-¡No te vayas a lastimar Eduardo! - grito Liam.
Sonreí y me concentré. Estuvimos unos segundos en silencio hasta que Eduardo habló.
-Puedes atacarme cuando gustes. - sonrió. Se notaba seguro de que no podría siquiera darle un golpe.
Camine lentamente haciendo un circulo examinando sus movimientos, estaba alerta, si lo atacaba por la espalda me haría alguna llave o algo así, sus pies estaban firmes en la colchoneta y sus brazos estaban algo elevados listos para bloquear cualquier golpe directo a su pecho o cara. Me detuve cuando termine de dar la vuelta y me puse en posición.
-Como gustes - Me moví rápido hacia la derecha y Eduardo se preparó para recibir mi patada, pero al ultimo momento cambie bajando mi pierna apoyándome e impulsándome para darle un puñetazo en su estómago haciéndolo tambalearse. - No baje la guardia entrenador.
Eduardo mi miró atónito, tantos años de peleas me había servido para mejorar mucho mi combate cuerpo a cuerpo y saber exactamente que puntos estaban débiles para atacar. Sin embargo seguía siendo una principiante y no le podía ganar ni a Liam ni a Louis, ellos no podían ver de forma inmediata que partes del cuerpo estaban sin "protección" o descuidados, pero gracias a su fuerza y que eran más altos que la mayoría, como Eduardo y Felipe, ese no era un problema. Eduardo sonrió de lado e intento darme un golpe en la pierna, salte hacia un lado esquivándolo y dándole una patada en la espalda haciéndolo caer, escuche una risotada de Liam y la mirada atónita al ver a Eduardo de rodillas. Sabía que no estaba usando toda su fuerza conmigo ya que solo me estaba evaluando.
-Bien, empecemos a ponernos serios, intentare no pegarte tan fuerte. - se levantó y sonrió algo arrogante, comenzó a atacarme más rápido que antes, conseguí esquivar algunos, y otros lo bloqueé al tiempo que intentaba darle algunos golpes cuando descuidaba algunas zonas. Al cabo de una hora había caído a la colchoneta el doble de veces que había logrado derribar a Eduardo, pero él sin duda me había lanzado más golpes. Mi resistencia y equilibrio me ayudaron a detener o esquivar los golpes y así no caer.
-Bien, suficiente calentamiento - dijo Eduardo, yo abrí mucho mis ojos ¿Calentamiento?. Eduardo comenzó a lanzarme golpes y patadas más rápido y con más fuerza. Me costaba mantener el equilibrio, pero podía bloquear los golpes por el momento, noté como se empezaban a acercar los otros SA con toallas en los cuellos y con botellas de agua en las manos.
Recordé las palabras de Liam acerca de mi altura y la ventaja de atacar desde abajo ya que a mi oponente le costaría trabajo evadir los golpes y no podría taparlos todos. Tapé con mi antebrazos una patada de Eduardo y di un pequeño salto hacia atrás, flexione mis rodillas y comencé a atacar desde abajo, patadas, puños, empujones, así logre derribar a Eduardo por lo menos tres veces seguidas, pero el después de eso no descuido la parte de sus piernas.
Al cabo de media hora Liam me estaba ayudando a levantarme. Eduardo me había dado una paliza, yo solo conseguí derribarlo dos veces más, pero el había evitado usar toda su fuerza ademas de no pegarme en la cara.
-Si te hace sentirte mejor, los novatos del año pasado no duraron ni diez minutos - me dijo Eduardo antes de tomar uno sorbos de su botella de agua. - impresionante.
-¡No sé como ella duró más que yo! - Habló Felipe algo molesto.
-No usó toda su fuerza conmigo - dije segura ganándome una mirada sorprendida de Eduardo y Liam.
-Así que lo supiste - Sonrió de nuevo Liam
-Puedo darme cuenta cuando retiene sus puños o patadas - dije agarrando una botella de agua.
-No use toda mi fuerza, pero me falto poco - me miró un momento - a pesar de haber usado mas de la mitad de mi fuerza aun puedes pararte, eso indica una buenas habilidades en combate.
YOU ARE READING
Ally
Teen FictionCuando el destino esta en tu contra. Registrado en Safe Creative: Código de registro: 1501173022244 No copiar ni adaptar sin pedirme permiso.
Capitulo 15: El golpe del pasado.
Start from the beginning