Nuestra Historia De Amor (Vegeta X Bulma)

Reacción en cadena

Bulma: vamos a ser padres! - sonrió emocionada con lágrimas en sus ojos

Vegeta: NO ES POSIBLE! - gritó trastornado.

Bulma: Ve... Vegeta... - pronunció su nombre débilmente y luego rió cínicamente - que no es posible? que creías? acaso el todopoderoso príncipe de los saiyajins no sabía como se hacían los niños? - muy enojada

Vegeta: No seas necia! los saiyajins no somos compatibles con ninguna otra raza del universo geneticamente, mi raza es pura y no puede mezclarse! eso es un deshonor! - gritó airado - todos los cruces de saiyajins con razas inferiores terminaban en abortos o dando a luz niños que apenas vivían unas horas... U.U yo no me haría muchas ilusiones de ser tu... sería mejor que buscases un modo de deshacerte del problema... porque si sigues adelante podrías hasta morirte - dijo fríamente.

Bulma: que considerado, ahora te preocupas de que me muera... JA, y Gohan? el hijo de Goku? - dijo mirándolo inquisitivamente

Vegeta: "es verdad... no había pensado en el... el hijo de Kakarotto, como fui tan estúpido de no pensar en eso? este planeta es distinto a todos los que conocían los de mi raza... mis pensamientos estan anclados en el pasado, quizás... si pueda producirse hibridación con la raza humana... de hecho es posible! ni siquiera lo pensé, ese mocoso de Gohan es la prueba de ello... pero como?"

Vegeta divagaba en sus pensamientos con mirada inexpresiva, mientras Bulma estaba muy nerviosa tratando de imaginar lo que pasaría por su cabeza, lo cual era imposible de determinar, ya que el príncipe no dejaba traslucir en absoluto un gesto, una expresión, algo que delatara sus emociones o sus ideas...

Bulma: Sabes que te digo? que me importa un carajo lo que pienses! porque a ti te parezca una desgracia o un deshonor, yo no voy a abortar a mi hijo, si no lo quieres reconocer es tu problema, preferiría que creciera con un padre, pero si no eres bastante hombre como para hacerte cargo de las consecuencias de tus acciones, criaré a mi hijo sóla, no te necesito a mi lado, y no te preocupes que no te daré el gusto de morirme! tendrás que vivir con este deshonor! MALDITO! FUERA DE MI VISTA!

Vegeta: NO TE ATREVAS A DARME ORDENES Y MUCHO MENOS A INSULTARME! - gritó - crees que por haberte acostado conmigo puedes tomarte esas confianzas? eh? - dijo acorralándola en la esquina.

Bulma comenzó a llorar y entonces Vegeta fue consciente de lo cruel que estaba siendo con la única persona que le había tratado bien en toda su maldita existencia, la única que le había querido, la que le enseñó a amar, si... el amaba a aquella humana insignificante, y en el fondo de su corazón se sentía embriagado con la idea de tener descendencia, de tener un futuro para su estirpe... pero y si el niño moría? que pasaría si era más debil que el hijo de Kakarotto! eso sería aún mayor deshonor... si ese niño era débil el tendría que eliminarlo. Eso es lo que hicieron durante siglos con la estirpe Real del planeta Vegeta. Sólo los más fuertes sobrevivían, sólo si el bebe demostraba tener el nivel de potencia de pelea más alto que el resto de los saiyajins del planeta tendría el honor de seguir viviendo, en caso contrario era eliminado... pero el estaba implicado sentimientalmente con la humana, cómo podría el matar a su hijo? ella jamás le perdonaría por eso... Cuando despertó de sus pensamientos se vió a si mismo abrazando a Bulma. El no era consciente en qué momento la había abrazado, no sabía en que instante ella había comenzado a llorar sobre su pecho, ni se percató de que le acariciaba el pelo casi automáticamente. Entonces la separó, se dió vuelta y se fue a entrenar de nuevo sin decirle ni una palabra más.

Toda la noche la pasó realizando entrenamientos instensivos en la cámara de gravedad, se sentía realmente aturdido, golpeado por aquella noticia. No podía concentrarse de ese modo, no podría soportar ver a esa mujer ilusionada con su embarazo, no podía encariñarse con ella más, tenía que alejarse de ella, si llegaba el caso, tendría que eliminar al bebe... así que decidió alejarse de Bulma lo más que pudiera. Los siguientes meses fueron fríos, distantes, oscuros en su relación. Vegeta la evitaba, pasaba largas temporadas fuera de la CC. Bulma sufrió mucho con esta actitud, pero su nueva situación le dió una energía nueva para seguir viviendo. Iba a ser madre, y no podía llorar o sufrir por Vegeta, tenía que pensar en el niño, ahora esa era su prioridad, y no otra, sólo pensaba en su bebe, y respecto a Vegeta, ella tampoco podía odiarlo, le amaba irremediablemente, así que vivió sólo esperando durante estos meses en el fondo de su corazón el momento en que el, aunque no volviera con ella, al menos, ablandara su corazón y se diera cuenta de lo que significaba tener un hijo, y comenzara a ser un padre para el.