Capitulo 29 "Secuestro"

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–Pero... yo sí sé... como se hacen los... bebés. - su respiración estaba entre cortada.

– Yo no. - hablo divertido y ella lo miro serio.

– ¿Como no vas a saber? Eres doctor... - la mano del peli-plata llego a su entre pierna.

– Pero yo no fui a esa clase. - ladeó la cabeza viendo como ella se mordía el labio –. Como tu sabes... - se acercó a su oído –. Tú me mostraras. - ese tono de voz la hizo estremecer y él mordió suavemente su oreja.

– Ahh... - gimió suavemente al sentir como él le acariciaba su parte intima por encima de su pantaleta –. Sessh...

– ¿Que? - su voz era ronca –. ¿Quieres que pare? - ella apretó los labios mientras él subía su mano hasta su vientre y bajaba de nuevo pero metiendo su mano entre su ropa interior comenzando a acariciar en forma circular esa parte, ella hecho la cabeza hacia atrás poniendo sus manos sobre los hombros del peli-plata –. Te hice una pregunta. - hablo contra su cuello –. ¿Quieres que pare? - volvió a preguntar adentrando mas su mano mientras con la otra estrujaba uno de sus senos por encima del vestido.

– N-no. - susurró con su respiración entre cortada y sus mejillas sonrojadas. Él sonrió de lado al escuchar esa respuesta, unió sus labios a los de ella comenzando un beso tranquilo que poco a poco iba aumentando iniciando una batallas de luengas, él comenzó a mover más su mano introduciendo un dedo en su cavidad –. Nnmm - gimió ella en el beso, segundos después sintió un cosquilleo en su vientre, se tembló un poco a causa del orgasmo que acaba de sentir gracias a la hábil mano del peli-plata quien sentía ya su virilidad totalmente despierta. 

– Ven aquí. - saco su mano y la tomo en brazo para llevarla a la cama donde la recostó con cuidado, se situó sobre ella colocándose entre sus piernas para después comenzar a besar sus cuello, ella acariciaba su espalda por encima de la camisa. Los besos del peli-plata bajaron hasta su hombre donde lo mordió.

– Sessho...maru...- gimió ella al sentir esa mordida, no le dolió solo la prendió más, él sonrió de lado sabia como besarla y le agradaba saber que solo él conocía esos puntos débiles de Rin, así como ella sabia cuales eran lo de él.

– Mi Rin. - hablo él antes de volver a besarla con pasión, mientras sus manos recorrían su cuerpo que parecía tan pequeño al lado de él, acariciaba sus piernas hasta levantar el vestido hasta la cintura y de nuevo bajar sus manos por sus muslos  hasta sus rodillas –. Este vestido estorba. - gruño al dejar de besarla y ella rió.

La levanto de la cama y se situó detrás de ella, movió todo su cabello hacia un lado y comenzó a besar su oreja, bajando a su cuello, hombros, después a su espalda donde inicio bajando el cierre del vestido lentamente mientras dejaba besos húmedos por toda su espalda haciéndola suspirar, él podía sentir como a ella se le erizaba la piel. Al terminar de bajar el cierre por completo soltó el vestido y este cayo al suelo dejando a Rin solo en pantaletas, la giro para verla a los ojos y después bajo su mirada hacia sus senos los cuales ella cubría con sus manos. Ella podía sentir esa mirada pesada sobre ella viéndola de arriba a abajo.

– ¿Por qué te cubres? - pregunto él en voz ronca.

– Me da... pena... - susurró. Sesshomaru acaricio su cabello y tomo sus manos para quitárselos poder apreciarla mejor.

– No tienes por que sentir pena. - se agacho un poco para atrapar un pezón entre sus dientes, levanto la mirada para ver los gestos que hacia –. Te conozco de pies a cabeza. - murmuró y ella suspiro. 

Rin volvió a suspirar al sentir como él mordía su seno mientras le soltó las manos y las enredo en esa cabellera plateada. Una vez que estimulo sus senos fue bajando lentamente dejando un camino de besos por todo su vientre hasta llegar a su ombligo, levanto la mirada encontrándose con la de ella, con su lengua rozo su ombligo, ella apretaba los labios y él comenzó a jugar con su ombligo sintiendo como ella se removía. Bajo lentamente hasta llegar a su zona intima donde dio una lamida haciéndola gemir con fuerza, sonido que era música para sus oídos. Otro orgasmo se hizo presente para ella mientras su cuerpo se tambaleaba ahí de pie, Sesshomaru se puso de pie para besarla haciendo que ella conociera su sabor, al separase ella lo miro con una sonrisa y comenzó a desabotonar la camisa mientras besaba su cuello, él tenso la mandíbula al sentir esos besos y pequeñas manos sobre él.

Trying not to love youWhere stories live. Discover now