—¿Qué rayos tienen que ver ellos con Lena? —preguntó John exasperado.

—Ellos lo provocaron —respondió Lucinda.

Todos se quedaron mudos. Parecía que el tiempo se había detenido. Mi papá me miró fijamente esperando que yo respondiera algo, pero no sabía qué decir.

—Así es —Lucinda apagó el cigarrillo—, Helena cometió el estúpido error de involucrarse con ese tipo cuando tenía catorce años, intentaron escaparse y el tío de Robert los descubrió. Adrián golpeó a ambos por esto, los "castigó" según él. Lena quedó muy mal y tuve que largarme de Londres, para mantener seguros a mis hijos. Me ofende un poco que hayan pensando que yo ocasioné eso.

—No puedo creerlo —Carlos parecía algo indignado—, ¿por qué no los denunciaste?

—Lo hice —replicó de inmediato—, pero ellos pudieron más que nosotros, asi que decidí que lo mejor era largarnos.

—Ya basta madre, creo que iré al hospital, no puedo seguir escuchando esto.

Anthony salió de la sala sin que nadie tuviera tiempo de detenerlo. ¿Tanto le afectaba?

—Todo esto es muy extraño —Carlos no estaba convencido del todo—, según John, estas heridas tienen más tiempo que apenas cuatro años.

Lucinda no respondió nada acerca de esto.

—Bueno, si no van a creer nada —se levantó y tomó su bolso— será mejor que me vaya a ver a mi hija, pero tú Daniel, deberías cuidar mejor a Alexia.

—Espera —Daniel se levantó y fue hacia ella—, ¿por qué dices eso?

—Esa familia está aquí por una simple cosa —tiró su cigarrillo al fuego de la chimenea—, y esta centrada en tu hija.

—¿En mí? —pregunté incrédula. 

—Así es, querida.

Se sentó de nuevo y por un momento el tema de las múltiples heridas de Lena quedó en el olvido y ahora todo se centraba en mí. A decir verdad, esto no estaba saliendo como me lo plantearon. Y ya estaba empezando a hartarme.

—¿Qué saben de ellos? —preguntó Lucinda.

Nada. Nadie sabía nada de ellos. En esta familia la única que había ido a visitarlos era Janine. Según ella eran una familia muy linda, unida y blablabla, además se sentía cómoda por haber encontrado a una joven de más o menos su edad; no había tenido oportunidad de ver a Jillian, pero Janine estaba encantada.

—Eso creí. Uno de ellos tiene una cierta situación que ha venido fastidiandome desde hace mucho —Lucinda encendió otro cigarrillo—, Peter es el hijo mayor de tres hermanos, después sigue Victoria y Halina.

—Es imposible que sean tres hijos si Jillian es su madre —replicó Daniel.

—¿Quién dijo que ella es la madre? —respondió Lucinda—, hace diez años, la hermana de Peter, Victoria, desapareció, nadie sabe qué pudo haber pasado con aquella niña, pero su padre tenía muchos enemigos en la ciudad y cualquiera pudo hacerlo. Movieron cielo, mar y tierra para encontrarla pero nada resultó y ese chico se salió de control. Ahora están aquí y Alexia, bueno ella llena bastantes características.

—¿Piensan que es ella? —Carlos me miró fijamente, yo en cambio no respondí nada.

—Harán todo lo posible por convencerte de que asi es, tenlo por seguro, ese mocoso es una amenaza —Lucinda iba aumentando la voz—, no me sorprendería que ellos estén detrás de todo esto.

A juzgar por la cara de todos, sabía que empezaban a plantearse la idea de que ellos podían ser los culpables, sólo unos cuantos movimientos más y todo quedaría listo.

—Necesito ir al hospital —Lucinda se levantó—, dejaré esto en ustedes, o tal vez quieran esperar otro ataque o un secuestro.

—Yo te llevaré —se ofreció John.

Carlos también se levantó. Ahora todos se iban y me dejaban aquí con un padre más nervioso de lo usual.

—Tal vez vaya en la noche a ver a Lena —dije antes de que se fueran.

—Gracias, linda —Lucinda me sonrió—, esperemos que ya esté despierta.

Salieron de la casa y todo se quedó en total silencio. Daniel se sentó junto a mí sin decir nada más. Pasó sus manos por su cabello, parecía frustrado.

—Papá...

—Esta decidido —dijo en voz baja—, te vas a Londres el domingo.

¡QUÉ!

"El Elemento Perdido #1: Fuego" ⚠️Disponible Hasta El 31 De Diciembre⚠️जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें