Cap. 14 Más lágrimas

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Llegué a mi casa aún sorprendida por lo que había visto, seguía en shock. Ya no tenía dudas. Estaba totalmente claro que ella era un hija de puta. Me senté en el sillón aún pensando y tratando de resolver ese pequeño rompecabezas que tenía en la cabeza. Todo se centraba en ella en estas últimas 4 semanas (1 mes para ser precisa). La cosa va a así:

Nikki nunca volvió a llamar. Tres días después, fui a buscarlo al estudio y me dijeron que habían comprado una casa en otro lado, y que los cuatro ya no estaban ahí. Sí, me puse mal, me llené de tristeza y odio, y por lo consecuente traía una pelea interna. A los otros cuatro días, decidí ir al "Troubador" a pasar la noche, y vaya sorpresa que me llevé, resulta que la tal Charlie andaba por la barra conversando muy cariñosa con un tipo medio chino y bajito, así que no armé problemas y mejor me fui del lugar. Había visto en algunos puestos de revista a la banda, pero simplemente no las compraba, el orgullo podía más que yo. Aunque lo peor de todo es que en este mes, en este tiempo, Nikki nunca se fue de mi cabeza, guardé el disco que compré al principio en el lugar más profundo de mi casa, pero no era el disco o una simple imagen de él, eran las cosas vividas, pero ¿saben?, me imaginaba que seguro él ya ni se acordaba de mí, comencé a creer que eso de "otra puta más" era verdad. En fin. Ésa fue una parte, la segunda fue la de Charlie, verla salir de un lugar en donde practican abortos clandestinamente, y es que ¿qué más puedes hacer en un lugar así?, es decir, si te duele la garganta no vas ahí a que te curen, obviamente iba a abortar, pero aquí la incógnita era "¿POR QUÉ?".

Hacía un par de horas salía de una clínica *de las buenas* con la cruda verdad. Yo, tan cobarde, recordé una vez cuando mi madre en pleno estado de ebriedad me dijo que pensaba abortarme, sí, otra cosa para sentirme mierda. Llegué frente a ese lugar y mi mente fue más lejos, y entonces decidí no hacerlo, no cometer los mismos errores que mi madre, ya me iba cuando la vi salir a ella, a Charlie, era tan sigilosa para que nadie la viera. Lo único es que la reconocí. Y después pensé ¿en serio podré sola? ¿LA es un buen lugar para una "familia"? Volví a pensar en hacerlo, pero no haría lo mismo que esa pendeja de mierda, no sería tan estúpida o cobarde como ella, quizá me de una lección con eso, pero de los errores se aprende, y estaba decidida a dar lo mejor de mí.

De la nada tocaron el timbre. Me quedé congelada ante tal imagen. Nikki. El famoso Nikki Sixx parado afuera de mi departamento.

-¿Puedo pasar?-

-No, adiós-dije seria y traté de cerrar la puerta, cosa que detuvo con su mano-¿Qué mierda haces? Te dije que no-dije empujándola, me la aventó

-Linda, extrañaba tus malos tratos, ¿cómo has estado en este tiempo?-se pasó de largo y fue a la sala, lo seguí

-Bien, no los extrañes más... ¡Vete ahora mismo!-me paré frente a él enojada

Rió y se paró, comenzó a dirigirse hacía mí-¿Ves? Por eso me encantas-me abrazó y comenzó a besarme

-¡Te dije que te fueras!-lo empujé

-¡Hey! ¿Qué pasó con ese "te quiero" de la vez pasada?-

-¿Quieres saber qué pasó? ¡Un puto mes SIXX! Te fuiste sin decir nada, desapareciste completamente. Pero seguro tenías algo más importante como cogerte a cualquier zorra que se te ponía en frente y decirles lo mismo que a mí. ¿Dónde quedó ese "Te quiero Sam"?-dije imitándolo

Rió-¡Pero ya estoy aquí hermosa! ¡He vuelto! Volví a tu lado. Esta vez quiero que sea para siempre y no miento. Quiero que ahora sí exista un Tú y Yo. No miento Sammy-dijo serio

-¡Sólo vete de aquí! ¡Mierda!-caminé a la puerta

-¿¡VERGA SAMANTHA, YA NO ME AMAS?!-me gritó con tanta fuerza que me quedé quieta, sin más una lágrima salió de mi ojo, no supe que responder, no quería decir algo de lo que después me arrepentiría, se acercó a mi-No, no, no... Mírame Sam, mírame a los ojos-me alzó la barbilla-Todo lo que te digo es verdad. Ya no más idas ni vueltas, quiero estar contigo, siempre ¿entiendes? SIEMPRE-me atrapó en una beso.

Esta vez no me alejé, quería y necesitaba ese beso, lo necesitaba cerca de mi, nos dirigimos al sillón, se sentó y yo encima de él rodeándolo con mis piernas. Dejamos que todo fluyera con tranquilidad. Caricias, miradas, besos, todo empezaba bien, de repente los dos nos miramos y sonreímos, lo abracé con una fuerza grande, estaba aliviada de tenerlo conmigo otra vez.

Looks that Kill (Nikki y Tú)Where stories live. Discover now