Mia [Jaidefinichon GOTH]

21.- ¿Ya no me amas?

Un mes después...

Narra Nicolás

-No es fácil, de verdad, pero tenemos que terminar- no la podía mirar a los ojos, me sentía como el hoyo.

-¿Por qué?- me preguntó seria.

-No me proyecto contigo, no vamos encaminados para el mismo lado, créeme que es más difícil para mí que para ti- estaba siendo un conchesumadre.

-¿Hay otra?

-No- mentí descaradamente.

-Está bien, igual, desde que terminamos la primera vez no fue lo mismo nuestra relación.

Nos abrazamos y cada uno se fue por su lado.

¿Me daba pena?, sí, pero era lo mejor.

Llamé al Naiko y él nos dijo que íbamos a ir a Éxtasis el bar en el que trabajaba la Mía. Hace semanas no la veía y debo reconocer que la extrañaba, estaba acostumbrado al verla siempre.

Me dediqué a jugar hasta las 22:30, estuve pensando en qué decirle a la Mía cuando tuviéramos que hablar, estaba tan nervioso que jugué como las weas y me putearon por eso.

Me fui a bañar, me vestí y arreglé. Los chiquillos me pasaron a buscar y fuimos hasta el bar, obviamente era cuica la wea, si la Mía transpira perfume Dior. Pedimos una mesa y nos sentamos los 5, la busqué con la mirada, pero no la encontraba.

-¿Dónde está?- le pregunté al Naiko y él me calmó con la mano.

Voltee a ver y la encontré.

Estaba con un vestido negro apretado y unas vans negras con blanco, su pelo estaba peinado en un medio moño y tenía maquillaje, pero muy poco. Se veía hermosa, más de lo que recordaba de ella.

Se acercó hasta nosotros con una sonrisa y sacó la libreta.

-¿Qué van a tomar?

-Buena, Mía- la webio el Jaime y ella soltó una risa.

Nos saludó a todos con un beso en la mejilla y una sonrisa gigante.

-¿Qué hacen aquí?

-Nos contaron de una mesera terrible de rica que estaba aquí- dijo el Edgar y ella se sonrojó.

Busqué su mirada logrando que me mirara, me sonrió y yo bajé la mirada avergonzado.

-¿Les tomo la orden?- preguntó y el Naiko me miró.

-5 shops de torobayo- dijo el Edgar y ella anotó.

-¿Hace cuánto trabajas aquí?- le pregunté y ella tiró su pelo para atrás.

-Hace casi 4 semanas. ¿Me van a contar la verdadera razón de por qué están aquí?- ella insistió.

-Estamos celebrando la soltería del Nico- el Bestia me hizo la cama con eso.

Ella me miró con una ceja alzada y levanté mis hombros.

-Terminaste- susurró ella y yo asentí.

-Sí, ¿puedo hablar contigo cuando termines tu turno?- le pregunté y ella miró hacia atrás, específicamente a la chica de caja que estaba concentrada en un cliente.

-Sí- me dijo ella y se fue para traernos el pedido.

-Hace tiempo no veía a la Mía- dijo el Bestia sin despegar sus ojos de la pseudo rubia- está bonita weon.

-No te fijes tú en ella ahora- le pidió el Naiko serio.

-No te puedo decir que no si le veo ese tremendo poto que tiene.