Malú ;《Me cambió la vida》

Capitulo 78

Cogí el móvil y marqué el numero de mi hermano. A los tres tonos me lo cogió.

- ¡Jóse, ¿estas en tu casa?!

- Si, ¿que pasa?

- Sara, que la duele mucho la herida y quiero llevarla al hospital, pero no tengo el coche.

- Vale Malú, voy para allá. Estoy allí en diez minutos como máximo. 

- ¡Muchas gracias Jóse! -dije antes de colgar-.

- Sara, en cuanto Jóse venga, nos metemos en su coche.

- Pero Malú, me cuesta mucho andar y me imagino que los paparazzis seguirán ahí.

- Pues te cojo en brazos y te meto en el coche. A mi me dan igual los paparazzis. 

- No vas a poder conmigo, estoy muy gorda -dijo riéndose-.

- Anda, tu eres tonta. Si eres un palillo. Escucha, te voy a tapar para cuando te saque, que hace un poco de frío ¿vale? 

- Vale mami -dijo riéndose mientras la ponía la manta por encima-.

A los diez minutos, escuchamos la bocina del coche de Jóse, así que cogí a Sara en brazos y abrí la puerta.  En cuanto salí por la puerta, los paparazzis empezaron a hacerme fotos y preguntas. ¿No se daban cuenta de que tenia a Sara en brazos y tenia prisa? ¿En serio? Pasé de ellos. Claramente, no respondí a ninguna pregunta y fui directa al coche de mi hermano. Él me abrió la puerta, y yo me metí con Sara en la parte trasera del coche. A los pocos minutos llegamos al hospital. Un médico se llevó a Sara y a nosotros nos dijeron que esperásemos en la sala de espera. A los diez minutos el médico salió.

- Doctor. ¿Que la ha pasado a Sara? 

- Bueno. Pues a Sara se le ha infectado la herida de la operación. Entonces se la he estado limpiando. Ahora ya la tiene mejor, aunque le va a seguir doliendo. Durante una semana, todos los días, la van a tener que limpiar la herida. Y en caso de que la duela como ahora, se va a tener que tomar una pastilla. Y si por casualidad tienen este tipo de pastillas en vuestra casa, les recomendaría que la dieran una ahora, cuando se vayan a casa.  

  - Vale, muchas gracias doctor, pero una pregunta. ¿Es normal que le haya dolido tanto la herida? - le pregunté-.

- En este caso si, ya que la infección ha sido grave, pero ya la digo, que si esta todos los días limpiándola la herida, en una semana ya estará perfecta.

- Vale, ¿ya nos podemos ir a casa o tenemos que estar aquí?

- Ya se pueden ir. Esperen un momento, que voy a por Sara.

En cuestión de unos minutos, el doctor llegó con Sara. Nos despedimos y nos metimos otra vez en el coche.

- Jóse, ¿podemos pasar un momento por una farmacia para comprar las pastillas?

- Si claro. 

- ¿Te encuentras mejor? -la pregunté a Sara poniéndola la mano en el muslo-.

- Sí. Estoy mejor -dijo sonriéndome-.  

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Hola! Espero que os este gustando la historia. Muchas gracias por los votos, de verdad:)