No conseguía dormir, no conseguía hacer nada, pasaban de las doce de la noche, y en mi mente solo aparecía una pregunta "¿Cómo diablos esto puede ser verdad?".

Salí de mi habitación intentando recordar el camino hasta la cocina, no quería que nadie me oyera no quería más problemas, el piso había dejado de rechinar.

Había logrado llegar a la cocina tome un vaso de agua y tuve cuidado de dejarlo en su lugar, oí voces en las escaleras y me apresure a esconderme atrás de el refrigerador.

-Ella es un problema que nunca debió existir. -Oí la voz de Luke con claridad, obviamente estaba hablando con alguien.

-Pero Luke, ella no tiene la culpa. - ahí estaba la voz de Jai, el dulce Jai.

-Su estúpida madre se embarazó de ella. - Respondió Luke, de nuevo, sentí como abrió el refrigerador y una parte de atrás se encendió, y me estaba quemando levemente el estomago, pero evite gritar.

-¿Y? Eso pasa muy a menudo. - Ahí estaba la voz de ese chico "Beau", tampoco parecía tener una mente tan desquiciada como la de luke.

-No entiendes Beau, por ella, ese estúpido no esta aquí. - ¿Que estúpido? ¿De que hablan? ¿Que esta pasando aquí?

-¿Era necesario secuestrarla? - preguntó Jai, eso era lo que quería saber desde el primer minuto que habia pisado esta casa.

-Tan necesario como hacerla desaparecer.- Una puerta se azotó en la parte alta de la casa, recordé no haber cerrado la puerta y maldije para mis adentros.

-¿Qué esta haciendo esta estúpida arriba?- Beau y Luke salieron de la cocina rumbo a mi habitación, salí corriendo atrás de ellos, ellos ya estaban adentro, maldije y camine despacio calmando mi respiración.

-¿Dónde estabas? - pregunto luke con tanta frialdad que jure que el mismo sol se había apagado.

-Busqué un baño. -Conteste, evitando mirarlo, Luke tomo mi mano y me azotó en la pared

-Más te vale que hayas hecho exactamente eso.- dijo poniendo su cuchillo en mi garganta, sentía la punta abriendo mi piel, sentía mi muerte cerca, una honda de miedo cruzo mi mente.

Él realmente estaba loco, y haría lo que fuera por mantenerme dominada, no había nada que hacer, asentí y salió de la habitación con Beau.

-Buenas Noches.-Grito antes de que me metiera en la cama, mi corazón se sentía acelerado, pero esta vez no quería llorar.

Él no me provocaba estar triste, el solo me provocaba entrar en pánico y gritar ayuda, había algo dentro de mi que no respondía igual que mi cuerpo, algo dentro de mi comenzaba a sentir excitación, Por Luke, porque siempre se puede estar más loca.

Sentí una mirada en mi, Jai estaba sentado a un lado de la cama, mis manos habían amanecido con picaduras debido al polvo y arañas.

-¿Ha pasado algo? - pregunté ya que Jai estaba ahora en mi cuarto, mirandome con sus hermosos ojos.

-Nada importante ¿Tu? - él contestó, con cierta dulzura ¿Cómo este ángel era hermano de aquel demonio?

-Un loco me mantiene en su casa, no se porque y no se para que, pero me apunta con cuchillos cada vez que puede. - Jai sonrió y dejo un vaso de naranja aún lado de mi habitación.

-Luke no me ha dejado que suba más que esto, dice que la comida se come abajo no en cama.- asentí mirando el suelo.

-Quiero que sepas que puedes confiar en mi... - Sonreí ante su confesión, por primera vez en mucho tiempo sentí cariño, sentí un cariño de hermanos, como si conociera a Jai de toda la vida, y ahora aquí lejos de mi familia, de mis amigos de mi vida ¿que estará pasando con ellos? ¿me estarán buscando?

-¿Cuándo me iré? - pregunté, la verdad quería salir corriendo de aquí, recordar a mi familia había dejado un hueco en mi corazón, desde que llegué aquí no había pensando en ellos.

-Eso depende de Luke. - contesto el con indiferencía.

-¿Me iré algún día?

-Supongo. -dijo el, sonaba con algo de pena, tenia pena por mi.

-¿Estoy aquí por algo que hice? - solo quería saber eso, solo eso.

-No.

-¿Entonces por que estoy aquí? -con cada respuesta mi mente formulaba otra pregunta, y solo esperaba el momento en el que me dijera "ya callate" mientras tanto seguía mirando esos ojos.

-Luke lo dirá luego. -Contestó, evadia cada pregunta.

-¿Seguro? -El me miró divertido, creí que estaría molesto por tantas preguntas, pero no era así, en vez de eso parecía divertirle.

-Espero. - eso me daba esperanza.

-¿Tienes novia? - pregunte de repente, esa pregunta había sido un error.

-¿Ha que a venido esa pregunta? - pregunto el ahora con diversion.

-Sólo intentaba que dejaras de responder a medias o que dejaras de evitar mis preguntas. -Le respondí divertida del mismo modo que el.

-No tengo.

-¿Porqué?

-No me he enamorado. -Esperaba otra respuesta, no una respuesta tan sentimental.

-¿Seguro? - comenzaba a irritarse, lo que me daba más gracia a mi.

-Tienes que bajar ya. -Dijo con tono firme, dejando a un lado aquel Jai que había hablado conmigo minutos atras.

-No me has respondido.

-No has bajado. -Suspire y me dedique a bajar, Jai sonrió y me acompaño.

-¿Porqué tu eres bueno? - dije refiriendome al hecho de que Luke era todo un demonio.

-Por que se necesitan gente buena en la vida.

-Todos necesitamos un Jai. - el me miro con una sonrisa.

-No necesariamente.

-Tu dijiste eso.

-Dije que necesitaban gente buena, no que me necesitarán a mi. - contestó Jai, con un poco de ternura.

-Dejen de pelear.- comento una voz sarcástica.

-Luke... -Mi voz sonaba cortada,

-Ameily... -Dijo como si tratará de que se notará que estaba nerviosa.

-Ha bajado al fin su majestad. - Lo ignore y seguí con Jai.

-A mi nadie me ignora.- Contestó Luke, tomando mi brazo y girandome hacia el.

-Es la regla principal de la casa, esta es mi casa, tu estas en ella, eres la invitada, pero yo soy el que manda aquí.- sonrió y entonces supe que el diablo tenía nombre y apellido: Luke Brooks.

Corazón para dos. {Jai Brooks, Luke Brooks y tu} JanoskiansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora