Siempre a tu lado.

63 4 1
                                    

Capítulo 4

''En el mar, como en el amor, suele ser mejor seguir una corazonada que obedecer a una biblioteca.'' John R. Hale

Max.

- Vamos Bruno que no tengo toda la mañana aun no entiendo como una persona con 19 años no tenga auto. ¿En serio amigo como haces para ser tú?. Le dije malhumorado

- Cállate y conduce. Se rio el muy imbécil al tiempo que movía la mano en ademan de irnos.

- Aún no sé cómo te soporto. Dije mientras entraba en el asiento del piloto.

- Porque soy sexy y te mueres por mí. Ahora ambos reíamos.

Ha Bruno lo conocí una noche en CalleInter, estaba muerto de miedo porque los ''amigos'' que lo llevaron lo dejaron solo a mitad de la noche, con amigos así para que enemigos. Claro ya para ese momento Inter no era ni la sombra de cuando Ryder estaba por allí seguíamos con las carreras pero sin mafioso ni mujeres vendiéndose al mejor postro por el lugar, pero seguía manteniendo ese aire peligroso y oscuro Cale Inter se convirtió en un santuario para todo aquellos que amamos el Driff.

- Ni de broma, solo mírate mides como 1.90, pálido, cabello rapado, ojos grises y de bonus lentes, Sorry not sorry pero no eres mi tipo grandulón. Carcajee y comencé a conducir.

15 minutos después habíamos llegado a la UCAL y nos encontrábamos en la recepción de La prestigiosa Universidad de Ciencias y Artes de Londres hoy era nuestro primer día y no porque Bruno sea un año mayor que yo quiere decir que se tomó un año sabático, no solo que el muy idiota voló hasta el otro lado del mundo para verse con una chica que nunca apareció fue un golpe duro, pero gracias a esa desconsiderada un año después estamos en la misma universidad, en la misma carrera y sin chicas que estorben en nuestro camino.

Oh eso pensaba hasta que alguien choco conmigo. Sabía que era una chica había escuchado su parloteo de destino ayúdame porque si no.

-¿Por qué si no que? Niña. Solté mientras me volteaba para burlarme de la distraída que de seguro choco conmigo.

-No me llames niña. Sus ojos me lanzaban dagas, peligrosas pero hipnotizantes dagas.

La observe mejor y juro que jamás había visto a alguien tan peculiarmente preciosa, nota mental nunca hablas sin mirar primero a quien se lo dices.

Ella no era distraída, ella era hermosa, ella eracomo cuando vez el mar por primera vez te aterra lo inmenso que es pero a lavez sabes que es lo más hermoso que vera en tu vida, bueno eso mismo estoy sintiendo en este instante y no estoy frente al mar, si no delante de esta chica y casi lo arruino por mi estúpida boca. Volví al presente y tome su mano.

-Disculpa no fue mi intención, pensé que eras ora persona. Hable tan rápido que pese en repetirlo. -Disculpa no fu... No me dejo terminar la frase.

-Tranquilo ya te escuche, también fue mi culpa. Dijo mirando a todos lados menos a mí sin molestarse en hacer contacto visual conmigo. No podia perder esta oportunidad, quien sabe si la volvería a ver y lo crean o no he sentido más al tocar su mano que en una relación de más de dos meses.

-Soy Max, estudio historia y tú? . y arriesgándome a que me golpeara o saliera corriendo levante su mentó con me dedo índice para ver esos increíbles ojos avellanas de nuevo.

-Soy arte, tartamudeo. Soy Amber y estudio arte. No había terminado de hablar cuando sus mejillas se sonrojaron de vergüenza, -Y tengo que irme. Soltó su mano de la mía haciéndome consciente de que aun la sostenía y así como apareció se fue, me quede observando cómo se alejaba murmurando y arreglándose el cabello.

-Tierra llamando a Max, ¿Max me escuchas? O la señorita risos de oro se llevó el poco cerebro que te quedaba con ella. Bruno se reía mientras chasqueaba sus dedos en frente de mi cara.

-No se llevó nada, pero tú si te puedes llevar uno de estos. Dije mostrándole mi puño. -Así que cierra el pico.

-Oh vamos, me vas a negar que no quieres salir corriendo tras ella.

-No, no quiero mejor vamos a donde sea que tengamos que ir. Dije tratando de concentrarme en nada, Dios, sí que quiero ir tras ella pero no, no debo.

Eso señores se llama flechazo/instaLove como quieran decirle y el tonto de Max se niega a aceptarlo, yo definitivamente hubiese salido corriendo tras ella. Ya me escuchara cuando estemos solo.

Siempre a tu lado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora