²ERUPTION

TRES

CAPÍTULO TRES.

      —Has estado bastante pensadora desde que Jake se fue—, murmuró Emmett, un momento después que él había asumido que su pareja se había quedado dormida mientras bailaban. Ella había estado tan callada desde la vuelta a sus brazos, el fantasma de una sonrisa agraciando sus labios. No lo pensó dos veces antes de llevarla a bailar una gentil música siendo tocada por una banda en vivo. Ella cumplió, apoyándose en su pecho en busca de protección. La única razón por la que él no la había cargado a su cuarto y la dejó dormir toda la noche fue debido a la respiración que escapó de entre sus labios.

      —Lo sé—, respondió Vi, sin levantar la cabeza al hacerlo. Ella no quería mentirle a Emmett sobre lo que Jacob le había dicho, pero tampoco quería ver la mirada de ira y dolor que cruzaría el rostro de Emmett cuando ella le dijera lo que Jake había mencionado. Era lo suficientemente doloroso para ella el saberlo y dejárselo saber a él complicaría aún más las cosas. Ella no quería mentirle necesariamente, por lo que responder lo más vagamente posible era su mejor apuesta —. Es sólo que Jake dijo algunas cosas... algo sobre mí, como si fuera a ser golpeada por un montón de mierda pronto y no tengo idea de que quiso decir con ello.

      — ¿Como qué?—, preguntó Emmett, genuinamente intrigado.

      —Él dijo que descubriría algunas cosas que me molestarían. No tengo idea de lo que puede ser y, además, no es como si los lobos estuvieran llamándome para las reuniones de manada, ¿sabes? Entonces, ¿qué diablos podría ser?—, se cuestionó a sí misma, tirando su cabeza hacia atrás para poder mirarle a los ojos. Sin contar los sentimientos que Jake había admitido, ella también se encontraba preocupado por el resto de sus advertencias.

      —Sí, eso suena como algo de lo que deberíamos preocuparnos, aunque mañana. Prometo que mañana iremos a la Reserva y averiguaremos qué sucede. Tienen que hablarte, tal vez podemos alcanzar a Seth antes que se vaya—, le aseguró Emmett, pasando la almohadilla de su pulgar sobre su suave piel donde líneas de preocupación aparecerían si no fuera porque era media inmortal.

      —Sí, eso probablemente sea lo mejor. Lo siento, estoy arruinando la noche que se suponía que sería divertido, es sólo que no puedo.., no puedo evitar sentir como que, sea lo que sea, literalmente me alejara aún más de la manada y estoy aterrada de descubrirlo porque no tengo ni una pista de lo que podría ser—, respondió ella rápido, forzando a sus ojos que dejaran de ser estorbados por las lágrimas. Ella no quería causar una conmoción esa noche, ciertamente no es la boda. Vi estaba aterrada, pero no era el momento apropiado para sufrir de una recaída ya que sus poderes eran más que nada manipulados por su ánimo y, si ella no se mantenía calmada, podrían haber repercusiones catastróficas.