Desafíando Al Destino: Sparchess

Por un demonio, te amo.

Duchess se sentía extraña, enrealidad se sentía mal por Hunter porque el extrañaba a Ashlynn, le parecía extraño pues ellos nisiquiera eran sus amigos pero aun asi le preocupaba, estaba acostada en su dormitorio con un bluson de seda color blanco, Sparrow entro pero ella no lo noto al estar tan sumida en sus pensamientos.

—¿Qué situación se apoderó de tu pensamiento mi ángel? ¿Tuviste algún problema con alguien?—dijo el chico de cabello rubio rojizo mientras la abrazaba por la espalda y le besaba el cuello.

—En Ashlynn y Hunter, no se porque Sparrow, yo no soy de las chicas que disfrutan ayudando a los demás ¿Qué me hiciste para que sea asi?

—Creo que como yo te salve sientes que debes retribuirselo a alguien y quizas quieras redistribuirlo con ellos porque siempre les querias hacer la vida imposible.

—¿En qué momento te convertiste en psiquiatra Hood?

—Ni yo lo sé—el siguió besando el cuello de Duchess mientras empezaba a meter sus manos en el camisón lo que hizo que Duchess emitiera un pequeño gemido—Duquesa........ Ah.........

—Si quiero—dijo nerviosamente besandolo en los labios.

Las manos de Sparrow acariaban las piernas de Duchess mientra ella le quitaba la camiseta y lo acariciaba tímidamente pero pudo notar que no era el mismo chico flaco de la escuela, tenía un cuerpo muy fornido y atractivo. Los labios de Sparrow fueron por el cuello de Duchess y dejaron muchas marcas, eres su forma de marcarla como suyo.

—Dime si algo no te gusta Swan—"¿No gustarme? ¿Habla enserio? Siendo que me estoy derritiendo con cada una de sus caricias." Ella solamente suspiraba y gemia en un tono muy delicado mientras el muchacho besaba sus pechos, tan dulce era el contacto del chico que ella nisiquiera notó en que momento el la había desnudado por completo, el solamente traía sus boxers, el le mordió un pezón lo que la hizo soltar un gemido sonoro y desafinado a compacion de los anteriores—Lo lamento, me emocioné.

—¡Idiota!

—Creo que ya estás lista, seré muy cuidadoso y trataré que no te duela—ella asintió y cerró los ojos, el se terminó de desvestir, se colocó en la entrada de Duchess pero antes de entrar tomo las manos de ella y entrelazó sus dedos con los de ella, la beso en los labios dulce y vorazmente mientras entraba en ella. Después de que ella se acostumbró el comenzó a entrar y a salir lentamente, empezó a aumentar la velocidad y fuerza de las embestidas hasta que ambos llegaron al orgasmo, el se dejó caer junto a ella.

—Por un demonio—dijo ella en tono bajo.

—¿Qué? ¿Te lastime?—dijo preocupado acomodandose sobre ella, ella le acaricio el rostro—¿Qué tienes?

—Es que creo realmente te amo, ahora estoy en un mundo nuevo para mi y me gusta porqué después de todo estas tu.

—Yo igual te amo.

Ambos se quedaron dormidos acurrucados en la cama.