—Hay problemas allá bajo. —BaekHyun suspira y desvía la mirada con cansancio. —Es Gain y... él, de nuevo.

LuHan no necesita preguntar quién es él, porque sabe de quién habla. Y eso hace que ponga los ojos en blanco con molestia y gruña, lo peor es que ahora también es Gain. Suspira y vuelve a cerrar los ojos, dispuesto a largarse de la Tierra.

+

LuHan patea la puerta con enojo cuando llega a lo que llama hogar. Su ceño está fruncido, y tiene unas fuertes ganas de ir a golpear al chico frente a él cuando lo ve ahí, como si nada mirando hacia la ventana. Sus brazos están cruzados, y su castaño cabello está revuelto. Va con esa ropa habitual negra ajustada, típica de él.

— ¿No te basta con hacer tus estúpidas bromas solo? —reclama, caminando con largas zancadas hasta quedar lo suficientemente cerca de él. — ¡Puedes hacer lo que se te dé la gana con quien quieras, menos con ella, SeHun!

El chico frente a él le devuelve la mirada con pereza, luciendo irritado por los histéricos gritos de LuHan. Se da el tiempo de pasar su mirada por todo el cuerpo de LuHan, deteniéndose un poco más en su entrepierna. Nadie puede negar el atractivo de LuHan, con ese cuerpo tan delgado que incita a cometer más pecados de los que ya tiene. La ligera línea de delineador negro que cubre sus grandes ojos... esa es la debilidad de SeHun.

—Ella no se negó. —con un encogimiento de hombros, regresa su mirada a la ventana.

Aunque no hay paisaje que admirar, no tiene nada más que hacer. Afuera es escalofriante pero no le teme a eso, está acostumbrado. Afuera está la nada, un ligero viento y un silencio abrumador. Más allá, donde entraban los nuevos, es donde está, relativamente, lo peor. Además de tener que atravesar por el único lugar donde están los gritos desesperados de los que se arrepintieron de sus pecados en el peor momento, se encuentra el limbo.

Mete sus manos en los bolsillos de su ajustado pantalón negro y suelta un gruñido al sentir aun la presencia de LuHan a su lado.

— ¿No piensas irte?

El puño de LuHan golpea la pared con fuerza, haciendo que un poco de polvo caiga al piso y a su mano, sus nudillos truenan. La razón por la que no se soportan mutuamente es simple, demasiado arrogantes para que los Demonios más destacados del infierno se llevasen bien.

SeHun alza una ceja, sintiéndose ligeramente divertido por las acciones del mayor.

—No te acerques a Gain de nuevo­­­, a ella no, jodido cabrón.

Una mano que se aferra con fuerza a su camisa, casi hace que sus pies dejen de tocar el piso. La mirada de SeHun es fría, de esas miradas que intimidan a cualquiera. Y que logra intimidar a LuHan, sin embargo, este frunce el ceño y coloca sus manos encima de las del menor, intentando deshacer el agarre.

—No me vengas con tus insultos de niño pequeño cuando ella fue la que vino a mí.

Enterrando las uñas en las manos de SeHun, logra zafarse del agarre y su ceño fruncido se acentúa, sus pupilas se dilatan y el negro empieza a extenderse por su iris, signo de enojo y frustración. SeHun imita el gesto, sintiéndose con ganas de desfigurar el bonito rostro que esta frente a él.

Empuja fuertemente al mayor contra la pared y pasa ambos brazos a cada lado de su cabeza, acerca su rostro al de LuHan y gruñe.

—No estoy de humor para pelear, princesa.

—Entonces deja de hacerlo.

Y a diferencia de lo que esperaba LuHan, abre los ojos con sorpresa al sentir la presión de sus labios contra los de SeHun. Por inercia, cierra los ojos con fuerza y forcejea para alejar a SeHun. Y sólo en su mente se da el tiempo de admirar la fuerza que el menor posee.

Pero eso jamás lo diría en voz alta.

