Notas para él.

Nota #34

Después que me subiera a tu carro, ya eran las 5:50, el aeropuerto no estaba nada cerca, y no sabía cuánto tiempo me tomaría llegar.
Durante el viaje me estabas contando acerca de tu amigo Isaac, ya lo había mencionado anteriormente en una de las notas, aquel que se había encargado de decirles a los demás de que me gustabas, idiota. Me contaste que se conocían prácticamente desde que nacieron, ya que sus mamás eran mejores amigas. Me fuiste contando acerca de tu hermano pequeño, que es un año mayor que Eleanor. Me contaste que tu padre había muerto desde hace ya tiempo, y que tu mamá no ha tenido otra pareja desde su partida.
No sé si me pasa solo a mí, pero cuando alguien me empieza a contar cosas privadas de uno mismo, no sé qué decirle, me incomodo, siento que no me las tiene que decir, porque tal vez nos conocemos poco y porque confía mucho.
Yo no sabía que contestarte, porque esta conversación era como algo de ¿intercambio de información?

—¿Y qué me cuentas de ti, Kriss?

—Mi vida no es nada interesante —Contesté.

—¿Música favorita? —Me volteaste a ver y después centraste tu vista en la carretera.

—Me gusta cualquier tipo de música. —Me quedé un momento pensado y añadí —Bueno, no me gusta mucho el heavy metal, no es mi tipo.

—¿Tus padres siguen juntos?

—No, hace años que se separaron.

—¿Motivos?

—Vaya, volvimos a los interrogatorios —Bromeé

Sonreíste y respondiste —Al parecer me gusta interrogarte.

—Al parecer te gusta acosarme —Repuse y te reíste, ¿ya había mencionado que me gusta tu risa? La mía se podría confundir con la de una foca agonizando. Chequé mi reloj, eran las 6: 10, tal vez podríamos llegar a tiempo.

—Bueno, al menos cuéntame algo de ti, creo que sería lo más justo.

—Eleanor es mi única hermana, y la veo pocas veces.
«Me gustan los animales, aunque no pueda tenerlos, a mi mamá no le gustan.
Todavía no me decido que carrera estudiar, no soy buena en ningún deporte, tampoco sé nadar, si tuviera un súper poder sería la telequinesis, y ¡Eso es todo!»

—¿Desperdiciarías la capacidad de tener un súper poder en telequinesis? —Resoplaste — Cualquiera hubiera dicho volar.

—Volar es para perdedores —Replique.

Abriste la boca como si te hubiera ofendido. —Me acabas de llamar perdedor.

Me reí —Wow, te acabo de llamar perdedor —Repetí.

Y el tiempo se pasó volando, platicando, conociéndonos. Y no me di cuenta que ya estábamos en frente del aeropuerto.

—¡Llegamos! —Eran las 6:55, tenía que correr, posiblemente Eleanor ya esté ahí ¡uf!
Saliste el auto y lo rodeaste para llegar a mi puerta y abrirla, pero yo ya estaba afuera.

—¡Vamos, corre, corre, corre! —Y te jalé de la muñeca.

—¡Me dislocaras el brazo! —Reclamaste.

Hice caso omiso a tu queja y seguí corriendo.
Llegué justo a tiempo para ver entrar a una niña pequeña de cabello castaño y unos hermosos ojos avellana, se lo había sacado de mamá.

—¡Eleanor! —Grité para que me viera, y funciono, ella abrió la boca de sorpresa y corrí hacia ella, sin ti, la abracé, no me había dado cuenta de cuanto la extrañaba. —¿Estas bien? ¿Cómo te fue en el viaje? ¿No te toco con alguien que tenía cara de pedófilo?

—Sí, bien, ¿qué es pedófilo? —Sonreí y la abracé más fuerte. —Kriss, me estas asfixiando —Rio, su risa era encantadora.

—¿Así que tú eres Eleanor? Mucho gusto, soy Andrew —Me levanté y me puse a un lado de ti y solo vi la cara de sorpresa de Eleanor y seguido de un ¿Quién es él?

—Él es un ami...

—Yo soy el novio de tu hermana y el papá del futuro bebé que tendremos tu hermana y yo—Me jalaste hacia tu costado y rodeaste tu brazo en mi cintura.
Sonreíste con suficiencia, lo único que pude hacer fue abrir y cerrar la boca como un pescado.

E igual te di un codazo en las costillas te lo merecías —¡Auch! ¿Sabes? Eso duele —Te quejaste.

—¡Te lo mereces por mentiroso! Eleanor, Andrew es un amigo que me hizo el favor de acompañarme a venirte a buscar, solo eso —Y te lancé una mirada de advertencia de que, si abrías la boca, posiblemente te patearía la espinilla, ¡Cuánto se puede expresar con una mirada!

—¿Por qué le mientes a tu hermana? ¡Ella se merece saber la verdad! —Y volviste a sonreír.

—¡Pero si estas mintiendo!

—Está bien, tienes razón, estoy mintiendo. —Suspiraste y añadiste —Pero no te enojes, el pequeño Darrell se pondrá mal.
Respiré profundamente, eres un idiota, definitivamente te iba a matar, pero no enfrente de mi hermana.

—Vamos Ele —Agarré la pequeña mano de Eleanor, y te fulminé con la mirada —Andrew tiene problemas mentales.

—¡Yo no tengo ningún problema mental!
Ignoré lo que dijiste y caminé para buscar las maletas de Eleanor.

~Kriss.

-------------------------------------

¡HOLA! ¿Cómo están? ¡Perdón por siempre actualizar tan tarde! Pero es que estuve ocupada, y deje el capítulo incompleto y apenas lo acabo de acabar.
¡Espero que les guste!
¡Muchísimas gracias por los 4.8 k! Ustedes son los mejores.
Y igual muchísisisisisisisimas gracias por el puesto #75.
Nunca me cansaré de agradecerles.
¡Espero que estén bien! ¡Saludos!