Orange ✎ Yoongi

✎ Twenty.

Yoongi... compartió sus sentimientos conmigo.

– ¡Tú no tienes... que darme una respuesta! –exclamó ruborizado. Se le veía muy tierno, el como cubría su rostro.– Solo quería decirte como me siento...

– Bien...

 Una respuesta...

Mi respuesta es obvia.

Todavía no puedo creerlo. Siento lo mismo por él. 

– ¡Buenos días! –exclamó Yoongi pasando junto a mi, con el bolso deportivo que le regalé.

– Ah. «Mi regalo...» ¡Gracias por usar el bolso!

No hizo más que sonreírme.

Estábamos en el primer ramo de clases, educación física.

– ¿No vas a responderle? –preguntó Jimin.

– ¿Huh? –exclamé avergonzada.

– Si solo vienes a entrometerte, ¡vete a casa! –decía Jane hacia Jimin.

– Vine a ayudar. ¿Así que? ¿No vas a responderle? –insistió.

– ¡Ey, vete de aquí!

– Si le doy una respuesta... quizás  estaría molestándolo... –dije con voz temblorosa.

– ¡Eso es tan tú! –exclamó, Nancy.

– Después de todo... no sé qué decir...

– Sólo dile exactamente cómo te sientes.

– ¿Exactamente?

– Alice... sólo asegúrate de responderle. –dijo Jimin seriamente.

– Ya basta. –dijeron tras nosotros. Era Yoongi.– No la molesten. Alice, en serio no tienes que preocuparte por eso. Estaría muy feliz si me trataras como siempre lo has hecho.

– ¡Wow! Hablando de hacerse el duro.

– Cállate Nancy. Bueno, voy a llevar esto. –dijo tomando un par de balones.– Vamos Jimin.

– Si, si.

Se fueron conversando entre ellos. Me pregunto.. ¿de qué estarán hablando?

– ¡Alice! –exclamó Jimin.– Yoongi dijo... ¡que ese peinado es lindo! –me sonrojé. En este momento llevaba una coleta.

– Qu.. ¿¡De qué estás hablando!? –exclamó Yoongi.– ¡Yo no dije eso!

– ¿Huh? Si, lo dijiste. Te oí.

– Namjoon, ¿de dónde saliste?

Me pregunto qué pensaría Yoongi si le dijera como me siento...

– Jimin, vamos a club. 

– Lo siento, Yoongi. Adelanté, estaré allí pronto.

– Muy bien, entonces nos vemos allí.

– Sep. ¡Alice! –llamó al asegurarse de que Yoongi se había ido.– ¿Puedo hablar contigo un segundo?

– ¿Huh?

– Escucha, no sé si está también en tu carta, pero ¿tienes algo sobre el 23?

– ¿Te refieres al 23 de Septiembre?

– Sí.

– Déjame ver.... –dije mientras sacaba la carta de mi bolso.

– Lamento esto...

– Está bien. –hice una pausa.– Sí, hay algo.

– ¿Qué dice?

***