Change [Lawlu]

Capítulo 6

Law terminó de comer las bolas de arroz poco después de que el capitán de los Mugiwara desapareciera con su cuerpo para ir a dormir. Este se había quedado satisfecho después devorar más de ocho raciones de onigiri y ahora se acariciaba la enorme barriga lena de comida. El echo de que su cuerpo pudiera estirarse hacía que pudiera comer tanto como quisiera y no reventar. A lo mejor ese era el secreto detrás del hambre salvaje de Luffy. 

El cirujano recostó su espalda contra la madera del barco y entre cerró los ojos. Era la primera vez en años que no se sentía tan relajado, sin tener ningún dolor de cabeza ni ninguna preocupación en mente. Unos susurros llamaron su atención. Las dos únicas mujeres de la cocina estaban teniendo una conversación bastante sospechosa en voz baja. El instinto del ex-shichibukai empezó a dar gritos, sería mejor que tuviera cuidado con esas dos. 

Se inclinó hacia delante y volvió a centrarse, ese no era momento de hacer el vago. Tenía que pensar en algún sitio donde pasar los tres días de su cambio.

-Como he dicho antes- dijo, haciendo que todos se voltearan y lo escucharan con atención.- En este momento, Mugiwara-ya y yo somos vulnerables. Tendremos que refugiarnos lo más rápido posible, sin que nos descubran, durante 3 días. Nami-ya. ¿Sabes de alguna isla que esté cerca?-le preguntó a la pelinaranja.

-Mmm, déjame pensar...- dijo la mujer- La única isla que queda más cerca es...- puso las manos entre sus pechos y sacó un mapa que puso encima de la mesa. Nadie comentó nada sobre eso, ya que era bastante normal, pero Law no pudo evitar preguntarse porque lo guardaba en un lugar como ese.

La mujer estuvo unos segundos pasando el dedo encima del papel hasta que frunció el ceño e hizo una mueca de disgusto. ¿Porqué tenía que ser justamente esa isla?

-Agh- se quejó.

-¿Qué sucede Nami-swan~?- le preguntó Sanji-ya, al ver a reacción de su amada navegante.

Nami soltó un suspiro y guardó e mapa en el mismo lugar antes de que el rubio pudiera ver algo.

-No hay más remedio, Chopper- el reno la miró, extrañado- Prepara sangre del tipo S RH-le ordenó.

Chopper la miró sin entender nada pero, de pronto, pareció recordar algo. Asintió y se fue corriendo de la cocina sin decir una palabra. Law se quedó mirando a la navegante, confuso. 

-Oh, no me digas que...fufufufu. El destino es interesante.-se rió Robin, entendiendo la situación.

-¡Yohohohoho! ¡Hoy es el mejor día de mi vida!-exclamó el esqueleto, saltando de alegría.-Aunque ya estoy muerto. Yohohoho.-añadió.

-Menudo problema.-murmuró Zoro, aún con los ojos cerrados.

-¡Esto será una SUPERRRR aventura!-exclamó el cyborg, limpiándose un poco de sangre que le salía de su nariz de acero. 

-¡Se me ha curado la enfermedad de no-puedo-ir-a-esa-isla!-gritó Usopp, mientras lloraba de felicidad.

Trafalgar nunca había estado más confundido.

-¿Cuál es la isla más cercana?- preguntó con curiosidad.

Nami tragó saliva antes que responder. 

-La...isla...- empezó a decir esta- Amazon Lily...

A Law se le cayó el mundo encima. Odiaba esa isla. La última vez que había pisado ese lugar había sido después de la guerra en Marineford, al tener que curar a Luffy. No le gustaba la idea de tener que ver a la emperatriz pirata con el cuerpo de Mugiwara. Además, esa mujer estaba locamente enamorada de el hombre de goma.  Solo faltaba que los viera en esa situación. Aunque el echo de que Boa Hancock amara a Luffy, les ayudaría a poder quedarse allí.