Querido Músico;
Estabas esquiando, ¿también haces eso? ¿más perfecto no puedes ser?
Me puse mis patines viéndote, por que, joder, eres realmente hermoso.
Me puse a patinar, y, en unos segundos, me metí en mi mundo, como tú en el tuyo, y Alice en el suyo... que era una dona glaseada.
Algo me impactó en mi mejilla izquierda, haciéndome caer en el hielo, miré a mi alrededor y ahí estaban tú y Alexander, riendo como tontos mientras hacían otra bola de nieve.
"¡Alice! ¡come rápido tu dona!" grité patinando hacia la orilla más lejana de ustedes mientras trataba de taparme de su tiroteo "¡Esto es la guerra!"
Así fue como toda la Escuela Superior de Bellas Artes se unió a una guerra de bolas de nieve, nadie faltaba, primero fue chicos contra chicas, hasta que se metieron los maestros. Luego fue estudiantes contra maestros, algo injusto, pero contando con que el profesor Binns y el Director Cooper eran buenos, fue un empate.
La divertida: Pintora.
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Querido Músico:
Short Story« Sé que somos diferentes, pero, Dios, tú eres la nota que faltaba en mi melodía... »
