Acción

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AN: Lectores míos , feliz añoo !! Espero que hayaís pasado todos unas vacaciones estupendas , y os deseo lo mejor para este 2016. Estas navidades no he teneido ningún momento para coger el ordenador y subir un capítulo nuevo , siento que hayaís tenido que esperar tanto , por eso , el capítulo de hoy ( uno de mis favoritos) va a ser EXTRALARGO!! jajajjaja . Como siempre , espero que lo disfruteís. 

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- No te voy a mentir. Están cerca. En el pasillo había solo dos. Pero tienen que ser más. Muchos más. No sabemos cómo han sabido que estábamos en el hotel. Pero ahora no nos podemos parar a pensar en eso. La prioridad ahora es ponerte a salvo. Y te prometo que voy hacer todo lo que esté en mis manos para que esto acabe cuanto antes.

El shock tras escuchar sus palabras era lo único que mantenía escondida mis lágrimas del miedo. Había estado todo este tiempo protegida de la realidad, escondida de la verdad. Ahora Jared había creído que debía estar al tanto de lo que estaba ocurriendo. Y quería más que nunca, volver al escondite de la ignorancia en el que mi única responsabilidad era dejar que cuidasen de mí, que me protegiesen. Sin embargo, sabía que había llegado la hora de salir del cascarón. Era tiempo de actuar.

- Te digo todo esto, porque a pesar de que vaya impedir como sea, cualquier enfrentamiento con ellos contigo delante, no puedo descartar esa opción.

Me estaba preparando mentalmente para lo que iba a ocurrir. Mis manos no paraban de temblar y el nudo que se había formado en mi estómago, me amenazaba con devolver otra vez. No estaba preparada para todo lo que iba a suceder.

- El plan es sencillo. Hemos quedado con Kevin y Jess en otro hotel. Kevin y tú os vais a quedar allí. Jess y yo vamos en búsqueda de los demás. Kate tienes que hacer exactamente lo que Kevin te diga. Si dudas si quiera un segundo, ya estás triplicando el peligro. No te preocupes de nadie salvo de ti misma. Si tienes que correr, corre sabiendo que la velocidad a la que corras puede determinar si vas a salir con vida o no. Me gustaría no tener que estar diciéndote esto, pero están aquí. Te tengo que preparar para todo lo que pueda pasar.

En ese punto ya habían caído una docena de lágrimas por mi mejilla. No solo por el miedo de perder mi vida. Por el miedo de perder cualquiera de las suyas. Especialmente la de Jared. Irónico que aquel fuese el único momento en el que Jared me hubiese tratado con tanta madurez. Como si fuésemos iguales. Como si lo pudiésemos ser. Y es que tal vez, este fuese el último momento que tuviésemos juntos. Y aun así no podía decirle lo que sentía hacía él.

- Kate mírame- no había terminado. Tenía que seguir escuchando aquella tortura. – Kate.

"Kate". Era la única palabra que había salido de su boca que me daba esperanza y fuerza.

Agarró mi barbilla con su pulgar y su índice y me hizo mirarlo directamente a sus ojos. Quería que viese dentro de él. Y lo hice. Determinación. Era lo que vi en él. Lo que quería transmitirme. Ni seguridad, ni venganza ni miedo. Determinación. Era estúpido pensar que no corríamos peligro, o que salir de esta situación iba a ser fácil. Eran muchos más en número. Estaban armados hasta arriba. Tenían una ventaja: su humanidad había ya desaparecido hace mucho. No dudarían en matar, herir o golpear a cualquier inocente que se entrometiese. Su determinación a diferencia de la de Jared, no tenía límites. Estaban dispuestos a cualquier cosa.

Un nuevo par de lágrimas, mojó mi rostro. Jared estaba en peligro. Solo tuvo que mirarme, para saber cuál era ahora mi mayor miedo. Una sonrisa triste se dibujó en su rostro. Me desabrochó el cinturón. En un abrir y cerrar de ojos, me había trasplantado a sus piernas. Cogiéndome por la cintura me sentó encima suya. Ni si quiera reaccioné sorprendida. Tampoco avergonzada de estar rodeándolo con mis piernas. Lo único que podía pensar era que iba a perderlo sin si quiera haberlo tenido. Me eché a su hombro a llorar. Si le quedaba alguna duda de mis sentimientos hacía él, aquel acto acabó con todas. Le quería. Ahí fue cuando lo supe. No era ningún estúpido romance adolescente. No era una admiración por una cara preciosa, un cuerpo de revista y una personalidad de película. Era amor.

SecuestradaWhere stories live. Discover now