Al poco tiempo, el mismo se sorprende al verse correspondiendo el beso, abriendo lo boca para dejar que la lengua del contrario choque con la suya. Siente como el cuerpo de SeHun se relaja y es cuando el regresa a la realidad, LuHan jodidamente no puede estar besando a SeHun. Muerde con fuerza el labio inferior de menor y aprovecha que este se aleja de él, tocándose el labio con las yemas de sus dedos.

Se acerca a la puerta y antes de salir, gira su cuello para ver a SeHun, quien lo sigue viendo, con la mano aun en la boca.

—Gilipollas.

+

Muchos no conocen la razón del por qué el más allá se divide en varias partes, muchos no saben que Satanás fue el ángel favorito de Dios y que el bien sólo existe gracias al mal. Los humanos son tan ignorantes que SeHun da las gracias a ya no ser uno de ellos.

La Tierra nunca fue un lugar tranquilo, ni lo será.

Cuando él llegó al temido infierno, no sintió miedo, ya no sentía nada de cualquier manera. Lo único que sentía eran los escalofríos recorrer su espalda, así como también sentía la inmensa necesidad de llevarse las manos a los oídos. No era extraño que tuviera esa reacción, sólo era silencio, pero era un silencio abrumador lo que provocaba aquella acción.

Los Demonios no llegaban al infierno como muchos creían, los que estaban ahí sólo eran ángeles caídos, que alguna vez pertenecieron al Paraíso. Y, por consiguiente, también pertenecieron al mundo de los vivos. Cada que llovía con fuerza, cuando el cielo era totalmente gris y los truenos eran demasiado fuertes que llegaban a espantar, era porque un ángel había sido desterrado.

Frunciendo el ceño, se deja caer en el cómodo sofá con el que cuenta su habitación. No es como si todo lo que tuvieran se lo merecieran pero, vamos, era el Infierno, ¿A quién le iba importar lo que tenías cuando todos cargaban con la misma mierda? Sin embargo, el infierno era lujoso. Hay una mínima posibilidad que el infierno sea más lujoso que el Paraíso.

¿Por qué? Por el simple hecho de que todos son soberbios.

(Soberbios*: Ser soberbio es básicamente el deseo de ponerse por encima de los demás.)

Pasando el dedo índice por el terciopelo rojo del sofá, pasa su lengua por su labio inferior repetidas veces. Se sentía excesivamente enojado por haber cedido a sus deseos de querer besar a LuHan. No podía seguir soportando la necesidad y, simplemente, cedió.

El pasar la lengua en donde LuHan lo mordió, sonríe y lleva sus dedos a su barbilla. Él ya ha recibido el castigo por haber causado un pequeño accidente en la Tierra. Gain, la hermana mayor de LuHan, sólo había acudido a él al verse aburrida. SeHun disfrutaba de su soledad, pero al ver de quién se trataba, no la rechazo. ¿Qué mejor manera de hacer enojar a LuHan si no es con su hermana?

Dejando que su cabeza se recargue con comodidad en la cabecera del sofá, sonríe y cierra los ojos, jodido el día en que conoció a LuHan.




***


Bueno.... sé que debo aclarar varias dudas & explicar una vez más porque mi cuenta anterior de wattpad fue eliminada. Como sabrán, hubo varios problemillas con las fans de Muñeco & ellas se encargaron de borrar todas las adaptaciones existentes en wattpad, uno de ellas, era la mía. Que no sólo borraron la historia, si no, todo mi perfil... así que, en realidad me cree otra cuenta aquí por dos razones, algunas de ustedes me lo pidieron & porque hay muchos fanfics por leer aquí xD así que ¡no se desanimen! Baby Poketh esta de regreso después de dos meses (¿cuanto tiempo fue?). 

Hmm, otra cosita, es que como me han preguntado, yo he dicho & me han pedido, volveré a subir todos mis fics aquí, excepto por Muñeco, encontraran tantos mis fics como one shots aquí ^^ ¡Disfruten de DL! He cambiado unas cosas & he arreglado las faltas de ortografías, pero si ven algún error por ahí, díganme, por favor<3.

Dark Lustfulness {HunHan}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora