Duele quererte

Epílogo

6 meses después...

—¡Papá! Vamos a llegar tarde si no te das prisa. —Alcé la voz por tercera vez mientras él corría por la casa buscando algo...

—Espera...no lo ecuentro...¡aquí está!

Salió de su cuarto y vino velozmente hacia donde yo lo esperaba impaciente.

Entramos en el ascensor y me fijé bien en el objeto que nos había retrasado.

—¿Has estado buscando la cámara de fotos haciéndome llegar tarde pudiendo hacerlas con un móvil?
—Pregunté indignada.

—Por su puesto, no me fío de los móviles. —Hizo una foto a los botones del ascensor. —Mira qué bien se ve.
—me mostró la imagen efectivamente de los botones e hice una mueca. —así de bien vas a salir tu cuando te den la orla. Como pasa el tiempo, ¡mi hija ya se gradúa!

Y sí, Sammantha Scoffield se graduaba por fin. Unas pocas semanas antes de la graduación regresó mi padre de Alemania y estuve viviendo con el hasta este día. En el coche, me dio bastantes sermomes sobre que la vida no era fácil y bla bla...todos decían lo mismo. Y bueno, eso ya lo sabía.

—¡No puedo creerlo! ¡VAMOS A GRADUARNOS!

Bella estaba emocionadísima con la idea de graduarse, por su puesto las demás también aunque yo estaba un poco nerviosa por si acaso en el último momento decían lo típico de que ha habido un error y Sammantha no se gradúa. Pero no podía ser, me iba ya. A una Universidad y a un piso con Saray y Bella. Las demás se iban más lejos a estudiar por el simple hecho de que tenían unas notazas altísimas.

Mi padre estaba sentado al lado de los padres de mis amigas y mi madre estaba más al fondo apartada con mi hermano, Rose la madre de Eiric, Eiric y otros padres.

Rebobinemos.

¿Eiric?

¿Que hace el aquí?

No hablábamos desde lo que pasó en la cocina de mi casa.

Me giré otra vez para prestar atención a mis amigas pero los chicos ya estaban con nosotras, busqué a uno en concreto y lo pillé observando fijamente lo que hace unos segundos yo observaba.

A Eiric.

Nuestras miradas se encontraron, Jack estaba tenso y me acerqué a él.

—Se irá pronto.

O eso esperaba.

—Ahora mismo me apetece ir a partirle la cara. —Afirmó.

Lo rodeé con mis brazos por la cintura.

—Lo sé, pero hoy es un bonito día y no me gustaría estropearlo. —Estaba com la cabeza alzada mirando hacia arriba. Su gran mandíbula tensa de relajó visiblemente. Agachó la cabeza hasta mi y me besó. Luego me colocó bien el sombrero de graduación.

—Quien lo iba a decir...Sammy consiguiendo graduarse. Pensaba que eso era misión imposible.

Me solté de mi agarre y lo miré mal. Sonreía burlón sacándome la lengua. A la mierda, cuando hacia eso me constaba pensar o enfadarme con él.

—Cállate y vamos a saludar a mi madre.

Lo cogí de la mano y lo sentí nervioso. Siempre que venía a casa solíamos estar solos pero mas de una vez Jack se quedaba a dormir por lo tanto era inevitable encontrarse con mi madre. Y hablaban animadamente cada vez que se veían pero aun así se ponía nervioso. Todo lo contrario a mi padre. Con él solo faltaban unas cervezitas y estarían toda la tarde hablando y riendo. Mi padre confiaba mucho en Jack, por su puesto le había dado una charla sobre lo que no podía hacer conmigo. Digamos que nos saltamos un poco las reglas.