[6] Destroyed. {+18}

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Nota de la autora: de aquí en más los capítulos de volverán más explícitos, tanto en gore como en cuestiones sexuales.
Si esto te desagrada, puedes saltarte estas escenas (las marcare con algo) o dejar de leer.
[Podrían perderse de algunas cosas importantes por saltarse estas partes.]

Un día viernes nublado y algo sombrío hacia presencia.
La joven de negros cabellos se levantó animadamente para ir a su escuela, al salir de su casa, encontró a Taro esperandola afuera, esta se sorprendió bastante.

Ayano:- B-buenos días senpai.

Taro:- Buenos días Yan-Chan -dijo el con una sonrisa y sus mejillas teñidas de rojo- Lo siento, tenía la costumbre de ir con Osana a la escuela y como sabía que tu vas sola.. -rasco su nuca- Además han estado ocurriendo muchas cosas.. creo que lo mejor es no estar solos.

La peli negra asintió, después de todo, ella estaba segura que no iba a ocurrirles nada malo, pues ella es la asesina.
Aunque otras muertes también habían ocurrido, y no por mano suya, había otro asesinó, si el/ella llegará a suponer un peligro, Ayano se encargaría de eliminarle lo antes posible.

Llegaron a la escuela, donde un tumulto de gente se acumulaba en la entrada de esta.
Las luces azules y rojas parpadeantes, indicaban la presencia de la policía.
Los jóvenes de cabello negro se acercaron a la entrada, y vieron las joven Imay siendo arrastrada por la policía.

Imay:- ¡SOY INOCENTE! ¡YO NO PODRIA HACER ALGO ASÍ! -La pelirosada se resistía a entrar en la patrulla.

Oficial 1:- Tiene derecho derecho guardar silencio, cualquier cosa que diga podría ser utilizada en su contra -le colocaba las esposas mientras caminaban a la patrulla aún forcejeando con ella- usted ha sido inculpada por homicidio a primer grado, causando la muerte de Kuu-Dere y Shiro Honake.

Metieron a la pelirosa en la patrulla, y luego se perdieron de vista para los alumnos.
Algunos se encontraban tranquilos, al fin la asesina había sido descubierta, otros, preocupados, pues algunos habían estado cerca de Imay.
Aún así, el aura que rodeaba la escuela, luego de que se llevarán a Imay, era algo extraña. Seguía sintiéndose sombrío, por todos los crímenes ocurridos durante los últimos días, pero a la ves, se respiraba cierta tranqulidad ya que todos confiaban en que todo acabaría y podrían ser una escuela normal otra vez.

Ayano y Taro se miraron perplejos, los rumores sobre Imay se repartían al igual de rápido que el periódico de info-chan.
La pelinegra tenía uno de estos ejemplares, que ambos se sentaron en la fuente para leer.

Hasta que dos chicas, con unas curvas destacables y un fuerte maquillaje, aparecieron para tomar a Taro de la camisa y arrastrarlo lejos de Ayano.
Se trataba de las hermanas Basu, de quienes se rumoreaba, que eran una sucubo y una vampiresa.
Las dos chicas, arrastraron a Taro hasta el pie del cerezo, lo acorralaron contra el tronco del árbol, y lo invadieron a preguntar sobre los rumores de Imay y la chica pelinegra del club oculto con la que lo habían visto, Ayano.

Detrás de una pared, unos cabellos negros asomaban de esta, Ayano estaba espiando todo.

Taro, luego de responder unas preguntas, se excusó con que debía ir a ayudar a un chico del club de deportes.

El pelinegro corrió a la azotea, buscando a su próximo objetivo.
Quien se encontraba apoyado en el barandal observando el Cerezo.

Niyima:- ah... Algún día Yan-Chan.

Este chico era bastante solitario, tenía cabello negro, un joven que no resaltaria demasiado entre un grupo de jóvenes.
Excepto por sus ojos, el chico parecía heterocromia, ganando el detalle de un ojo color miel, y un ojo color celeste muy claro.

Sangre X Amor [Editando]Where stories live. Discover now