Corazón Herido ; 『Nalu.』

2.Febrero Cena romantica❤️

El joven pelirrosa se sentó a un lado de la camilla de la rubia ,como lo hacía desde hacía seis meses. Sonrío entre pucheros y con voz temblorosa.

-Luce... Despierta... No puedes seguir así...ya es Febrero... Tú... Tú mes favorito- su voz se entre cortaba por el terror de que no volviera a ver esos hermosos órbitas achocolatados que le encantaban.-extraño tu aroma... Ese vainilla que me embriagaba y me volvía loco...- tocó la mano de la rubia la cual la tenía pálida y fría.

Derramó unas lágrimas en silencio y sonrío entre ellas.

-¿recuerdas nuestra cena romántica?- murmuró con una sonrisa recordando.- fue en este mes... Febrero...

❈

Después de haberse conocido , 4 meses habían pasado y ya eran los mejores amigos, nada los separaba, salían a comer, paseaban juntos, eran los mejores amigos, y aunque las personas les dijeran "que hermosa pareja" ellos se negaban y decían que solo eran amigos, llevándose las personas con una sonrisa sabiendo que ellos llegarían a más que solo amigos.

La rubia leía un libro que le encantaba, le había contado a su mejor amigo que el autor del libro vendría a Magnolia, a un restaurante súper caro y firmaría libros. Natsu haría cualquier cosa por su mejor amiga y aunque tuviera novia él le daba preferencia a su amiga.

Natsu y Lucy iban en el carro del joven, era un deportivo rojo, la rubia traía sus ojos vendados y con una sonrisa nerviosa le preguntó al joven.

-Natsu, ¿a dónde me llevas?- preguntó escuchando por parte del joven una pequeña risa.

-a un lugar que te encantara Luigi- dijo burlón el joven.

-Es Lucy,no Luigi - dijo la chica inflando sus cachetes llevándose un "awww" por parte del joven.

El carro paro confundiendo más a la joven ,el pelirrosa sacó a la chica y la ayudo a caminar hacia aquel lugar.

Le había dicho que fuera con ropa elegante pero la chica no sabía porque. Le quito la venda de los ojos llevándose una gran sorpresa la rubia, sonrío con alegría al ver aquel restaurante. Se llevó sus manos a sus labios y grito .

- ¡Natsu! ¿Qué significa todo esto?- preguntó confundida la rubia volteando a ver a su mejor amigo.

- dijiste que vendría el autor del libro que te encanta, así que ¿por qué no traer a la chica más hermosa a ver a su autor favorito y de pasada a cenar?- preguntó el pelirosa con una sonrisa.

- ¡gracias, Natsu! ¡No sabes cuánto te quiero!- dijo la joven causándole al chico una sonrisa y un leve sonrojo.

Saco de su bolso el libro y al entrar lo vio.

-¡Es Jerall Fernandes! - grito la joven con una sonrisa.

-yo estoy mejor que el- murmuró Natsu cruzándose de brazos.

La rubia se acercó a hacer fila hasta que le toco.

-Oh, ¿quieres que te lo firme?- preguntó el peliazul recibiendo un "sí" por parte de la rubia.- este libro casi no lo lee nadie... Qué bueno que te guste.

-Si... Es uno de mis libros favoritos jeje...- se acercó a Natsu una vez firmado el libro y se fueron a sentar.

-Buena noches ,¿qué les gustaría de comer?- preguntó el hombre a los jóvenes.

-me trae una lasaña, por favor- dijo la rubia.

-¿y para usted joven?-

-me gustaría un spagetti, por favor- Dijo Natsu con una sonrisa.

-ok, en un momento se los traigo- los jóvenes asintieron.

-Natsu... Perdón,vas a gastar todos tus ahorros en mí y no me gusta eso- dijo la rubia jugando con sus dedos.

-No te preocupes ,Luce, al final de en cuentas...me dijeron que hacen comida muy rica- dijo el joven con una sonrisa.

-esta bien...- dijo no muy convencida.

Trajeron sus comida y comieron cuando una hermosa canción se hizo presente, sacando a bailar a todas las parejas.

Lucy y Natsu se vieron.

-¿me concede esta pieza para bailar Heartfilia?- preguntó el pelirrosa con formalidad.

-sería un honor Dragneel- le acepto la rubia con una sonrisa, llendo  hacia la pista de baile. Sus pies se movían solos, se abrazaban con delicadeza y no hablaban solo se movían, les gustaba estar así, era acogedor para ellos.

Se vieron a los ojos y sonrieron, sus caras se acercaban lentamente, juntaron sus frentes y sonrieron.

-Te quiero, Natsu- dijo la rubia.

-te quiero, Lucy- dijo el pelirrosa.

❈

-me gustaría volver a repetirlo, Lucy...- dijo el pelirrosa con una sonrisa.- espero que despiertes... Y me perdones por la estupides que hice.- finalizó dejando salir el aire que tenía retenido.

Observó la hora y luego la ventana a un lado de la camilla, esta mostraba el hermoso atardecer; se levantó y le dio un beso delicado en la frente a la joven rubia, tomó su mochila del suelo y se la colgó a los hombros para posteriormente salir, se despidió de las enfermeras que ya lo conocían desde hace seis meses y camino hacia el elevador, quien al abrirse se encontró con Mirajane Strauss, quien al verlo unas manchas rosadas aparecieron en sus mejillas y sus orbes zafiro se achicar on bajando la vista.

Natsu entró al elevador y las puertas se cerraron finalmente, el ambiente incómodo no tardó en aparecer.

—Lo siento de parte de Lisanna, desde que terminaron se volvió tan distinta... —tras unos minutos la peli blanca de cabello largo habló casi en un susurro.

—Ella ya era distinta, solo que no te habías dado cuenta, Mira. —las puertas se abrieron y Natsu, finalmente lanzó una mirada de reojo hacia Mira con una leve sonrisa y salió del hospital.

Editada