Querido Ryan {COMPLETA}

Capítulo 21: ¡¡Me acaba de pedir salir!!

Sus labios son tan adictivos que me impresiono sobre la facilidad que lo ejerce.

Más cerca no podríamos estar, y por intuición le cojo por la nuca intensificando aún más el beso haciendo que sus manos se posen en mi cadera.

Y sin pensarlo dos veces introducimos la lengua, saboreando cada parte de nuestro interior. Se siente tan bien, que con un simple beso me hace reaccionar que Ed es el príncipe azul que cualquier chica quisiera tener.

Me agrada saber que Ed no intenta ir más allá, me respeta, y no solo me quiere por el sexo, sino por algo más y eso me pone de lo más feliz.

Nos separamos sintiendo como esa chispa aún sigue revoloteando por mi exterior.

Percibo como sus labios están hincados y rojos, y como sus pupilas que están dilatadas, y una mirada traviesa se posa en sus labios, haciendo que en mi barriga explote una cantidad de cosas indescriptibles.

Y sin más, me da un casto beso en los labios y me susurra:

-Es el beso más apasionado que he sentido por alguien. -Y me besa la mejilla.

-Tú tampoco lo haces tan mal, aunque he visto mejores. -Le miento para hacerlo rabiar y poder observar como su ceño se frunce inconscientemente.

¿Pero qué dices? ¡Si es el mejor beso que has hecho en tu vida!

Aparte, a nadie más has besado, excepto a Ryan ...

-¿Perdona? -Muestra el ofendido, haciéndome reír y besarle tan apasionadamente como antes.

-Es broma. Eres mejor de lo que pensaba.

-Eso está mejor.

-¡Oye! ¿Y ese ego? Bájalo o lo tendré que hacer yo. -Le doy un pequeño empujón por la parte de la barriga.

¡Por la madre santísima! ¡Qué es eso? Es piedra pura, ¿Dios como será tocarla?

¡Cochina! ¡Sácate esa visión de la cabeza.!

-¿Así que mi Kate ha salido traviesa eh? Cariño, para tocar has de pagar antes. -Me río aunque pagaría lo que sea por tocarlo.

-¡Por favor! ¿Cuando te has vuelto tan sexy y tan arrogante al mismo tiempo? - Le digo rápidamente. Él arquea una ceja indicándome la barbaridad que he soltado.

Me sonrojo de inmediato haciendo qué una carcajada salga de su preciosa boca.

A él le gusta hacerme sufrir.

-Quiero decir -Me interrumpe - ¿Así que soy sexy eh? -Sonríe traviesamente.

-Serás ton ¡Auch! Mi cabeza! ¡Ahhh! Que horror ¿Qué es esto? Es como si una ataque de migraña me invadiera. -Me encojo posando mis manos en mi sien, intentando aliviar el dolor.

-Tranquila Kate, es muy común, no te puedes sanar de un accidente tan reciente. Te aconsejo que ingieras un Nolotil, es un anti inflamatorio, y esto es para curar esa cabecita que llevas dentro. -Me entregó un papel con los dos medicamentos.

-Oye, estoy molesto porqué ayer acabaste con Ryan ¿Qué hacías con él? Él no me lo acabó de decir. -Su cara pasó de una sonriente a una molesta y furiosa.

-Oye, aún sigo molesta por lo que me dijiste ayer. -Le frebté.

-Kate, lo siento mucho, lo que dije ayer no lo dije yo, sino el Ed enfadado. Todo lo que dije fue lo primero que se me asomó por la cabeza, todo era mentira, seguro que alguna vez a ti te ha pasado. -Asentí dudosa aunque ya perdoné a Ed mucho antes del accidente.