Miedo.

391 50 17
                                    

Era ya muy tarde, entrada la noche, cuando decidiste tomar la iniciativa en todo esto.

¿Por que no?

-¿Cómo hago esto?- Estabas limitada. No habia mucho que hacer. No sin que Karamatsu supiera que eras tu. No tenias ni idea de que hacer.

¿Como ayudarlo?

Estabas en el reflejo de la ventana de su habitación. El espejo estaba abajo en la sala de estar. Eso ya te limitaba bastante.

Fue entonces que notaste la temperatura bajar un poco. El vidrio comenzó a empañarse. Dejaste esta superficie y pasaste a la pantalla del movil de Totty.

-¿Si puedo ver los sueños de Karamatsu tambien puedo reflejarlos?- pensaste que tal vez era factible. Una buena idea.

Pensaste en el sueño y trataste de conectarte con ellos del mismo modo que con Karamatsu. Pero no podías.

Nada paso.

Era inútil.

En eso mientas te lamentabas Ichimatsu inconcientemente se acercó a Karamatsu apretando su rostro contra el brazo de su hermano. Totty por su lado parecía tener un buen sueño y extendió sus manos abrazandose a su hermano mayor.

Entonces sentirte algo. La conexión con Kara siempre podias sentirla. Pero ahora sentías SU conexión con sus hermanos. A través de él.

-¿será posible..?- intentaste recordar cada parte del sueño a la perfección desde el punto de vista de Karamatsu.

Cada imagen. Cada sentimiento.

Jyushi dormía despatarrado con un pie sobre Choromatsu mientras Osomatsu tenia su mano extendida sobre el cuello de este con las palmas hacia arriba. Dormido el mayor termino por deslizar su mano hasta llegar mas lejos. Dejando asi su mano junto a Jyushi mientras su brazo estaba sobre el tercer hermano y su pierna enredada con la de Totty.

Sentiste a los seis. Cada uno. Su conexión entre hermanos.

- Lo lamento Kara. Deberas ver todo de nuevo- susurraste.

Y así fue que comenzó. Cada uno de los Matsuno se vio envuelto en aguas negras que ahogaron sus sueños y los arrastraron a una habitación oscura.

Asustados se sujetaron a sus ropas. Azules. Y vieron a sus hermanos llegar. Incluso algunos se vieron a si mismos. Pero nadie vio a Karamatsu. No hasta que se vieron en el espejo.

El dueño del sueño era quien controlaba las acciones. Pero a través de sus ojos ellos vieron, sintieron y sufrieron lo que tanto aterraba al segundo hermano.

Vieron con horror sus propias expresiones y escucharon asqueados sus palabras de desdén. Se odiaron a si mismos confundiendose con esas copias.

Cuando una mano se poso gentilmente sobre su hombro Karamatsu ,y por consiguiente ellos, volteo a ver a otro "Karamatsu" con una mirada seria y algo molesta. Herida. Que lo veia con lastima.

-¿Porque aun quieres su amor?- cuestiono- No lo valen. ¿Quieres que deje de doler? Yo lo terminaré.

La masacre volvió a ocurrir. Karamatsu vio a sus hermanos morir a manos de su reflejo.

-¿Tu corazón aun duele?

El propio Karamatsu grito. No soportaría ese sueño nuevamente.

Se abalanzó sobre él. Su contraparte. El unico otro ser vivo. Y lo golpeo. Llorando. Pidiendo a sus hermanos de regreso.

Sentiste dolor. Cada golpe era para ti. Tu eras ahora el reflejo. Pero soportarías esto. Por él. Porque el no lo sabía.

Tu rostro volvio a ser el de antes. Y el se quedo quieto. Mirándote con terror.

¿Acaso el habia lastimado a su unica amiga?

-¿Quieres recuperar a tu hermanos?- murmuraste.

Cambiaste de forma. En orden de mayor a menor reflejaste a cada Matsuno.

-¿Esta es la primera vez que sueñas esta? No. Desde antes de la llegada del espejo lo soñabas. Ahora solo hay una diferencia- dijiste acercándote.

-¿Cual es?- pregunto.

-Robare tu dolor...no dejare que mueras. Te reclamo como mío. No puedes dejarme. No puedes morir. No te pienso dejar- dijiste tomando su rostro- Asi tenga que hacer ....cosas malas.

El sueño termino y los seis muchachos despertaron.

Volviste a estar encerrada en el espejo. Escuchaste los pasos apresurados bajar las escaleras a tropezones.

-¿Que fue eso?- gritó molesto Osomatsu tomando el cristal con fuerza en sus manos.

-No tendrías que molestarte conmigo. Ese sueño no es mio. Es de uno de ustedes. Yo solo lo compartí. Ahora que estan realmente conectados verán los sueños del otro. Por al menos un dia o dos. No lo se. Aun no se cierra el vínculo... sus mentes no quieren soltarse- murmuraste.

-¿Entonces no inventaste eso?- cuestiono.

-¿Por que?- Karamatsu estaba enojado. Te miró con un odio inmenso. Te dolía. Pero no tanto como  saber que el sufría en silencio muriéndose por dentro.

-Porque se aue no pueden ignorar este problema...

-Nadie te pidió que hicieras nada- gruño.

-Pero yo queria hacerlo- dijiste- No quiero que sigas así...

El segundo hermano robo el espejo de las manos de Osomatsu y corrió tan rápido como pudo. Salio a la calle. Aun descalzo e ignorando el dolor que le provocaban las basuritas del suelo llegó al puente.

Bajo el puente el río que tantos rechazos habia presenciado corría hermosamente.

-¿Quien necesita un espejo que no hace su trabajo?- susurró antes de arrojar tu pequeña prisión de cristal al agua.

Al hacerlo sentiste tu vínculo con él romperse. Ya no era tu dueño.

Como siempre, te olvidarán. Al menos esperabas que el terminara arreglando sus problemas.

Sabías que tus acciones tendrían consecuencias. Y las aceptabas.

Tal vez ser infeliz y no tener a nadie era parte de la maldición.

El Reflejo En El CristalWhere stories live. Discover now