"No me dejes morir Link" (Link y tu) ©

CAPITULO 24: "Agobiante"

Narra Link
Sus ojos estaban rojos, luego _____ salió corriendo.

Pensé detenerla y gritarle, salir tras ella, pero no lo hice, no aceptaba que culpara a Wendy de algo que no hizo.

-Bien sigamos a tu casa- dije despues de ayudarle a limpiarce el helado de su ropa

-De acuerdo- dijo Wendy y se agarro de mi brazo.

Al llegar a su casa su madre nos abrió.

-Hola, soy la madre de Wendy, y tu eres?- una señora de cabello rojo y morena de ojos amarillos abrió.

-Oh un placer, Louis Santorski, un amigo.

-El y yo estudiaremos juntos- Dijo Wendy

-Claro pasen- cerro la puerta detrás de nosotros.

-Ven sube- Wendy subió las escaleras y entramos a lo que parece ser su habitación.

-Woah, es muy grande- su cuarto era mas grande que el de ______

-Te gusta, esta es mi cama, acuéstate, es cómoda.

Me lance y estaba muy cómoda, tal como dijo ella.
Ambos reímos y comenzamos a saltar en ella.

-Ya es suficiente, es hora de estudiar para no reprobar mañana- bajo de la cama y fue a su mochila, saco un sus cosas de geografía y se sentó en una silla que daba con un escritorio blanco com detalles en amarillo y un azul muy tenue.

Me hizo una seña para sentarme en la silla de a lado, comenzamos a estudiar; o bueno, en lo que cabe estudiar.

Narra _______

Me encontraba en un callejón llorando, acurrucada entre cajas de cartón y un gran bote de basura a metros de distancia.

Nunca pensé que Link se hallara en mi contra, pensarlo me deprimía, sus palabras sonaban una y otra vez, se repetían como una cinta de video que se ha quedado trabada.

Llore hasta quedarme dormida.

Horas después la lluvia llego, no era muy fuerte pero igual mojaba, acomode las cajas de forma en que no me mojara tanto, pero funciono corto tiempo, le cartón comenzó a deformarse hasta romperse.

Me levante de allí y divise unas luces encendidas que anunciaban que ya estaba obscuro.

Camine un poco, un negocio de tatuajes, me detuve a mirar el cartel y algunas imágenes de estos, quería hacerme uno, aunque no sabia que quería exactamente, seguí caminando hasta encontrarme en medio de la calle, los autos eran pocos y la gente corría para evitar mojarse, yo caminaba lento, no tenia lugar o alguien que me espere.

En la acera, pude ver un billete de 500, parecía estar solo, lo levante y lo metí en mis bolsillos.

-Con esto podré pasar la noche en un buen lugar.

Un hotel justo enfrente de mi, mire el precio en el gran cartel arriba de el, me alcanzaba el dinero.

Cruce la calle fijándome en el semáforo, ya al otro lado me quede inmóvil un par de segundos, tome una bocanada de aire y entre.