- ¡Ya podéis pasar pervertidos! - grite.

Luke me cargo en sus brazos y me llevaron hasta un coche. Como el otro día, íbamos Marco, Tyler, Cat y yo en uno y los demás en otro.
A los Díez minutos llegamos al hospital. Es demasiado grande. Me asusta. ¿Y si me cortan el pie?
Aparcaron y Tyler abrió mi puerta.

- Yo no entro ahí.

- Creo que si... - dijo este y me cogio.

- ¿Por qué nunca consigo que me hagáis caso?

- Porque no te queda otro remedio.

- Es que no se... Me tiraron a la piscina, me quitaron la camiseta, me interrogaron, no me dejaban ir al baño, ya me habéis visto en ropa interior, he pasado por los brazos de todos...

- Bueno, ya. Mira, ya vienen los demás.

- Oh, vienen los pervertidos que no controlan sus hormonas. Qué bien - ironicé.

- Ya me puedes dar a Ari - dijo Luke.

- Gracias hermanito - le dije sarcástica.

- De nada hermanita - dijo el del mismo modo.

- ¡Ey! Hermanitos - dijo Cat abrazándonos.

- Bueno ya - dijo Scott - que tienen que mirar a Ari.

- Pero no quiero entrar ahí.

- Pues vas a entrar.

- Ya, creo que no me queda otro remedio... - dije bufando. Entramos por la puerta y observe todo - ¡Sacadme de aquí!

- No te pasará nada... - dijo Cat.

- ¿Y si me ponen una inyección?

- Te quitará el dolor... - dijo Luke.

- O sea que puede que me la pongan - ellos asintieron - ¡Me asustan las agujas!

- Cálmate.

- ¿¡Y si me cortan el pie!?

- ¡CALMATE! - me gritaron todos - ya se acerca el doctor - dijo Marco.

El doctor tiene pinta de ser bueno en su trabajo. Debe de tener unos sesenta años o algo así. Tiene pinta de doctor.

- ¿Les puedo ayudar en algo?

- No hace falta... Estoy bien - dije mientras él me miraba completa.

- Tu muñeca y tú pie no dicen lo mismo señorita. Ven, pasemos a una consulta. Pueden pasar todos si lo desean.

- Si - dijeron todos.

Nos llevaron hacia una sala de hospital bastante grande. Había una camilla y un montón de máquinas con cables y antenitas. Luke me puso sobre esa camilla y el doctor salió de allí un momento.

- Os mataré por traerme aquí - advertí cuando todos se cruzaron de brazos. - Parecéis serios de esa manera - dije eso y se acercaron a mí con los brazos cruzados - ¡Ahora parecéis acosadores! Atrás.

Dije y se echaron a reír como focas retrasadas atragantándose con la comida. Después llegó el doctor.

- Ven, vamos a hacerte unas radiografías.

Me baje de la camilla olvidando que mi pierna derecha no funcionaba y casi me caigo, pero Nick me agarro antes de que eso pasara. Después me cargo en sus brazos y Luke le miró mal...
Me llevaron a una sala donde me quede sola pero veía a los chicos y a Cat detrás de un cristal. De repente esa máquina empezó a hacer ruido. ¿Qué contra pasa?

Del internado a vivir con 5 chicos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora