Capitulo 10: Sufrimiento, vuelta a casa y corazón roto

359 20 9
                                    

¿Sabéis que pasa cuando te encierran en la sala de castigo? Que te atan desnuda, de manos y pies. Estando despierta cogen un cuchillo, cortan, desde el inicio de tu muslo hasta la planta del pie, lo cosen, hacen el mismo proceso en el otro lado de tu pierna, se repite todo en la otra pierna. Chillo hasta quedarme sin voz, hasta sentir arder mi garganta, nadie me escucha. Me tiran al suelo, me tratan como basura. Con un hierro ardiendo me marcan en la cintura con la M de Maader, diciendo que soy de su propiedad. Cuando me quema la piel siento que el mundo se me va, aun no he muerto por pura suerte. No puedo andar, me arrastro intentando huir de la tortura, me cogen del cabello y me arrastran tirándome de este. Lo cortan hasta mis hombros, mis lagrimas no son nada para ellos.


Es cuando casi estoy muerta que empiezo a recordar cosas. Yo amaba a Vittel, pero cuando era pequeña sentía algo por Sinbad. Vittel me estaba esperando después de un año sin verme, yo volvía a casa junto con mi familiar Haku. Yo soy una conquistadora de mazmorras, yo tengo un hermano llamado Ja'far, Rurumu es como una madre para mi. Sinbad me ha utilizado, me ha engañado...el sabia quien era yo, sabia a quien amaba y aun así se atrevió a besarme, a verme danzar y por su culpa yo fui encerrada...Maader también va a pagar por esto. Yo me quería ver hermosa para Vittel, quería regresar a casa y demostrarle que estaba bien que yo no había sufrido.


Me levanto a duras penas,me tiemblan las piernas por el dolor. Agarro una daga y cuando el guardia se da la vuelta le hago un corte en el cuello, cuando aprendía ser una sacerdotisa me enseñaron estas cosas. Salgo de la sala de castigos, todo esta vació y en silencio. Me recuesto en la pared y camino hasta la habitación de Maader, le robo uno de sus vestidos y cojo mi arco y flechas, los cuales había guardado allí. Guardo la daga con una funda entre mis pechos, miro el arco fue el que me regalo Vittel antes de irme.


Camino saliendo de allí,es cuando escucho gritos y veo fuego me entero por la gente que es una rebelión de esclavos. Camino casi arrastras por las calles y allí esta ella, allí esta Maader que se para frente a mi.


-¡Vitani!-exclama y veo como se le iluminan los ojos.-Mi niña, mi amada hija...vaya si hasta te has puesto uno de mis vestidos que bien te queda.-Me dice con una gran sonrisa mientras me pone las manos en los hombros, pero cuando lo va a hacer se las retiro de un manotazo.


-Tu no eres mi madre...tu...¡ERES LA PERSONA A LA QUE MAS ODIO EN ESTA VIDA!-Chillo sacando la daga y clavandosela en las costillas, cuando saco la daga cae al suelo, la cojo de los pelos y no dudo en cortárselos.-Esto no es nada con lo que me hicieron, así que agradece que te deje vivir...


Tiro la daga al suelo y paso por su lado tirando su cabello sobre ella. Camino hasta el coliseo, allí están todos reunidos. Todos me miran, no me reconocen, camino tambaleándome parezco una borracha. Allí veo a Sinbad es el mas alto de todos, esta con mi hermano. Cuando me acerco lo suficiente le suelto una bofetada, la cual no es muy fuerte por mi falta de alimento y mi dolor. Caigo al suelo de rodillas, mis piernas ya no aguantan mas y siento como me miran sorprendidos.


-Escúchame bien porque no pienso repetirlo...-digo alzando la mirada, mis ojos están llenos de lagrimas, hay desesperación en ellos. Sinbad tiene la cara llena de golpes y la mejilla algo roja por la bofetada, pero no mucho.-Acabo de matar al hombre, que lleva maltratandome desde hace días en la sala de castigo de Maader, me he cruzado con ella y le he clavado una daga...¡Me has engañado todo este maldito tiempo! ¡Te aprovechaste de que yo había perdido la memoria! ¡Por tu culpa acabe en la sala de castigo!-chille mientras me limpiaba las lagrimas, Ja'far no entendía nada pero al verme llorar así decidió darme un abrazo el cual agradecí de todo corazón.

La aventura de Sinbad y VitaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora