosamente, con cara preocupada, como si quisiera ocultarme algo .
- Pasa algo?
- No,  nada - dice cabizbajo
- Vale - le digo,  aunque se que me oculta algo,  y no algo bueno.
- ¿Quieres estirar las piernas? - me dice intentando cambiar de tema.
- Sí- le digo mientras le cojo de la mano y lo levanto del sofá vintage,  noto como sus preciosos hoyuelos vuelven a aparecer.
Bajamos por las escaleras,  ya que no hay ascensor. Ya abajo, caminamos hacia , Sol,  donde hay una terraza en una azotea,  se ve la torre de Sweepes y gran parte de Madrid,  nos hacemos una foto con los ojos bizcos,  y otra besándonos , rodea mi abdomen con una mano y caminamos hacia una mesa.