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Friend.

Estaba seguro de que se que alguien había tocado la puerta pero estaba tan cómodo en su cama, entre sus sábanas, que no quiso levantarse e ir a ver quién interrumpía sus sueños con ella.

Si, hasta soñaba con Wendy. Traerla en la cabeza todo el día no le bastaba a su pobre mente y hasta en los sueños se le aparecía.

Los golpes en la puerta fueron más insistentes, cerró los ojos y gritó con rabia, quitó de un tirón las cálidas sábanas de su cuerpo y se puso de pie, aún descalzo y medio dormido, dejó su habitación y se dirigió a la puerta principal, abrió de golpe haciendo retroceder al interruptor de sueños.

- ¡Hoseok! ¡Al fin te levantas, hombre! Llevo como diez minutos tocando la puerta y nada, creí que habías muerto.

- Estaba durmiendo.

- Menos mal, ¿vamos a desayunar?

- No me apetece.

- ¡Vaaaamos! ¿Por los viejos tiempos? Ya casi ni salimos juntos, un desayuno no nos hará nada.

- TaeHyung -Gruñó, desesperado. Pasó una mano por su cabellera despeinada y miró a su amigo que esperaba una respuesta, ansioso. - Claro que... NO -Cerró la puerta en sus narices viendo por unos cortos, casi ni segundos, como su amigo quitaba la radiante sonrisa que ya había comenzado a crecer. Y tal como lo temía.

Este muchacho nunca se cansa.

La puerta comenzó a zamarrearse, por los golpes y patadas que tiraba su disque amigo, los amigos dejaban que sus amigos durmieran, no los despertaban cuando tenía un sueño lindo con su esposa suicida.

Wendy...

Negó con la cabeza, no quería atormentarse a tan temprana hora.

- ¡Hoseoooonk! ¡Abre la puerta de una puta...! - Quedó callado al ver a su amigo bien arreglado abriendo la puerta, sonrió. - ¡Así me gusta!

- Ya, vayamos rápido.

- ¿Qué quieres comer? Estaba pensando ir a McDonald's.

Encogió los hombros, desinteresado, sólo había salido por... bueno, en realidad ni el mismo lo sabía, pero que más da, ya estaba aquí. Llegaron a dicho "restaurante" de comida chatarra, se sentaron frente a frente en una mesa blanca.

- ¿Y qué? ¿No vas a ir a pedir?

- ¿Eh?

- ¡Tú me has invitado, no yo! Tonto... -Gritó, casi perdiendo la cabeza.

- Oh, si. Lo siento, Hyung -Sonrió con ternura, se puso de pie. - ¿Con tomate o sin?

- Creo que ya sabes la respuesta.

- ¡Sin! - Dijo eso y se encaminó en la barra donde se tomaba los pedidos.

Vaya amigo, tenía. Pedazo de idiota.

Pero era el único que tenía, o al menos, el único al que podía llamar amigo.

good boy  :: hoseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora