Uno de dos

14 0 0
                                    

Y en ese momento comprendí, encerrados entre nuestras lágrimas, comprendí ese dicho que tanto dicen de que a veces es necesario perderse para poder encontrase, también muy utilizado por él en su profesión.

Porque nos hacía falta un instante de recuerdos, no conjuntos, tristes, donde el uno se apoyase en el otro, mientras el otro con lagrimas en sus ojos seca las del uno para lograr comprender que somos distintos, que no nos aguantamos muchas veces, pero nos amamos todo el rato.

Que un silencio largo puede romperse con la mínima pregunta bien hecha, aunque esa pregunta duela, tanto como para hacer llorar al otro con la pregunta, que puedes lograr abrir recuerdos que había apartado, que no había hablado con nadie, que guardó en su interior incluso antes de conocerme. Y lloramos juntos, porque amar es eso, porque estuvimos demasiado tiempo fingiendo estar al lado estando en distancia.

Y ahí, ahí vimos cuan importantes somos en la vida del otro. Y por eso seguiremos, porque después de habernos perdido por fin nos hemos encontrado y por primera vez de esta historia, por fin nos hemos comprendido.

A Cada Sorbo De CaféWhere stories live. Discover now