Itachi estaba entrando a la habitación cuando Deidara apareció a su lado con cara molesta. Abrió la puerta y lo dejo pasar primero.

-estupido Hidan!.- dijo el rubio una vez dentro y lanzandose sobre la cama.- un dia de estos lo jare estallar y ni kakuzu podra volver a unir su malnacido cuerpo.

Itachi no quiso preguntar ya que se imaginaba que era solo otra de esas discusiones que al albino tanto le gustaba iniciar con el rubio. Fue y se estiró al otro lado de la cama para esperar la llegada del té y los dangitos.

-oye tu!.- le dijo Deidara levantando su rostro. - porque nosotros debemos dormir juntos y allá kakuzu con Hidan tienen cada uno su cama?.- le reclamó el rubio molesto al recordar ese detalle.

- ya te dije no había mas, y si me quede yo aqui contigo es porque fue la habitación que toco, tome llaves al azar.- le dijo Itachi, aunque era mentira ya que el sabia cual pieza era la de una cama.

-vaya, asi que el perfecto Itachi Uchiha tuvo su minuto de mala suerte?.- le dijo el rubio molestando.

-asi que me encuentras perfecto? .- le contestó el azabache con otra pregunta, la cual hizo enrojecer al rubio de manera bastante notoria.

-no quise decir eso. ..-trató de explicar el rubio pero en ese instante golpearon la puerta de la habitación.  Era el te y los dangos.

-Buenas noches jóvenes. -les dijo una señora de avanzada edad que traía una bandeja con las 2 tazas de té y dos porciones de dangos. Dejo todo en la pequeña mesilla que se encontraba en medio de la habitación y se retiro con una reverencia.

-a comer.- le dijo Deidara aprovechando la interrupción de la señora y sentandose en una de las esquinas de la mesita sobre el piso.

Itachi rio de medio lado, por esta vez se la dejaría pasar. Después de todo estar de compañero con el rubio podía resultar bastante interesante y divertido.

Despues de haber comido, el rubio se acomodo nuevamente en SU lado de la cama. Itachi se quito los zapatos y la polera quedando solo con sus pantalones, Deidara veia de reojo el bien formado cuerpo del azabache, Itachi apago la luz de la habitación y fue a acostarse quedando bien junto al rubio.

Habian pasado unas dos horas desde que se acostaron e Itachi ya estaba dormido. Deidara lo sabia, lo sabia porque hace un buen rato que lo tenia abrazado posesivamente por la espalda y pegado a él. El rubio sentía que se le saldria el corazón por la boca. Quiso soltarse pero el azabache lo volvió a tomar y esta vez lo apego mas aún.

-maldita sea.- susurro el ojiazul molesto. Quiso acomodarse pero nuevamente Itachi lo atrapo entre sus brazos. Su paciencia se estaba agotando, y finalmente se resigno vencido por el sueño.

A la mañana siguiente el primero en despertar fue Itachi. Abrió sus ojos encontrandose con la desordenada cabellera rubia en frente. Inmediatamente se dio cuenta de la posición en la que se encontraba, con Deidara acurrucado a su lado y sus propios brazos aprisionandolo. Se sorprendió y quiso alejarse, pero se sentía comodo teniendo ese cuerpo calientito pegado al suyo. De repente el rubio se comenzó a remover entre sus brazos, el azabache lo solto un poco y vio como Deidara se volteaba quedando con su rostro mirando hacia el techo.
Aprovechó la nueva posición del rubio para levantarse e ir al baño a ducharse, agradeció el haber despertado antes que el ojiazul, o de lo contrario posiblemente este lo hubiera enviado a volar furioso.  Claro que Deidara ya sabia de antemano como habían dormido.

Luego de unos minutos Deidara sintió que le faltaba el azabache y abrió sus ojos sentándose casi de inmediato en la cama. Miro por la habitación pero no encontró a Itachi. Se levanto para ir al baño pero antes de lograr abrir Itachi abrió desde adentro encontrandose de frente con el par de ojos azules que lo miraban curioso.

-Uchiha!.- le dijo tomandolo del cuello de la polera molesto.-anoche pase la peor noche de mi vida por tu jodida culpa!.

-De que hablas?.- le dijo Itachi sospenchando sobre lo que podría estar hablando.

-tuve que dormir entre tus jodidos brazos porque se te ocurrio abrazarme y no me soltabas.- le reclamó.

-pues en la mañana te veias bastante cómodo. - le dijo Itachi quitando las manos del rubio de el y terminando de salir del baño.

-comodo?...¡¿crees que para mi fue comodo?!.- le dijo el rubio persiguiendolo por la pieza.- ¡tuve que soportar tu cuerpo casi aplastandome porque no me soltabas!.

Itachi lo cogio de las muñecas y se lo llevó casi arrastrando hasta el baño y lo lanzo dentro cerrando la puerta.

-oye!!! Sacame de aqui!!!.- le reclamo Deidara desde el otro lado forcejeando el pomo.

-arreglate, debemos salir.- le dijo alejandose de la puerta.

-me arreglare pero porque yo quiero no porque tu lo dices!.- le grito el rubio quitandose la ropa para entrar en la ducha.

En ese momento golpearon y Itachi fue para ver quien era. Hidan entro sin siquiera esperar que Itachi le dijese.

-Deidara-chan ya despertó de mal humor.- dijo burlesco Hidan buscando al rubio con su mirada. - lo escuche gritando hace un rato.

-¿que quieres Hidan?.- le dijo de manera molesta el azabache.

-kakuzu me dijo que se apuraran.- dijo el peliblanco ignorando el tono del azabache.- ¿y la rubia?.

-no soy rubia!, hum!.- se escucho a Deidara gritsr desde el baño.

-asi que aqui estabas.- dijo acercandose hacia el baño y abriendo la puerta hasta atrás.-Deidara-chan dijo kakuzu que....

No pudo terminar ya que frente a él tenia la imagen del rubio completamente desnudo y mojado de pie en la ducha.

-Hidan...te voy a matar!!.- le dijo el rubio causando que el ojivioleta cerrara la puerta rapidamente y se quedara con su espalda apoyada sobre la misma un momento procesando lo que habia visto.

Itachi que habia visto todo el espectáculo decidió salir antes que el rubio estuviese listo o de lo contrario podria terminar pulverizado por alguna explosión.

Ya estaban los cuatro afuera dispuestos a irse.

-deja de estar enojado.- le decía Hidan al rubio que aun no le dirigía la palabra.- fue un accidente Deidara-chan.

El rubio saco una ave ya moldeada y la hizo crecer para que todos subieran. Hidan también iba a subir pero antes de poder el rubio hizo despegar al ave dejándolo abajo.

-oh enserio!.- pregunto molesto y con una sinica sonrisa Hidan mientras veia el ave alejarse.

....
Pobre Hidan, no se lo merecia :( xD espero les guste! Nos leemos luego!


Acercandome Al EnemigoDär berättelser lever. Upptäck nu