Best Friends.

1.-Solo quería ignorarte.

Mi nombre es Paula Rivet Tengo 17 años, tengo una vida normal como cualquiera, agregándole a ella  que he vivido en muchas partes del mundo gracias al trabajo de mi padre, mi madre también está viajando siempre pero sus viajes son por temporada y  cuando es necesario que viaje, tengo un hermano al cual se le hace muy sencillo en encajar en esta sociedad cosa que a mí ni medio se me hace fácil, según mi padre Los Ángeles es el lugar donde viviremos definitivamente, espero y no me mienta esta vez,  según mi padre tenemos mucha suerte porque podemos cambiar de colegio las veces que queramos, y podemos estudiar donde queramos, no creo que eso sea una suerte pero dejémoslo creer que sí lo es, tenemos ya 2 semanas viviendo aquí en Los Ángeles es un lugar bastante cómodo no me quejo, la residencia donde vivimos es bastante tranquila y realmente me siento muy a gusto aquí

Hoy ya es lunes lo que significa que empiezo el instituto y no estoy muy emocionada con ello, ya que estoy terminando mi último año de preparatoria, si estoy algo adelantada, pero bueno espero que este día no sea todo un desastre.
Al poner un pie en el instituto siento como si mi vida se reiniciara, como cada vez que piso un instituto nuevo, pero ahora es aún más extraño porque ya es mi último año, aquí cada quien debe tener su grupo de amigos y debido a eso siento que ahora menos que nunca encajare, sin darme cuenta ya estaba frente a la puerta que decía Director Roberts

–Señorita Rivet–habla el director al verme entrar en su oficina– mi nombre es Louis Roberts, y seré su director en su último año, espero y pueda gustarle en instituto y llevarse bien con cada uno de los adolescentes que estudian aquí–Me hablo amablemente, mientras sacaba una de las llaves de su escritorio– aquí están las llaves de su casillero junto con su horario y los salones a donde debe ir, le toco una de las mejores aulas–hizo comillas con sus dedos, y yo reí ante su comentario.

El director parecía buen tipo.

–Gracias por todo, Señor Director–hablé y le sonreí, antes de salir de su oficina.

Caminando por los pasillos del instituto, veía a varios chicos en sus casilleros aun, pero eran muy pocos, al parecer iba un poco tarde, pero como yo toda la vida siempre he llegado tarde, me importo muy poco.

Observe la hoja que el director me había dado, para verificar que el salón que estaba en frente de mí era donde tenía mi primera hora, toque antes de entrar, y veo una sombra de una mujer acercarse a la puerta para abrirme

–Tú debes ser Paula–me habló amablemente mientras me adentraba al salón junto con ella– debes presentarte cariño.

–Oh profesora, yo no quiero hacerlo–reproché.
–Claro que quieres–dijo tomándome del brazo– Chicos ella es la nueva alumna de su aula, aquí se las dejo para que se presente–habló dejándome frente a toda la clase y ella se fue a su asiento.

–Mi nombre es P-Paula Rivet tengo 17 años, vivo en Brentwood, con mi padre y mi hermano– fue lo único que logre decir porque me dan muchos nervios al hablar en público, recibiendo unas miradas junto con risas de unas perras egocéntricas, he aprendido a lidiar con ellas a medida que voy por muchos institutos.

El único asiento que estaba desocupado era el último atrás, al lado de un chico con un físico demasiado perfecto para mi gusto, tenía cara de chico malo, su piel era muy clara, sus ojos eran azules como el cielo, su cabello era de color castaño muy hermoso, como su sonrisa que me impacto al verlo.

Ya que era el primer día los profesores dicen puras bobadas, yo solo agarré mi celular y me puse mis auriculares, la canción que escuchaba era de Hardwell, "follow me", para ser especifica.

Siento algunos dedos sobre mi brazo derecho así que los ignoro porque no quiero recibir ningún tipo de coqueteo de ningún fuck boy ahora, al ver que no le pongo ni un poco de atención el opta por quitar uno de mis audífonos.

– ¿No estás oyéndome? –me preguntó al ver que voltee a ver que quería de mí-
–Claro que oigo, solo quería ignorarte–digo en mi tono de sarcasmo, y el solo ríe.

–Eres algo no tan amigable–me habla con una sonrisa amable en su rostro, maldición tiene una sonrisa muy linda–mucho gusto soy Axel Brown.
-Oh, yo soy la no tan amigable, cuando eres tu quien interrumpió mi canción, que descarado–digo para sonar un poco graciosa–mucho gusto Axel Marrón soy Paula Rivet.

–Ahora si me pareciste un poco más amigable– me sonrió y yo solo le voltee mis ojos–eres Rivet eso es como rio en inglés, ¿no? –dicho eso ambos reímos.

–Digamos que sí para no dejarte tan mal–ambos volvimos a reír– y no creo ser tan amigable como lo piensas– le aclare.

–Pero evitemos esta plática y háblame de ti, ¿te parece? – dijo él con un tono seguro– siento que en algún lado te he visto, que te conozco de hace muchos años, y quiero confirmar si eres tú.

Que comience la labia.

Concepto de labia: Habilidad para hablar con gracia y convencer

–Pues no me parece hablar de mí con un extraño–dije con un tono algo arrogante–y no creo que te conozca, no te he visto nunca en mi vida, y si te he visto no recuerdo absolutamente nada–noté algo de tristeza en sus ojos, pero decidí ignorarlo.

–No creo que una persona a la que veras casi toda la semana sea un extraño para ti–dice él– así que vamos cuéntame de ti, seamos amigos, se nota que no eres muy buena para hacer amigos.

–Touche–hable preferí responderle, ya que tiene razón, algún amigo, aunque sea debo hacer yo aquí–pues como ya te dije soy Paula Rivet, tengo 17 años de edad y vivo Brentwood bueno ya lo dije no creo que debas saber más nada que eso.

–Pues bueno–dijo él en un tono aburrido–como dije soy Axel Brown, tengo 18 años y hoy te vi cuando te arreglabas antes de venir al cole, por la ventana de tu cuarto y disculpa, pero te digo que no estás nada mal, y ahora creo que sabes donde vivo

Llegando y ya este tipo me vio desnuda.

–Ósea que ¿Somos vecinos? –exclamé en un tono burlón–bueno de seguro sabes que no tengo ni un mes aquí en Los Ángeles.

–Si yo lo sé, no sales ni a tomar aire–habló Axel–ya hasta he podido hablar con tu hermano, pero contigo nada.

Entonces sonó el timbre anunciando que ya había acabado la jornada de clases, era lunes y en mi horario salía que solo veía cuatro horas con una materia y luego ya podía irme a mi casa, creo que ahora si me gustaran los lunes.

– ¿Quieres que te lleve a tu casa?–me pregunta Axel, mientras tomaba su bolso

–No, gracias hoy viene mi padre a buscarme, tal vez mañana si necesite de ese aventón–le aclaré regalándole una sonrisa amable

–Bueno, mañana vemos si te llevo porque como no aceptaste hoy, puede que mañana la oferte expire querida Pau–dice él regalándome una sonrisa–te puedo decir Pau, ¿no?

–Claro que puedes marrón–asentí en un tono burlón

–Nos vemos por tu ventana entonces

N/A

Espero les guste

Aquí guelmicita