El joven amo ¿un doncel?

capitulo IX

En una hermosa mansión se encontraba una chica rubia y a su lado se encontraba una castaña.

-My Lady, no debería estar triste, el amo se fue pero esta bien cuidado.- decía la castaña.

-lo se, pero...- no pudo terminar la rubia pues unos toques en la puerta le interrumpieron.

-My, lady, le llego correo- dijo una pelirroja y esta le acerco una charola de plata y en sima que aquella charola contenía una carta.

-gracias, ambas retiren se- dijo una ves que vio el sello.

Aquella carta era de su esposo, ella abrió la carta.

Elizabeth.

Han pasado ya unos meses desde que deje la mansión por ordenes de la reina y si encargo. Me alegro informarte que dentro de un mes llego, pero No llego solo, hay un asunto que tu y yo debemos hablar en cuanto llegue.

Ciel P.

aquella dama puso feliz pues su esposo regresaba casi después de 10 meses fuera de la mansión.

Mientras aquella dama se alegraba en una mansión.

-¿esta seguro amo? -.con algo de duda contestaba la maid.

-si, ya me siento mejor y los niños ya están bien. -contesto el chico.

-no estoy muy seguro de lo que dirá Elizabeth. - decía el mayordomo.

-no me importa, ella no tiene que saber la procedencia de los niños. - dijo volteando se y encarando a sus sirvientes.

Ciel.

Hace unos meses mi maíd, Alice me dijo que yo era una de las pocas o uno de los pocos hombres que podía concebir vida, Doncel, fue el termino que ella uso, por fortuna para mi unas horas antes de descubrir mi particular 'don' me había llegado una carta de la reina, la cual me mandaba a una misión que me mantendría lejos el suficiente tiempo para evitar sospechas de algo.

Para ayudarme en todo lo que necesitará me acompañaron Alice y Sebastian, ya que ellos no eran unos sirvientes ordinarios.

Cuando me acuerdo cuando le dije a Sebastian que iba a hacer padre el entro en shock cadí me da un infarto de la angustia, puesto que el no reaccionaba.

Flash back.

-amo, por que Alice viene con nosotros?- me pregunto, pero yo solo Sonreí es que Sebastian no se imaginaba lo que pasaba.

-te lo diré una vez que lleguemos - dije en el tono mas serio que pude.

-¿que te mueres de nervios o es que estas celoso que yo venga?- y ahí estaba el humor negro de Alice. Pues a pesar de pasar por una sirvienta o una magnifica dama, ella tenia un humor negro cuando entraba en confianza.

- ¿tu sabes algo?-.acuso Sebastian a lo cual ella solo le respondió con una sonrisa de gato Cheresire.

-claro, esta 'moción' la aremos lo mas tardada posible. - dijo ella dejando a Sebastian mirando me con duda.

Después de esa charla fuimos a la mansión que perteneció a la familia de mi madre, aunque claro nadie sabia que estaba a mi nombre, solo una persona pero esa persona ya no estaba con nosotros.

Al llegar yo me fui directo al baño pues el viaje me agito demasiado.

Estaba comiendo y al terminar suspire.

- Alice, Sebastian, tomen a ciento.

- Sebastian... tengo algo importante que decirte. - esta muy nervioso no sabia cono decirlo, era un tema muy delicado.

-diga...-

-dime.

-es difícil decir esto, yo... yo... ¡ESTOY EMBARAZADO!- bien no lo solté con delicadeza a lo cual el demonio solo se Congelo.

-¿QUE?-

-lo que oíste demonio idiota, debiste ser precavido. - dijo Alice algo enojada una vez que el pudo pronunciar palabra.

-yo... tu... cuando.. - era raro, era la primera vez que veía a Sebastian tartamudear y es perfecto shock.

Una vez calmados los año mes y Sebastian casi asfixiado por la emoción. Alice pero se dio a contarme cosas que el gran idiota no me había dicho.

- joven amo, demonio idiota... como ya le había explicado usted es un doncel, un hombre que ha nacido con ambos órganos de reproducción tanto masculina como femenina, ahora bien hay muchos que nacen con su cualidad pero a pocos les sirve el útero, usted es un Donde sumamente fértil.- ella hizo una pausa para tomar aire y que tanto yo como Sebastian procederemos lo que había dicho.

-desde cuando lo sabes- esa no había sonado como una pregunta, sino mas bien como una afirmación.

-desde la primera vez que vi a Ciel, tuve mis dudas, no sabía cómo comprobarlo.... hasta hace unas horas...- dijo viendo nos en forma picara. - bueno un demonio, no puede embarazar a alguien sin seguir ciertos pasos.

-¿he?- espera que...

- sip, Sebastian hizo los pasos al pie de la letra pero no contó que tu fueras doncel...

Fue mi turno de estar en shock. Espere. ¿Cuando la habitación se volvió negra?