Haru Haru. ➸ Kwon Ji Yong.

Especial Navidad.

Todos son felices, hasta mi familia, a los cuales abandoné.

Hoy veo a mi hija y a mi querido poniendo las luces de Navidad en el árbol.
Dichas luces eran rojas, naranjas, azules, blancas...
Añoro la navidad.

Bueno, en realidad añoro mi cuerpo.
Llevo ,aquí, observando, viendo como pasa el tiempo, viendo a mi hija crecer, viendo a mi amado llorar por la noches.

Llorando por mí.

Vago por la habitación, mirando las luces, mirando a mi familia. Olía a galletas.

También añoro las galletas.

Después de una exhaustiva lucha con los adornos, consiguen ponerlas bien, niego con la cabeza.

JiYong, idiota.

(***)

Llegó la hora de dormir, fui a desearle buenas noches a mi niña.

Tenía un largo pelo marrón, tez pálida, pestañas bien definidas, nariz pequeña, labios finos y rosados, en fin, un angelito.

Después, como de costumbre, voy a acostarme al lado de mi amor, él se había descuidado un poco, pero para mí sigue siendo perfecto. Acaricio su mejilla levemente y se estremece, toca su mejilla y sonríe.

-Minnie... -susurra.

Sonrío y juego con su pelo. Entonces, se me ocurre una idea, veo un bolígrafo encima de un papel.

《Intentaré cogerlo y escribir...》

Voy a la mesilla y escribo:

Ji...
Sí, estoy aquí.
Duermo todas las noches a tu lado, acaricio tu pelo por las noches y te beso la mayoría del tiempo.
Veo a nuestra hija crecer...
Es la sexta vez que intento coger un bolígrafo y poder escribir, y es la única en la que he podido hacerlo. Será la magia de la Navidad o tal vez el destino.
Oh dios, pagaría por abrazarte en físico y poder estar a tu lado...
Te quiero, gruñón.

Dejo el bolígrafo y el mira el papel impresionado, empieza a leer y conforme lo va haciendo, una amplia sonrisa.

-Yo voto por la magia. Quiero que estés aquí, conmigo, con nosotros. -dice cerrando los ojos.

Le doy la vuelta al papel y escribo.

Vamos a dormir, anda.

Lo lee y asiente.

-Sí, será lo mejor.

Se tumba y yo a su lado, como todas las noches desde que me fui.

-Te quiero... -dice.

《Yo más, mi amor...》

25 de Diciembre.

-¿Papá, qué haces con una mujer en la cama? -dice Sonnie curiosa.

Abro los ojos lentamente y bostezo. Miro a mi hija, que está confundida.

-¿Qué mujer...? -se gira y me mira.- Minnie...

Me quedo callada, mirando a los dos.
Él me abraza, espera, mi cuerpo, ¡tengo cuerpo!
Le abrazo con fuerza y le beso.

-Mi amor... te añoré tanto, llevo vagando por esta casa desde que...

-¿M-mamá? -dice haciendo un mojín y empieza a llorar.

Se me rompe el alma.
Ambos lloran, yo lloro.

Yo... soy feliz.

Encuentro una nota que pone:

"Solo por hoy podrás volver con tu familia pero, esta medianoche volverás a tu forma anterior."

Ambos me miran y les abrazo.

-Aprovechemos el día...

Narrador omnisciente.

Para los tres, fue el día más feliz de sus vidas, siempre lo recordarían.
Se la pasaron llorando, hablando, sacándose fotos para recordar ese día.
En un momento, Sonnie se fue porque había quedado, dejando a JiYong y a MinYoung juntos.
Desde que la pequeña se fue, ellos se dieron muestras de cariño, por todos estos años y por los siguientes.
Se besaban, se abrazaban, se decían cuanto se querían y demás cosas, las cuales es mejor no decir, para no invadir su intimidad.

Cuando Sonnie volvió, cenaron y le contaron como se conocieron, como llegaron a ser novios, como se rompió todo.

MinYoung, se dio cuenta de que él, llevaba los dos anillos.

-Ji... Dame mi anillo. -dijo ella sonriendo.

Él, se quitó el anillo y se lo dio, ella beso el trozo de metal precioso y mordió su labio recordando todo.

Suspiró, miró a su hija y le dijo:

-Quiero que lo tengas tú, y que después de ti, pase a tus hijos...

La joven asintió y abrazó a su madre con cuidado.

-Vamos a dormir, ¿vale? -dijo el varón.

Todos se alistaron para irse a la cama y MinYoung fue con Sonnie.

-Cariño, te quiero mucho, se muy fuerte. -la abrazó y la arropó como hacía todas las noches.

La joven se durmió.

Ahora, ella fue con su amado y se metió en la cama con él. Dándose más cariño, ahora que se acababa el tiempo.

-Te echaré de menos, Minnie.

-Y yo a ti...

-La magia de la Navidad... ¿no? -dijo sonriendo tristemente.

-La magia de la Navidad. -le besó y ambos lloraron hasta quedarse dormidos.

Ella sintió una sensación rara y saltó de la cama, despertando a JiYong.

-¿Qué hora es? -dijo ella.

JiYong, buscó el móvil y cuando vio la hora sonrió.

-Cariño, son las nueve de la mañana y sigues aquí.

Se quedó helada, y abrazó a su amado hasta dejarle sin aire (de forma figurada).

-No te vayas nunca más.

-Nunca.

Esa magia fue lo que hizo volver a ver a su amada. A tocarla, besarla, abrazarla.
Nunca se debe menospreciar estas fechas, los milagros existen y sobretodo en diciembre.