Capítulo 28

3.4K 311 26
                                    


NIKKI (P.D.V)

-¿Cómo? –Preguntó Kevin en un jadeo.

Solté una risita.

-¿No querías saber lo que le pasó a tu hermana? Esa es la verdad, Kevin. A tu hermana la mató Sebastián porque descubrió que éramos unos asesinos, y además, porque descubrió que yo había matado al padre de los trillizos.

- ¡Hija de puta! –Gritó acercándose a mí a pasos agigantados.

Rápidamente me puse en pie y me preparé para darle la paliza que se merecía, pero al agente Philip se interpuso entre nosotros.

-¡Para! –Gritó empujándolo.

- ¡¿Qué mierda haces?! –Gritó Kevin enfurecido- ¿No ves que acaba de decir que mató al padre de los trillizos y que su hermano mató a mi hermana? ¿Por qué cojones no estás arrestándola?

- No es por ser quisquillosa, pero Sebastián no es mi hermano –Reí- él es solo un puto gilipollas al que voy a matar cuando lo encuentre.

Ambos me miraron con el ceño fruncido.

-¿Es una expresión o lo dices de forma literal?

Solté una carcajada ante la pregunta del agente.

-Vaya, parece que se va tomando en serio lo que le digo, por fin –Reí- por supuesto que lo que estoy diciendo es literal. Sebastián nos traicionó a todos, y va a pagar por lo que nos hizo.

- ¿Por qué no nos cuentas de una vez todo desde un principio?

- ¿E ir a la cárcel? No gracias, he hecho demasiadas cosas en esta vida. He estado bajo el mando de alguien desde que era muy pequeña, así que no te pienses que ahora que tengo la oportunidad de acabar con todo eso y empezar una nueva vida, voy a dejarme meter en la cárcel.

- ¡Tú y tus hermanos deben pagar por las cosas que han hecho! –Gritó Kevin- ¡han matado a personas inocentes!

Hice una mueca.

-Bueno, eso depende de cómo lo veas. Si me contrataron para matar a esas personas, es porque cosas buenas no estaban haciendo.

- O, por el contrario, estaban haciendo cosas buenas y eso a la persona que te manda, no le interesaba.

Achiqué los ojos hacia el agente. Ahí había dado en el clavo. Es posible que esa fuese una de las razones por las cuáles nos mandaba a matar gente que no conocíamos.

-Puede que tengas razón, pero créeme, el padre de los trillizos no era tan bueno como la gente puede llegar a pensar. Cuando estaba en la misión, no esperaba encontrármelo a él y menos en un lugar como aquel.

Kevin bufó.

-Puedes decir lo que quieras, pero la verdad es que has matado a un hombre y has dejado huérfanos a tres chicos. Además, por culpa de ustedes mi hermana está muerta.

Estaba tan serio que producía escalofríos.

-Sinceramente tengo que decir que el caso de tu hermana era algo que teníamos que hacer, no podíamos permitir que fuese a la policía y nos denunciase. Nos considerarían terroristas, espías o algo por el estilo. No íbamos a arriesgarnos a quedar presos en las cárceles de Estados Unidos, que claramente hubiéramos acabado en Guantánamo y ten por seguro que la persona que orquestó todo para que estuviésemos en Estados Unidos, nos hubiera matado.

- ¡Eres una zorra sin sentimientos! –Gritó.

- Es posible, pero mis razones tengo –Dije cruzándome de brazos.

Los Romanov #2: TraiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora