CAPÍTULO 2 | Empezando una nueva vida.

134 11 3
                                    

2:14PM
San Diego, California
Rachel.

Terminé mis labores en la escuela y me despedí de Mike. Nuevamente le agradecí por haber pasado su tiempo conmigo y enseñándome cosas que no sabía sobre el colegio. Poco a poco iba tomando la confianza necesaria justo como en todas las amistades; mañana lo vería nuevamente y tendría nuevas oportunidades de charlar con él.

Por ahora regresaba de nuevo a casa; el bus escolar me dejaba a dos cuadras de mi casa en el vecindario. Bajé de el y caminé con un par de mis libros en mano, por suerte, como lo comentó Mike hace rato, hoy era el primer día y no habían encargado nada de apuntes y tareas, excepto por ordenar mis libretas y cada sección que ocuparía de ellas para las materias. Eso no era problema, lo había hecho desde unos días antes de entrar por lo mismo de no tener que andar a las carreras.

Llegué a mi hogar y saqué mis llaves para entrar, estaría completamente sola, papá está trabajando y llegaría a casa para pasadas de las siete; tengo que irme acostumbrando ya que así será todos los días. Me gusta estar sola por un lado, pero por el otro tengo pendiente de mi padre, tengo algo de miedo de que poco a poco vaya perdiendo su atención por causa del trabajo. No estaba dispuesta a perder a mi papá también.

Bufé dejando mis llaves sobre la mesa principal, subí las escaleras y como de costumbre me dirigí a mi habitación. Dejé mi mochila sobre mi cama, pero saqué nuevamente mi libro de Harry Potter. Me puse algo más cómodo y me aventé a la cama para seguir leyendo; no tenía mucho que hacer hoy, solamente me puse a pensar en cómo había transcurrido mi día, nada malo para ser el primero. Estaba pensando en Mike y en las conversaciones que tuvimos acerca del libro; hablando de él, cuando abrí mi libro noté que calló una pequeña notita en un pedazo de hoja de cuaderno. Era un número apuntado y sobre él decía: "Llámame si necesitas. Mike."

Qué raro, justamente primer día y ya obtuve su número. Lo pensé por unos minutos, ¿Sería buena idea marcarle? Dios, acabo de verlo en la escuela y ¿de nuevo voy a hablarle? No quería fastidiarlo tan rápido. Pero también temía pasar el resto de mis días sola y aburrida mientras que papá no estaba.

Mis antiguos amigos que tenía en esta ciudad al parecer se los había tragado la tierra; desde que me fui a San Francisco no volví a saber de ellos y en conclusión me encontraba requerida de amistad. Los verdaderos amigos que tenía se quedaron en la otra ciudad; asi que esto lo veo como un comenzar de nuevo.

Sin más rodeos, decidí tomar el teléfono de casa y llamar a Mike; no sabía que decirle aún pero lo hice de todas formas. El papel mencionaba "Llámame si necesitas", asi que supongo que requiero de él ahorita.

Marqué el número tal cuál como estaba en la nota y 5 segundos después contestaron:

"—¿Hola?—"

—Hola, disculpa, ¿Con Mike?—
Hablé nerviosa, topándome con una voz muy diferente a la del mencionado. ¿Será que me había equivocado?

"—¿Quién lo busca?—"

—Ehm, ¿Rachel? ¿Acaso tu no eres él?—
Pregunté.

"—No, pero ahora te lo paso.—"
La voz se escuchó irritada, vaya, qué humor. Pensé.

Esperé como cinco segundos más a que el buscado pareciera por la línea.

"—¿Rachel? ¡No pensé que llamarías!—"
Finalmente se escuchó su voz y yo sonreí victoriante.

—Eh si, ¡Hola! Es que.. Me sorprendió encontrar tu nota y.. Así. Ehm, espero que no te moleste que haya marcado..— Murmuré a través de la bocina del teléfono, jugando con la notita en mis manos.

Our Life Have Just Begun // Vic Fuentes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora