—¡Jess!— toquidos y gritos en mi puerta me hicieron despertar, me levante de mala gana y abrí la puerta para encontrarme con Megan. Sin decir ni una palabra regrese a la cama.
—¿Me vas a contar lo que sucedió?— dijo ella sentándose a mi lado.
—Vi a Jack— tragué saliva —Besando a Ashley—
—No puede ser... ¡Esos malditos!— gritó Megan furiosa —Cuando los vea yo..—
—Déjalo Megan— la interrumpí —Por ahora solo quiero estar con mi mejor amiga comiendo helado de chocolate— concluí dándole una ligera sonrisa.
—Iré a comprarlo— dijo ella levantándose —Y también todo lo necesario para una buena tarde de películas, mientras tú levántate y elige algunas— terminó antes de salir de mi cuarto.
De mala gana me levante y cuando ya iba a salir de mi cuarto me topé con un espejo, me veía horrible, tenía los ojos hinchados de tanto llorar, me veía más pálida de lo normal y mi cabello era un desastre, en resumen parecía un Zombie. Antes de salir decidí pasar al baño, lavarme la cara y los dientes antes de nada, cepille mi cabello pero decidí dejar mi pijama; así que sin más salí, porque aunque estuviera destrozada por dentro, no quería que se notara por fuera.
Baje a la sala, me senté en el suelo mientras veía las películas que había, creo que hace mucho que no veo películas en un dvd... El timbre sonó y me levante otra vez de mala gana ¿Por qué no se llevó mi llave Megan? ¡Agh!
—Megan ya sabes que puedes llevarte mi...— cuando termine de abrir la puerta no había ninguna Megan, solo estaba ahí un rubio muy familiar. —Llave— intente cerrar pero Jack se interpuso rápidamente.
—Jess, por favor solo quiero hablar contigo.—
—Vete, por favor— pedí con las lágrimas apunto de escapar de mis ojos.
—No me voy a ir hasta que me escuches— dijo decidido mientras tomaba mi muñeca.
—No.— susurré dejando salir una lagrima —Solo déjame...—
—Si tan solo sientes la mitad de lo que siento yo por ti— dijo secando mi lagrima con su pulgar; sentirlo me dieron ganas de abrazarlo, besarlo y no soltarlo jamás, pero había algo que me lo impedía, mi dignidad. —Déjame decirte la verdad, toda y si después de eso lo que quieres es que me aleje, lo haré.— yo solo asentí con la cabeza lentamente.
Entonces salí dejando la puerta medio abierta atrás de mi, me giré hacia arriba para ver su rostro y pude ver que por primera vez no me parecía perfecto, tenía ojeras bajo sus ojos ligeramente rojos, además de que estaba pálido y su cabello estaba totalmente despeinado, pero aun así yo lo seguía amando, ahora entiendo a lo que se refieren cuando dicen que el amor es ciego.
—Yo... Salía con Cassandra porque nuestros padres así lo quisieron, ella ni siquiera me caía bien y...—
—Pero cuando te conocí estabas triste porque la viste besándose con Adam.— el se pasó una mano por el cabello, dándome a entender que eso también fue mentira...
—En realidad dejé que eso pensaras, pero solamente estaba molesto con Adam, después de todo él era mi mejor amigo y bueno creo que tal vez en realidad yo soy el malo del cuento... Yo "engañaba" a Cassandra con varias chicas, incluidas a Ashley, era un cretino mujeriego y a la mayoría le daba alas de más, pero la que más se ilusionó fue Ashley.— yo solo lo miraba atónita, no podía creer lo que me estaba diciendo. —Adam sabía de todo lo que hacía y al final empezó a sentirse culpable, comenzó a hablar más con Cassandra, hasta que los vi juntos y eso me pareció una gran traición por parte de Adam, así que me fui hecho una furia hasta que choque contigo...—
—Y entonces jugaste conmigo y continuaste viéndote con Ashley.— dije mientras sentía la tristeza y el enojo mezclándose en mi interior —No necesito saber nada más— me di la vuelta pero él me tomo del brazo.
—No no es así, me enamore de ti.— me giré y pude ver sinceridad en sus ojos —Dejé de verme con Ashley y con todas ellas, cambié por ti.—
—¿Ah sí? Porque yo ayer de vi muy a gusto con Ashley.—
—Ella no dejaba de mandarme mensajes y llamarme, siempre se aparecía en mi departamento y solo accedí a verla ayer porque me amenazo con contarte todo y dijo que tenía fotos... Me dijo que solo quería despedirse y yo no quería lastimarte, no quería que lo supieras por eso estuve ayer con ella.—
—¡Pero lo hiciste!— grité con rabia —Me lastimaste, engañaste, rompiste mi corazón...— dije eso último en un susurro con lagrimas escurriendo por mis mejillas.
—No digas eso... Yo no quería que esto pasara, tenía miedo de perderte, por eso no te dije la verdad— entonces él me abrazó y por más que me hiciera la fuerte, amaba estar así entre sus brazos. —Te amo Jess— eso me hizo separarme ligeramente ¿Es en serio? Me giré para verlo a los ojos —Jamás había sentido algo así por alguien, solo dame una...—
Pero no lo dejé terminar, porque sin resistirme más me lancé hacia sus labios ¡¿Dijo que me amaba?!, me colgué de sus cuello y el atrapo mi cintura uniéndonos aún más.
Yo podría decir que era asunto arreglado, tal vez tendría que comprarme una pizza, un bote de helado y mostrarme los mensajes que le enviaba Ashley, pero de algo estaba segura, no iba a dejar que una bruja terminara mi felicidad... O bueno eso creía yo, cabe mencionar que aveces suelo ser demasiado ingenua.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
