Capitulo 3 "Nuevos vecinos"

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- Yo y una persona mas.

- Me agradaría conocer a esa persona.

- No tarda en llegar. - Sesshomaru le había un texto que se apurara a llegar ya que la señora Kaede lo tenia algo hostigado contándole como fueron sus años viviendo en esa casa.

El timbre de la casa sonó y la señora Kaede fue a abrir mientras Sesshomaru caminaba por la casa con los brazos cruzados, vio que había una gran ventana aun metro de la puerta ¡Excelente! podrían ver con mayor facilidad la vida de su vecina, debía admitir que le causaba un poco de curiosidad saber quien era esa chica, aun que ya se hacia de una idea de como era, solo quería comprobarlo.  

- Mucho gusto, son Naraku Sasaki. - se presento ante Kaede --. Vengo con él - señalo a Kaede quien se hizo a un lado para que él pasara.

- ¿Vivirán los dos aquí? - los miraba extraño --. ¿Juntos? - pregunto con nerviosismo.

- ¿Algún problema con ello? - pregunto Naraku, pues no entendía por que ella los miraba de esa forma. 

- No, para nada. Estoy a favor. - Sesshomaru frunció el ceño ¿Qué quería decir con eso? Antes de que pudiera hablar Naraku se le había adelantado.

- ¿Nos rentara la casa?

- Por supuesto, podemos hacer el contrato ahora mismo, solo hay un par de reglas pero no creo que sea necesario que se las diga.

- ¿Porqué? 0.o - pregunto el peli-plata y Kaede se sintió intimidada ante su mirada,

- No por nada, bueno, como pueden ver es una colonia bastante tranquila y no quisiera que se viera en disturbios por fiestas con música a todo volumen.

- Descuide, no somos de hacer fiestas. - respondió Sesshomaru con voz firme.

- Y la otra seria que... - dudo en decirlo pero al final lo dijo --, no quisiera que este lugar sea mal visto, me refiero a que no me gustaría que entraran mujeres, ustedes saben a lo que me refiero.

- Rayos. - susurro Naraku y Sesshomaru sonrió de lado, pues él era quien aveces llevaba una que otra mujer para pasar el rato, por suerte tenían habitaciones separadas. 

- No se preocupe por eso. - le aseguro el peli-plata .

- Siendo así ¿Que le parece si vamos con mi abogado para hacer el contrato? 

- Claro.

- ¿A nombre de quien estará el contrato? - Naraku codeo a Sesshomaru, este solo rodó los ojos.

- Yo me haré cargo. 

- Yo me quedo para desempacar las cosas, también pase al super para comprar unas cosas - Sesshomaru asintió y Naraku fue por sus maletas al auto del peli-plata. 

Como Kaede llego en taxi, Sesshomaru le ofreció llevarla en el auto, al doblar en la esquina llegaba el taxi donde iban Rin y Kikyo quienes habían pasado a comer algo, bueno solo Kikyo pues Rin no probo bocado, ya no lloraba solo picaba la comida con la mirada baja. 

- Deberías ir a tu casa. - hablo con tristeza Rin dejándose caer en el sofá.

- No puedo irme y dejarte así, Rin estabas por quitarte la vida.

- Estaré bien. - Kikyo la miro con desconfianza --. Te lo prometo, ve a ver a Sota, debe de estar extrañándote. 

- Me iré, pero te llamare apenas llegue a casa ¿si? - Rin asintió, Kikyo le dio un beso en la frente y salio de ahí. No hablo sobre lo que había pasado en la boda sabia que lo estaba pasando mal como para hablar de ello, así que ya hablarían después.

El agua tibia caía a su cuerpo, no supo en que momento se había echo ovillo bajo a la regadera, lagrimas que se perdían con el agua bajaban por sus mejillas. Se sentía tan tonta ¿Por que Inuyasha la había traicionado? ¿Por que Aome le hizo eso? Aome sabia del amor que sentía por Inuyasha y aun así, no le importo. Lo había entregado todo de ella y aun así no fue suficiente para Inuyasha ¿Acaso la había engañado por que ella se negó varias veces a tener relaciones? Mas lagrimas salieron de sus ojos. Pasarían minutos horas quizás, se levanto y su cuerpo se sentía entumecido por el largo tiempo ahí bajo al agua. Se vistió y salio hacia su cocina, se sentía con hambre pero no había nada en su nevera y lo ultimo que quería era salir, y tenia que hacerlo. Con todo lo que había pasado se olvido de surtir la despensa, suspiro y tomo su bolso para salir, por suerte había una tienda de abarrotes a dos cuadras.

Las calles se sentían tan solas o era así como ella se sentía. Miro al cielo ya estaba oscuro, miro su celular y eran las ocho de la noche, se había pasado tan rápido el día y ni pensar que tener que ir a la universidad al día siguiente, con suerte los horarios variarían y podría buscar trabajo en algún hospital cerca, de hecho ya tenia una entrevista para el día siguiente por la tarde. Llego a la tienda y compro solo algunas cosas, pastas y un bote de helado de chocolate. Pago y salio para regresar a su casa. 

Kaede y Sesshomaru terminaron de hacer el contrato el cual firmaron por tres mese tiempo suficiente para el peli-plata, pues Rin cumpliría sus 21 en un mes tres meses estaba mas que bien. Le ofreció a la señora Kaede llevarla a su casa pero ella dijo que no, que la dejara en donde se encontraron ya que le había pedido al taxi que pasara por ella, Sesshomaru la llevo de nuevo, estaciono el auto frente a su nueva casa mientras Rin estaba por llegar a la suya.

- ¡Rin! - saludo con emoción la señora Kaede, Sesshomaru volteo al instante y sus ojos se abrieron un poco mas de los normal.

- Señora Kaede que gusto verla por qui - hizo una leve reverencia.

- Mira te presento a tus nuevo vecino, Sesshomaru ella es Rin.

Sesshomaru alzo una ceja al ver a Rin, pues era la misma chica del puente, solo que ahora su cabello estaba mojado, su pijama de color azul marino con conejitos rosas pintados, un suéter bastante grande para su cuerpo, sus tenis algo desgastados. Rin se mordió un labio pues se sentía nerviosa ante esa mirada que la observaba de pieza a cabeza.

- Un gusto. - Rin hizo una reverencia. Sesshomaru solo hizo una mueca parecida a una sonrisa. No era como pensó que seria.

- ¿Estuviste llorando? - había poca luz en la calle y aun así Kaede se había dado cuenta.

- Em no, solo me cayo una basurita. - respondió en voz baja --. Con permiso - hizo otra reverencia y entro a su casa.

- Pobre chica. - dijo en un suspiro Kaede y Sesshomaru la miro de reojo --. Me despido joven Nakamura. -el peli-plata asintió y espero a que Kaede se fuera para entrar a la casa.

- ¿Todo bien? - pregunto Naraku al ver a Sesshomaru algo pensativo.

- Ya conocí a Rin. - hablo serio mientras tomaba asiento en el sofá de piel color negro.

- ¿Y como es? ¿Es linda?

 - ¿Recuerdas a la chica de la boda?

- ¿No me digas que es la novia? -él negó y le contó quien era Rin, Naraku parpadeo varias veces --. Esto no me lo esperaba, ¿que relación tendría ella con Inuyasha?

- No lo se y ni me interesa. - respondió sin interés.

- Por cierto, compre un periódico y vi que en un hospital están solicitando doctores, deberíamos ir a preguntar.

- Esta bien. - se levanto y se dirigió a su habitación para descansar había sido un día largo.

Trying not to love youWhere stories live. Discover now