El amor puede llegar a ser correspondido por la personas que menos esperas, así le pasó a 2D.
Pasen y lean una historia de amor y muchos problemas. Por supuesto también los integrantes de la banda gorillaz pasarán por cosas buenas.
Enemigos que hará...
Su enojo se reducía. La respiración volvía a su ritmo normal. Paró y vió al jóven frente a él, 2D.
El menor lloraba con dificultad debido a los golpes. Su llanto era amargo y transmitía dolor.
Sentía culpa. Algo en su pecho le decía que no le gustaba verlo sufrir. ¿Qué sucedía con él?
—Hey, inútil. Deja de quejarte —Lo dijo sin alzar la voz—. Vamos, no exageres. Te he tratado peor en otras ocasiones —No funcionaba sus palabras. Por el contrario, las lágrimas de Stuart aumentaron, llevándose sus manos a la cara para cubrirse.
—Calmado, faceache —Le agarró las manos para mirarlo...
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...Logró hacerlo. Se puso de cuclillas para estár al nivel del peliazul. —No seas bebé y para de llorar —Ordenó mientras sus ojos hacían contacto visual.
—L-lo siento.
—¿Te disculpas por el llanto? —Alzó una ceja.
—No... L-lo hago por el... —dudó en decirlo. Respiró y tragó en seco, agachando la cabeza— ...b-beso —En su interior se decía a sí mismo que no era verdad, pues desde hace días necesitaba ese contacto.
Soltó el agarre y volvió a su postura inicial. —No sé de qué hablas.
2D se paralizó ante tal respuesta, era como si nunca se fueran a solucionar sus problemas. ¿Acaso Murdoc olvidó el beso de hace unos minutos atrás?
—Haré como si no lo hubieras hecho —prosiguió—, pero no lo vuelvas a hacer o te mataré.
Se tranquilizó al saber que recordaba el beso, y fue extraño que le diera otra oportunidad. Antes lo hubiera corrido de patadas de su habitación después de casi romperle todos los huesos.
—Entedido —Respondió. Se levantó con sumo cuidado, debido al dolor de los golpes.
Lo último que vió el menor fue la puerta cerrase frente a él.
(. . .)
Llegó a su casa, era tarde. El cielo se pintaba de color naranja, las nubes como algodón lo decoraban. Se cuestionaba y preocupaba el cómo estarían sus amigos, esperaba que Murdoc no terminara asesinado a 2D.
—Hoy fue un buen día —Sonrió, recordando la cita que tuvo con Hiro. Subía las escaleras, caminó a su habitación, se encontró con Russel.
Él le saludó alzando una mano.
—Konichiwa. ¿Cómo está todo, Russ? —Era evidente que con "todo" se refería a 2D y Murdoc.
—Creo que bien —La verdad es que no escuchó nada que indicara que la vida del menor estuviera en riesgo—. ¿Si platicaremos de ello como quedaste?
—¡Sí!
Ellos dos habían quedado deacuerdo para hacerlo. Eran una familia y debían apoyarse, a pesar de no acostumbrarse a contarse sus cosas y menos Murdoc, él era el que nunca accedía a eso.
Tenían planeado que cada uno charlaría con los dos, pero por separado.
Se dirigieron a las habitaciones. Noodle al de Murdoc y Russel al de 2D...
