Capítulo 3:

4.7K 233 45
                                    

Dan había pasado solo 2 días ingresado en el hospital, y aunque fuese poco tiempo yo había estado allí. Me sentía terriblemente culpable por todo, incluso aunque él me hubiese repetido infinidad de veces que no era culpa mía. Pero con quien no había vuelto a hablar es con Lexi, ni un mensaje, ni una llamada, nada de nada. Dan no había sacado el tema de ''yo borracha seduciéndolo'' y realmente se lo agradecía por que el tema es bastante incómodo.

No obstante, esos días había estado muy curioso sobre mi pasado, haciendo preguntas no demasiado cómodas para mí y a las que por supuesto no respondí. Quizá algún día se lo contaré, pero este no era el momento. Cuando habían dado de alta a Dan le ayudé a montar en el taxi que lo llevaría a casa, y ahora me concentraba en contactar a Lexi.

Y como fracasaba en contactarla, decidí ir a su casa. Tampoco estaba allí... Me aburría mucho, es un sábado por la tarde. Se me ocurrió que con la excusa de estar preocupada por él iría a visitar a Dan. Lo cierto es que, y ahora confesándolo, él me gusta un poquito. Hacía mucho tiempo que no sentía interés por alguien, y con Dan me sentía bien, sin hablar de lo realmente guapo que es.

Según Dan me había dicho, su piso era el segundo. Iba subiendo las escaleras cuando escuche unas voces hablando, me escondí en un lugar estratégico de modo que yo viese lo que ocurría y que no me viesen a mí. Los que estaban hablando no eran otros que Dan y Lexi, parecían muy metidos en la conversación. Él parecía agobiado. Y, lo que no me esperaba de ningún modo, era que Lexi fuese a engancharse del cuello de Dan para besarlo.

Entrando en estado de shock en 3, 2, 1...

No quería seguir allí, no solo por la situación que se desarrollaba frente a mis narices sino porque no quería ser descubierta. Salí del edificio procesando lo que mis ojitos habían visto. ¿Lexi y Dan besándose? ¿Desde cuándo estaban juntos? ¿Acaso sería yo la tercera en discordia? Si antes me sentía mal ahora me sentía aun peor. No sabía si sentirme engañada, traicionada o... no sé, solo estaba muy muy sorprendida.

Si estaban juntos y no me lo habían dicho es porque quieren esconderlo de mi ¿no? Yo pensé que Dan estaba abriéndose conmigo y contándome cosas sobre él, debería habérmelo dicho. Y de Lexi ni te digo, la conozco desde que tengo uso de razón y no me dice ni una palabra sobre esto. Sea como sea me siento dolida, han estado juntos a mis espaldas, y Lexi me conoce lo suficiente como para saber que Dan me gusta un poco.

Puede sonar posesivo y egoísta pero, joder... ¡Dan es mío! Yo lo conocí primero y él quiso acercarse a mí, ¿por qué ''traicionarme'' con mi mejor amiga? Esto comenzaba a parecerse a un culebrón. Y como si de un ave fénix se tratara, la ira que se había ido apagando acabó por reavivarse. Tenía sed de sangre. Y toda esa ira acumulada acabó pagándola un cubo de basura y un cartero que por allí pasaba, desafortunadamente para él.

El mayor error que cometí en ese momento fue el no alejarme lo suficiente del bloque donde vivía Dan, porque Lexi acabó viéndome y viendo el pequeño destrozo que había armado. Sus ojos me miraron con sorpresa, por supuesto, no esperaba verme allí, había sido pillada ''in fraganti''. Yo solo la miré con mucho odio y rencor, y salí de allí echa una furia. Escuché en la lejanía que ella intentaba llamarme pero la ignoré.

Mi móvil sonó en el bolsillo y cuando miré quien era simplemente no lo cogí. Era Dan, seguro que Lexi le había contado que los había pillado y ahora me diría lo típico de ''oh, no, no es lo que tú piensas...'' y yo tendré que patear su hermoso culo por mentirme.

Y durante el día llamó y llamó, y yo seguí ignorándolo. Había pedido pizza para cenar y al poco rato tocaron a la puerta. Feliz por la rapidez con la que repartían abrí la puerta. Y enseguida me abofeteé mentalmente y me dije ''Nota mental: mirar quien hay tras la puerta antes de abrir''. Porque, para mi desgracia, no era la pizza era Dan.

La chica del cabello de fuegoWhere stories live. Discover now