IX. Bebé

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Alexis;

Me recogió de mi casa un sábado. Yo estaba en su espalda, mis brazos alrededor de su cuello y mis piernas alrededor de su cintura. Con su boca, hacia ruidos raros cada vez que decidía dar un paso atrás. En el camino a su casa, empezó a ir más lento.

"Beep...beep...beep...beep," Harry gritó, caminando hacia atrás y completamente inconsciente sobre con que podría chocar mi espalda. "Beep...beep...beep"

Coloqué una mano sobre su boca, amortiguando los ruidos debajo de sus labios. Él continuó por debajo de mi palma, y yo reí sobre su cuello. Lo pude sentir sonriendo por la piel de mi mano hasta que finalmente se detuvo para respirar. Una vez que quité mi mano él abrió su boca para continuar.

"Para," reí. "La gente empieza a mirarnos raro desde que salimos de mi casa."

Harry bufó. "Esta bien. Beso primero," giró su cabeza e hizo un puchero con sus labios. Siempre era un desastre sonrojándome cuando él hacía ese tipo de cosas. Estaba consciente de que iba a tomar un tiempo hasta que me acostumbrara a eso.

Me empeñé en acercar mis labios a él en un suave beso, luego me alejé, sonriendo mientras él hacía lo mismo. Esto era muy dulce y no quería otra cosa más que besarnos todo el tiempo.

Llegamos a su casa y encontramos a su papá en el garage. Estaba haciendo la limpieza diaria de su mustang. Alzó la mirada y me saludó con la mano.

"¡Hey, Alexis!"

El padre de Harry era un hombre grandioso. Estaba muy feliz de conocerlo y darle una buena impresión porque él estuvo de acuerdo en olvidar lo que había pasado en su cochera, cuando nos interrumpió.

Lo saludé rápidamente. "¡Hola, Sr. Styles! ¿¡Cómo está!?" Harry seguía cargándome en su espalda, así que usé mi otra mano para sostenerme.

Él rió y gritó, "¡Estoy genial, gracias!"

Harry lo saludó también, "¡Estaremos adentro, papá!"

Una vez dentro de la casa, descansé sobre mis pies. Harry caminó hacia la cocina, buscando algún aperitivo. Lo seguí y sacó dos latas de Pepsi de la alacena y una bolsa de patatas fritas.

"¿A donde iremos?" pregunté.

Harry se encogió de hombros, sus ojos estaban buscando algo más interesante para su apetito. "¿Mi habitación? Podemos quedarnos ahí y escuchar música."

Asentí brevemente. "Si, suena divertido."
Dije mientras sostenía la bolsa de papas y daba un vistazo alrededor de la casa.

Impresionantemente, Harry tomó las dos latas de refresco con una mano mientras que con la otra sostenía la mía mientras subíamos juntos las escaleras.

En el pasillo, vi a Max asomando su cabeza fuera de su habitación con curiosidad. Me vio y oleó su pequeña mano. "Hola, Alexis,"

Sonreí y lo saludé con emoción. "Hey, Max. ¿Cómo está la oruga?"

El sonrió, sus pequeños dientes y hoyuelos estaban en todo su esplendor. "¡Esta bien!"

Entramos a la habitación y pronto estábamos escuchando el álbum de No Doubt, tan fuerte como Harry tenía permitido. Me senté con las piernas cruzadas mientras él se apoyaba en la cabecera, los dos en su cama.

"Creo que se supone que lloverá o algo así mañana. Hay una comunidad de servicio en la iglesia y mi padre quiere que vaya a ayudar. Niall y los otros chicos irán también," Harry me dijo.

"Oh, ¿qué servicio harán?" dije dando un sorbo a la soda.

Harry se encogió de hombros. "Probablemente pintar y arreglar algunas cosas de la iglesia. Todo para mantenerla en buenas condiciones."

1996 [h.s] español TERMINADAKde žijí příběhy. Začni objevovat