Epílogo

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4 años después:

En las puertas de la familia Styles-Tomlinson se festejaba el cuarto cumpleaños del pequeño Edward, un hermoso omega con sus rizos color chocolate y los ojos tan azules como los de su padre Louis.

- ¡Edward! ¡Tus tíos han llegado!-. El pequeño salió corriendo a los brazos de su tío Zayn que estaba siendo acompañado por una chica linda llamada Perrie la cual esperaba a su primer hijo.

- ¿Cómo esta el príncipe de la familia?-. El niño reía por las tonterías de su amado tío.

- No soy un príncipe, ese es mi primo-. El niño señaló con la cabeza la barriga de la omega al lado del chico.

- ¿Lo vez Zayn? Deja al niño que también quiero jugar con él-. El alfa rodó los ojos para permitir pasar a un Niall con Liam detrás, se había vuelto su alfa unos dos años atrás de los sucesos.

- Es bueno volver a verlos-. Harry salió de la cocina abrazando y sonriendo a sus viejos amigos que seguían viéndose como cuatro años atrás.

- Bien, es hora de festejar al pequeño-. Todos salieron al patio trasero a festejar.

Las cosas para todos se habían tornado mejor de lo que esperaban, Louis y Harry habían empezado su vida en Los Angeles junto a su hijo que era todo un niño alfa. Niall y Liam se habían unido dos años atrás y hace apenas dos meses el rubio había quedado en estado por ayudar a su alfa en su celo. Zayn y Perrie tenían ya tres años juntos y habían decidido formar su pequeña familia y cada año iban a visitar a la familia Styles-Tomlinson por cada cumpleaños al igual que ellos a los demás.

La familia de Louis había desaparecido para el chico y por lo poco que sabía sus hermanas se habían ido con alfas con buenos modales y sus padres viajaban por el mundo y jamás los había vuelto a ver y por supuesto que al final Harry tuvo que contarle la verdad ya que la primera vez que el omega quiso hablar con su madre el rizado se lo había prohibido. Louis no volvió a hablar con ella y no porque le quisiera hacer caso a Harry si no por aquel extraño sentimiento de rencor que había nacido en él a causa de aquella historia.

Las muertes de los hombres de aquel día habían sido tapados por John, el chico había heredaro inmediatamente el puesto de jefe de armas de su padre y lo primero que hizo fue el tapar aquellas muertes y por supuesto que ese día tan especial también se encontraba en aquella casa festejando el cumpleaños número cuatro de su amado ahijado.

- ¡Tío John!-. El niño llegó corriendo a los brazos del rubio que era acompañado por un lindo chico de ojos verdes potentes. Un hermoso chico omega llamado Alex.

- ¡Mi pequeño Ed! Bueno, el día de hoy ya te vuelves más grande-. Las risas del niño lo alegraron y el chico fue a saludar a sus padres.

- ¡Dame mi maldita cerveza Payne!-. Todos reían por los berrinches que daba Niall por culpa de Liam. Nadie se metía con la cerveza del rubio teñido.

- No Ni, no puedes tomar cerveza-. Un golpe fue a parar a su cabeza.

- Es tu culpa haberme dejado en estado, tú y tu estúpido celo-. Se cruzó de brazos y Louis veía a su amigo hacer pucheros adorables.

- Hazle caso a Liam, Niall, los protege a los dos-. Louis repartía la comida entre todos.

- Oh por Dios Louis, tú no te quedas atrás pequeño omega-. Aquello lo había dicho demasiado fuerte que incluso hizo que Harry parara de hablar con Zayn y John para prestarle atención a su omega.

- ¿Lou?-. Harry había escuchado aquello pero se había quedado en repentino shock.

- ¡Niall! ¡Te había dicho que te callaras!-. Las mejillas del chico se tiñero de rojo ante aquello.

- Le ibas a decir de todas formas-. El rubio se encogió de hombros y logró quitarle su cerveza al castaño.

- ¡Niall!-. Gritó el chico sobresaltado.

- Es tu culpa.

Las cosas se habían puesto algo extrañas desde el comentario del chico ya que Harry no quería soltar a Louis en ningún momento, el chico se sentía bien pero le daba gracia el ver a su hijo con cara de duda al ver a su padre Hazz con su cabeza en el cuello de su papi Lou.

- ¿Todo bien papá?-. El niño les veía curiosos y fue ahí cuando ambos se dijeron que lo mejor seria decirle a su hijo.

- Ed, ¿qué piensas de los hermanos?-. Los ojos del niño parecieron brillar al nombrar aquello.

- ¡Tendré un hermano!-. Todos los presentes se asustaron ante el grito del niño y Louis no pudo evitar ocultar su cabeza en el cuello de su alfa.

- Se lo tomó demasiado bien-. Sintió un beso en su cabello y sonrió. Amaba aquello.

- Sí, demasiado bien.

Las cosas serian buenas para aquellas familias a pesar de las circunstancias por las cuales ambos chicos se unieron y Louis no se arrepentía de haber deseado al alfa de Harry en aquel celo, aquello había sido su mejor decisión aunque no conocía las razones de su madre para haberle unido al chico nuevo del vecindario, el chico sexy de rizos ahora era su alfa sexy de rizos.

"Y a pesar de que ninguno de los dos llegó a imaginar que las cosas, sus deseos se habían hecho realidad y ambos demostraron su amor y su deseo mutuo"

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*se avienta al suelo* *se pone a llorar* TE VOY A EXTRAÑAR ESCRIBIR MI AMADO LARRY *se va a borradores* *ve la nueva novela* ahre

Aquí termina nuestra amada novela, espero les haya gustado, yo sigo feliz de haber sido recibida con tanto amor :'v (mi primera novela Larry) y espero y disfruten.

ESTO QUEDA A SU PODER:
Tengo tres novelas guardadas y es a su decisión cual empiezo a publicar.

1- Larry
2- Terror (no tiene que ver con Larry)
3- Sadomasoquismo (tampoco tiene que ver con Larry xD) ustedes escogen y ya veré si la publico.

¡Besos y adiós!

No te metas con el alfa | Larry Stylinson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora