El hombre observó a Eliott con un toque de curiosidad e intriga.

—¿No me reconoce? – preguntó con una sonrisa que a Eliott le pareció coqueta.

—Lo siento ¿debería? Soy un despistado...— se disculpó con una sonrisa algo nerviosa. Dios, ese hombre movía todos los engranes correctos dentro de él, su sola sonrisa le daban ganas de lamerle los labios...

"¡Basta Eliott!¡Basta!¡Llevas solo mucho tiempo!"

Se regañó para sus adentros. El sujeto pareció estar por contestarle cuando alguien se acercó a ellos recibiendo al hombre a su lado y diciendo que lo llevaría con el director.

—Hasta luego, espero que nos volvamos a ver pronto— se despidió.

Eliott observó la espalda alejarse y se mordió el labio inferior... de verdad quería coquetear con ese sujeto... Desgraciadamente para Eliott, conocer el nombre del sujeto alejaría cualquier pensamiento de deseo de su mente, o al menos le haría desear alejarlos.

Tras despedirse del extraño Eliott retomó su camino como si nada hubiese pasado, creyó que no volvería a ver al sujeto, al menos no ese día, pero para su sorpresa paso todo el día junto al director, hablando con él de cosas que solo ellos dos sabían.

Era ya la hora de la comida y Eliott aun se preguntaba quién era y por que el director parecía tan interesado en atenderlo. Estaba parado frente a la mesa de comida pero no le estaba prestando atención en realidad cuando su co-protagonista se acerco a él.

—Esta podría ser nuestra salvación—Rose, la protagonista femenina de la película se paró junto a Eliott visiblemente emocionada, tomó una botella de agua para disimular que no había ido ahí solo para cotillear un poco, aunque su postura inclinada hacia Eliott la delataba.

—¿De qué hablas?— Sonrió  haciendo como que se concentraba en su elección de comida.

—¿Viste al sujeto que ha estado junto al director desde que rodaban la escena bajo la lluvia?— preguntó y volvió la mirada discretamente hacia el sujeto del que hablaba, razón por la que no fue consciente del leve sonrojo que cubrió las mejillas de Eliott.

—¿Había alguien junto al director? ¿Su asistente?— se hizo el tonto ¡claro que lo había visto! El sujeto de la mañana había estado viéndolo intensamente toda la escena y él había cometido la imprudencia de mirarlo mientras decía una línea improvisada. Era una suerte que al director le hubiese gustado y nadie alcanzara a notar a dónde se desviaba su mirada.

—¡Ningún asistente! ¡Ese era Czar Kyros! ¡El magnate del Cine!— le informó y Eliott casi deja caer su charola.

—¿Entonces ese es Czar Kyros?— preguntó afianzando su charola de comida y fingiendo magistralmente que no acababa de perder el piso.

Si se hablaba de salvación solo podía hablarse de Czar Kyros, todos en el staff y reparto habían estado esperando su visita a lo largo de la semana, si al sujeto le gustaba el proyecto tendrían la vida solucionada, ese hombre tenía fama de tener el toque de Midas, todo aquello que tocaba se volvía oro y cada película que había producido y supervisado había sido un rotundo éxito, al parecer Ángel, autor del libro que estaban adaptando la película lo había conocido en una gala y había terminado interesándose por su obra y la película.

El éxito de Kyros no se limitaba a su genialidad, también se debía a sus infinitos contactos y recursos, así como a la enorme cantidad de cines bajo su poder en todo el mundo. Apenas el año pasado se había establecido con éxito en Asia y era LA persona que cualquiera en la industria quería de su lado.

—El mismo en carne y hueso – Alan, el coprotagonista masculino de la película, habló y se acercó desde atrás, apoyó un brazo en el hombro de Eliott recargándose en él. Alan era más alto y a menudo hacía eso desde que él y Eliott se habían tomado confianza— Pero tú, Rose, no sé si deberías estar tan emocionada— una sonrisa maliciosa se dibujó en sus labios—. Al parecer cada que se enamora de un proyecto también lo hace de alguna persona involucrada, cuando hace de mecenas de un pintor quizá se acueste con el pintor o con el modelo y cuando produce lo hará con la actriz principal o con el director—explicó.

El toque de CzarWhere stories live. Discover now