Capítulo 3: Retorno

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- Un experimento- respondió rápidamente Ford al ver que me había quedado bloqueado con tal pregunta. El "proyecto"  que estamos haciendo para protegernos de Bill es secreto, con el fin de no preocupar a los que están en la cabaña. Si les decimos, entrarían en pánico.

Después de desayunar y casi dormirme sobre el plato, mi tío Ford me llevo a su laboratorio. Ahí estaban todos los materiales que usaríamos para el "experimento". No son muchos como me lo imagine, solo pequeñas cajitas negras del tamaño de mi palma con pantallas táctiles en la parte frontal  y otra pero mas grande y supongo que con mas funciones. 

Y antes de que mencionará algo, mi tío Ford empezó a explicarme como funcionaban. Eran unos detectores de presencias de otras dimensiones en un radio de 10 metros. Los pondríamos en cada rincón de la cabaña, en el exterior y en el interior, con el fin de que todos los rincones estén monitoreados. La maquina mas grande es como el centro de control. Si algo (como Bill) llegase a aparecerse en la cabaña y fuese percibido, la advertencia se mostrará en el centro de control junto con un vídeo a tiempo real en donde se pueda mostrar que forma tiene ese ser. 

Empezamos antes del mediodía y terminamos a las 4 de la tarde. Al principio pensé que iba a ser fácil e íbamos a tardar una hora. Pero no fue así.  Si no estaban en el ángulo correcto, el radio de 10 metros no cubría todo el espacio de una estancia. A veces no eran de 10 metros de radio, sino de menos y teníamos que hacerle ajustes. Pero lo que mas nos atrasaba eran la curiosidad de los demás, en especial Mabel y Stan. 

- ¡Mas les vale que esos artefactos no arruinen la cabaña y las atracciones, cerebritos!- alegaba cada 5 minutos mi tío Stan, aparte de siempre repetirle que solo era un experimento y que no iba a afectar sus grandes atracciones.

- ¿Qué hacen? ¿Puedo ayudarlos? ¿Para que hacen eso?- esas y otras preguntas, que a veces parecían repetitivas, las decía mi hermana Mabel cada vez que nos veía. Agradezco mucho que nos quiera ayudar, pero este no es su asunto y no quiero que lo sea.

Pero... ¿deje de sentir esa presencia en el transcurso del día? La respuesta es No. En todo el día, he sentido como ese ser me observa. No importa en donde este o con quien, siempre me esta observando. 

Vi la posibilidad de saber que era lo que me estaba observando por medio de los detectores... y no aparecía nada. Puede ser que este a mas de 10 metros de la cabaña observándome o simplemente es la paranoia que adquirí desde que llegue a Gravity Falls.

- Si quieres date un descanso Dipper, yo sigo. Se te ve cansado- me dijo mi tío Ford con una sonrisa. 

Yo no me negué. La verdad que sentía que si no tomo aunque sea una siesta, podría dormirme en el piso sin preocuparme por despertarme con algún dolor de espalda.

En el camino hacia mi habitación, me encontré con Soos. Se veía mucho mas relajado que ayer, lo cual me alegra mucho. Quisiera decir lo mismo de mi, pero a metros se podía ver que estoy hecho un manojo de nervios y miedos.

- ¡Hey, amigo!- me dijo, con una sonrisa

- Hola, Soos. Se te ve mejor que ayer

- ¡Ayer pude dormir como un bebe! ¡No tuve ninguna pesadilla con Bill!- Soos casi daba saltos de felicidad- Gracias a ti pude superarlo

Recibí un abrazo de oso por parte de Soos que me saco el aire, pero también una gran sonrisa.

- Me alegro que ya hayas superado todo eso- le dije, con una sonrisa. Como quisiera yo también dejar de soñar eso. 

- Pero ahora hay algo que me preocupa- la expresión feliz de Soos cambio a una seria y me señalo, en señal de reproche- Y ese algo eres tu. ¿Que te sucede? Pareces zombi y aparte te la pasas alerta, como si temieras que algo vaya a pasar. Y sudas mas de lo normal

•~Nada Ha Cambiado ~•~BillDip~• #PremiosGravity2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora