Me senté frente a Scott. Comenzamos hablar, de pronto le pregunté que si había llegado alguien de intercambio a su salón y dijo que si.
—Oye Scotty ¿y a tu salón no llegó alguien de intercambio?
—Si, un chico, se llama Theo Reaken, lo mas gracioso es que cuándo estábamos en cuarto grado estábamos en la misma escuela.
—Ah.... Que gracioso, ¿seguramente te habló? ¿no?
—Pues si, me reconoció, me saludó y le contesté , no iba a ignorarlo ¿o si?
—Tal vez...— dije viendo a otro lado, en eso viene un chico alto con un cuerpo fornido, traía puesto un suéter delgado negro en el cual se le veían unos brazos que wow. Era castaño y tenía unos ojos claros.
—Hola Scott—dijo el chico.
—Hola Theo, ¿que pasa?—así que él era Theo, pues que bien.
—Hola... —me dijo sonriendo.
—Eh, hola...—sólo lo miré.
—Ah, si, te iba a preguntar que si podía ir a tu casa hoy, para terminar el proyecto de economía.—dijo Theo viendo a Scott. Yo sólo me dediqué a oír y ver.
—Claro —dice Scott. — ¿Liam te quedarás hoy en mi casa, cierto?— me dijo con una sonrisa coqueta. Sólo asentí.
Ya sabía lo que iba a suceder después de que ese tal Theose fuera de su casa...
—Ustedes... ¿Son pareja?—preguntó el castaño.
—SI. —dije sonriendole a Scott
—Oh que bien...
—lo sé —contesté .
—Bueno Scottyte veo al rato—dijo y se fue.
¿¡Scotty!?, ¿¡Scotty!? ¡Pero que se creía este chico con brazos fenomenales! No sólo por tener esos brazos, voy a perdonarle que le diga así a mi chico. Sólo yo puedo decirle SCOTTY. Maldito.
—Bini squitti ti vii il riti.—dije imitando a Theo.
¯¿Qué te pasa Liam? ¿Estas celoso? —dice riendo.
—Obviamente idiota, ¡sólo yo te puedo decir Scotty! ¿¡te quedó claro!? Y viene éste pendejo y te dice Scottyenfrente de mi, sabiendo que TÚ Y YO SOMOS NOVIOS —dije remarcando lo último.
—Liam tranquilizate cariño, todos me dicen así. No es para que te pongas en ese plan, sabes que yo sólo te amo a ti ¿okay?
—Lo sé, pero es que me rompen el culo siempre que te dicen así, ¡sólo yo te puedo decir así! —dije ya un poco triste.
—Primero. El único que te rompe el culo soy yo —dijo mirándome fijamente. —Y segundo. calmate les diré que ya no me digan así, por que tengo un pequeño hombre lobo que les cortará la garganta si me siguen diciendo así. —sonrió.
Sólo le sonreí y me paré para abrazarlo.
Timbraron para entrar de nuevo a clases y adivinen quien estaba en mi lugar. ¡Si! El estúpido de Brett.
—¿Puedes quitarte de mi lugar? —
-¡Claro!
—¿Enserio?
—Pff noo
—¡Entonces para que jodes! Quitate a la mierda de mi lugar, ¡carajo! —el idiota de Brettsólo comenzó a reír y eso me calentó la sangre juro que iba a patearle el culo si no se quitaba de mi lugar.
—Ya pequeño, tranquilizate— dijo riendo y me despeina el cabello, sólo me hice para un lado y me senté.
Maldita sea la hora en que entraste a este instituto. Dije en mi mente.
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