- Yo no - dijeron los tres al unísono.

- ¡Pero esa es mi hora! - exclamé rendida.

- Pues hoy será por la noche, no pasa nada - me dijo Tyler en tono suave, intentando calmar mis nervios.

Pasaron unos minutos más y al fin llegamos al parque de atracciones. Tuvimos que comprar las entradas, 18€ cada uno. Pagamos y entramos. Era todo tan grande... Hasta que vi una atracción que se llamaba "casa del terror".

Supongo que no hace falta explicar lo que ocurre en ella, ¿no?

- ¡Ahí! ¿Quién entra conmigo? - pregunté con una sonrisa en mi cara.

- Yo - respondieron Scott y Tyler completamente tranquilos, aunque los demás chicos tenían una mueca de horror en su rostro.

- Yo ni de broma - dijo Ari riendo. - les esperamos fuera.

Hicimos la cola por unos 15 minutos y nos hicieron entrar a nosotros tres y a un grupo de cinco chicos que venían detrás de nosotros. Nos pusieron en una salita y nos dijeron que siguiéramos al guía en todo momento y blablabla. Después de eso pasamos por unas cortinas y yo no soltaba la mano de los chicos, tenía uno a cada lado.

Apareció la niña del exorcista haciendo el puente y acercándose hasta nosotros hasta que me cogio del pie.

- ¡Socorro! - grite y me enganché a Tyler soltándome del agarre de ese ser del diablo.

- ¿Sabes qué es una persona, no? - me susurro este mismo.

- ¡Es el puro diablo! - exclamé haciendo que Tyler riera por mi comentario anterior.

Me baje de Tyler cuando llegamos a la siguiente sección. Habia como un cementerio con tumbas y cosas así hasta que de tres tumbas salieron unos payasos asesinos y uno se me acercó.

- ¡Scott! - grite y me enganché a este como una lapa.

- Solo quiero jugar niñita - dijo el payaso ese con una voz chillona y apretando una bocina. Me daba miedo.

¿Miedo? ¡Miedo es poco, me aterra!

- ¡Juega con tu abuela, demonio! - grité haciendo que todos los demás en la sala volvieran a reír.

Esto se debería llamar casa de la risa, ya que aquí todos se están riendo. ¡Menos yo! ¡Yo estoy horrorizada! ¿Pero qué pasa? ¡Que a los demás les causa gracia! Ugh.

Pasamos a la siguiente sección y me baje de Scott, él sonreía. En ese había las enfermeras de la película de "silent hill" y eso sí que me daba miedo.

- ¡Tyler no dejes que me toque! - exclamé.

No paraba de gritar y yo estaba abrazada a él. El les decía que no se me acercaran, ¡cómo si fueran personas! Son el diablo, están poseídas, ¿no lo ve?

Pasamos a la última sección, donde teníamos que pasar entre todos los personajes, esos que habíamos dejado atrás. Era un pasillo estrechó y había una música de terror. En ese pasillo estaban todos esos personajes.

- ¡No! Scott llévame - me enganché a él como un mono y el empezó a andar. Notaba como esas cosas me tocaban y yo solo gritaba apretando a Scott. Después de eso pude ver la luz del sol y me baje de Scott y corrí hacia Ari.

Del internado a vivir con 5 chicos.Where stories live. Discover now