Capítulo 16

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POVS Mónica:

¨Abro mis ojos lentamente y trato de adaptarme a la luz, veo la habitación y observo todo a mí alrededor, es tan confuso no logro recordar donde estoy. Una enfermera entra y al verme suspira aliviada, sale y luego vuelve a entrar acompañada de un doctor.

—Te quitaremos el tubo— Me dice el doctor y yo solo parpadeo.

Horas después.

Abrazo a Marcus llorando desconsoladamente, el acaricia mi cabello y besa mi cara.

—¡Mi bebe!— Chillo.

—Basta por favor, tienes que calmarte.

—Acaricia mi vientre, justo al lado de la herida del disparo.

Es increíble que mi motivo para existir ya no este.

—No puedo más— Le digo llorando.

— Claro que puedes, yo te voy a levantar cada vez que te caigas— Me dice y sigo llorando.

—¡Mi bebe!— Grito haciéndome daño en la garganta.¨

Me siento de golpe en la cama y respiro agitada, Marcus me rodea con sus brazos y siento su cálida piel sobre mis caderas.

—¿Estas bien?— Me pregunta y yo asiento.

—Tuve una pesadilla— Le digo triste.

—¿El día que despertaste?— Me pregunta y yo asiento.

—Eso fue hace 3 meses Mónica, debes seguir adelante sé que es duro...

—¡Basta!— lo detengo en seco y el me observa serio— No quiero más lastima de tu parte.

—¿Lastima?— Me pregunta molesto.

—Sabes a qué me refiero Marcus estoy harta de todo eso— El asiente y se vuelve acostar.

—Ven— Me dice y le obedezco, me acuesto sobre su trabajado abdomen y el acaricia mi cabello.

—Te quiero— Me dice y yo beso su abdomen.

—Yo también te quiero.

—Si tanto quieres un bebe, podemos hacerlo o por lo menos comenzar a encargarlo.

Comienzo a reír y el me observa levantando su ceja.

—¿Quieres hacerme el amor? – le pregunto y él sonríe.

—Siempre pero tú no quieres— me dice asiendo un puchero.

—Hoy podría ser tu día de suerte— le digo y bufa.

—Si claro—dice serio.

—Voy al baño— me pongo de pie y camino hasta la ducha.

Tomo una ducha rápida y me coloco lencería sexi. Aplico algo de perfume y peino mi cabello, estoy cansada de lamentarme necesito ser feliz.

Necesito de Marcus y estoy dispuesta a hacer todo por él.

Camino descalza hasta la habitación y me pongo de pie frente a él con las manos en las caderas, esta boca abajo y cuando me siente se gira al verme sonríe y me observa con los ojos sorprendida.

—Te ves hermosa— dice sonrió y camino lentamente hasta la cama, me subo con cuidado sobre él y le doy un beso lento en los labios, su delicioso aliento sabor a menta choca con el mío.

Acaricia mi espalda con su mano y suelto un gemido.

—¿Estas segura?— me pregunta desconfiado y yo asiento.

La Elegida De Un MafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora